Modificaciones del Estatuto de los parlamentarios
Después de las modificaciones aplicadas este martes al Estatuto de los parlamentarios, cualquier solicitud de la Dirección Nacional Anticorrupción para aprobar el enjuiciamiento penal, la detención y la detención preventiva de un diputado o senador se sol
Ştefan Stoica, 08.04.2015, 14:51
Los parlamentarios de Bucarest han dado el primer tímido paso hacia su rehabilitación delante de la opinión pública. Han modificado su Estatuto para que el enjuiciamiento penal, la detención y la detención preventiva de un diputado o senador se puedan aprobar por la mayoría de los parlamentarios presentes en la reunión de la cámara que tiene que solucionar la solicitud de los fiscales. Debido a esta modificación, el estatuto de los mandatarios cumplirá con la ley fundamental, según había solicitado el Tribunal Constitucional. El diputado Mircea Toader de la oposición liberal ha declarado en el pleno que es una decisión necesaria desde hace mucho tiempo:
“Lo que estamos haciendo es adaptar el estatuto a lo que se debería hacer hace mucho tiempo, para que el Parlamento de Rumanía no sea un amparo para algunas personas que estén más allá de la ley. En algunos casos, se ha aprobado la solicitud de los fiscales con la mayoría de las personas presentes en la sala, y en otros casos con la mayoría del número total de senadores.”
En el futuro, las anomalías en los procedimientos semejantes a las que ha destacado el liberal Mircea Toader dejarán de ser posibles. La práctica parlamentaria se ha enfrentado recientemente a una situación de este tipo, en el caso del senador Dan Şova. La Dirección Nacional Anticorrupción había solicitado el visto bueno para detenerlo preventivamente por abuso de poder. La mayoría de los mandatarios presentes votaron a favor, pero la dirección del Senado decidió rechazar la solicitud de la DNA, por no haberse cumplido con la mayoría del número total de los senadores.
En el caso de los diputados, algunas solicitudes similares se habían aprobado por la mayoría simple de las personas presentes en la reunión, es decir que existía discriminación entre las dos cámaras. En el caso de Şova, el presidente del Senado, Călin Popescu-Tăriceanu, se defendió de las críticas afirmando que había cumplido con el reglamento. Ahora se ha declarado contento por el hecho de que la modificación del Estatuto de los parlamentarios haya eliminado cualquier ambigüedad, mostrando que los mandatarios no están más allá de la ley. He aquí la declaración de Călin Popescu-Tăriceanu:
“El Parlamento no está intentando de ninguna manera, al amparo de algunas normas que no cumplían con la Constitución, ofrecer a los miembros del Parlamento una protección distinta a los ciudadanos corrientes. Todos somos iguales ante la ley y deseamos que las modificaciones que estamos haciendo aclaren este asunto y aparten las especulaciones.”
El hecho de que algunos de los mandatarios hayan abusado de la inmunidad de manera injustificada a la hora de votar, contra las solicitudes de la DNA, ha afectado la credibilidad y la popularidad de la institución parlamentaria y ha provocado críticas por parte de los expertos europeos que evalúan la reforma judicial y la lucha anticorrupción en Rumanía. El presidente Klaus Iohannis, quien ha criticado estas prácticas de manera consecuente, se ha declarado recientemente decepcionado con el hecho de que no haya conseguido todavía convencer a los parlamentarios de que tienen que elegir el camino de la integridad y del respeto por la justicia.