El estado de la infraestructura rumana
Miles de asalariados de Dacia Renault protestaron el pasado jueves en contra de la política del Gobierno de Bucarest, acusado de haber tardado la construcción de la carretera Pitesti-Sibiu.
Valentin Țigău, 17.04.2015, 15:18
Los asalariados de Dacia Mioveni, la mayor planta del grupo Renault, que anualmente fabrica 350 mil unidades, salieron el pasado jueves a la calle para expresar su preocupación ante la posible pérdida de empleos. El fabricante francés ha anunciado recientemente que registra pérdidas a causa de la mala infraestructura rumana de transporte y que en 2020 tomará una decisión crucial si las obras de la carretera Sibiu-Pitesti no se van a finalizar. La falta de una buena infraestructura en Rumanía ha sido hasta ahora motivo de descontento también para los representantes de la empresa Ford que fabrica coches en Craiova. Los 8.000 manifestantes de Dacia han solicitado a las autoridades cumplir con la promesa relativa a la construcción de la carretera y el vicepresidente del Sindicado Dacia, Ion Iordache, ha precisado que las acciones sindicales podrían radicalizar.
He aquí la declaración de Ion Iordache:
“El objetivo principal del cual depende nuestro futuro es la carretera Pitesti-Sibiu. A lo largo del tiempo hemos constatado que tanto el gobierno actual como los anteriores nos han mentido constantemente. Renault ha anunciado que en 2020 tomará una decisión crucial si el sistema de carreteras no mejora y entonces será demasiado tarde para protestar.”
Por otra parte, el Bloque Nacional Sindical solicitó el pasado jueves al Gobierno que organizara un debate para adoptar en régimen de urgencia el Máster Plan General de Transporte en el que figure las soluciones políticas, estratégicas y financieras para consolidar una infraestructura de transporte moderna tan necesaria para Rumanía.
El primer ministro social-demócrata Victor Ponta ha pedido el cese de las protestas porque esta solución no hace más que determinar a los propietarios de la fábrica que mude su producción a otro país:
“Si las protestas continúan, la producción se va a mudar a Marruecos. Sé muy bien cuál es el nivel de los salarios en la planta Dacia, también sé cuántos proyectos he apoyado con ayuda estatal y por eso hay que ser razonables. No se olviden de que Dacia tiene una opción y no quiero que la ponga en práctica. Tenemos que ser racionales y todo saldrá bien”.
En cambio, la copresidenta del Partido Nacional Liberal, en la oposición, Alina Gorghiu, ha acusado a Victor Ponta de haber reducido de manera drástica las inversiones para obtener un excedente presupuestario. Entre tanto, el Ministerio de Transportes ha anunciado que, tras una serie de observaciones de la Comisión Europea, la autopista con una longitud de 120 km y un costo estimado de 1.600 millones de euros ocupa el primer lugar en el Máster Plan General de Transporte de Rumanía y tiene todas las oportunidades de estar acabada en 2020.
(Traducido por Brigitta Pana)