La migración de los políticos
La oposición de Rumanía reacciona, tras la adopción por parte del Gobierno, de la Ordenanza de Urgencia mediante la cual los alcaldes locales pueden cambiar de partido, en un plazo de 45 días, sin perder sus cargos.
Florentin Căpitănescu, 05.09.2014, 17:48
En Rumanía, la tradición de la migración política a nivel local ha sido reanudada, precisamente en la campaña preelectoral para las presidenciales del futuro mes de noviembre. Esto es posible dada la publicación esta semana, en el Boletín Oficial, de la Ordenanza de Urgencia del Gobierno que permite a los alcaldes locales optar en un plazo de 45 días, por otro partido, sin perder sus cargos. El Ejecutivo integrado por la alianza formada por el Partido Social demócrata, la Unión Nacional para el Progreso de Rumanía y el Partido Conservador, y la Unión Demócrata de los Húngaros de Rumanía, toma la decisión motivado por el intento de desbloquear la actividad de la administración en el territorio, paralizada en opinión del Gobierno, por las reconfiguraciones políticas que siguieron a las elecciones locales del verano del año 2012.
El segmento principal de la oposición, la Alianza Cristiano Liberal, integrada por el PNL y el PDL, declara a su vez que dicha ordenanza no hace más que alentar el transfuguismo, fenónemo ya endémico que queda en la base de la formación de muchos gobiernos, y ataca encarnizadamente la Ordenanza. El inicio de una moción de censura, el ataque en contencioso administrativo ante el Tribunal de Apelación de Bucarest y la información del Asesor del Pueblo, forman parte del arsenal mediante el cual la oposición, que corre el riesgo de perder gran parte de sus alcaldes locales, trata de impedir la aplicación de la ordenanza. Por otra parte, últimamente ha sido solicitada insistentemente la posición del Asesor del Pueblo, que en opinión de la oposición debería atacar el acta normativa ante el Tribunal Constitucional. He aquí la reacción de Victor Ciorbea, el Asesor del Pueblo
«Finalmente, tenemos tanto la Ordenanza publicada en el Boletín Oficial, como el informe escrito y los argumentos orales. Trataremos de contestar a todo esto lo antes posible»
A su vez, los observadores políticos aprecian que detrás de la ordenanza promovida por el gobierno, quedan intereses electorales pragmáticos, especialmente del PSD, que a pesar de ocupar una posición central, controla con mano fuerte los juegos políticos, pero a nivel de la administración local recibe una réplica fuerte por parte de la oposición. Los analistas consideran que el argumento supremo con el cual el PSD intenta seducir a los afines a la oposición, el del dinero presupuestario, es difícil de ignorar hasta por los más leales.
Por otra parte, en las condiciones en que en Rumanía, es consabido el papel esencial que los alcaldes desempeñan en todas las elecciones, los recién reclutados aportarían sin lugar a dudas un soporte electoral adicional al candidado del PSD a las presidenciales- a saber el primer ministro Victor Ponta. Además, con la aplicación de la Ordenanza gubernamental de urgencia, concluyen los observadores, el PSD trata de matar dos pájaros de un tiro: asegurarse una presencia cuanto más sustancial posible en el territorio y allanar el camino del primer ministro Ponta hacia el primer cargo en el Estado.