Rumanía apoya la extensión de la UE
La República Checa, Eslovaquia y Rumanía, países excomunistas que han entrado en los últimos diez años en la Unión Europea, comparten su experiencia con los países que aspiran a ingresar.
Bogdan Matei, 23.06.2014, 17:01
Como frontera oriental de la Unión Europea y la OTAN, Rumanía está directamente interesada en la extensión hacia el este de estos espacios de la libertad y seguridad. A través del presidente, del Gobierno y del Ministerio de Exteriores, Rumanía ha apoyado constantemente el ingreso en las estructuras europeas y euroatlánticas de las repúblicas exsoviéticas que han elegido alejarse de Moscú y adoptar los valores de Occidente. El espacio de los Balcanes Occidentales también ha despertado el interés de la diplomacia rumana. Hace 20 años, esa zona se vio devastada por las guerras sangrientas de la antigua Yugoslavia, pero ahora se ha estabilizado y parece acercarse a la normalidad.
El primer ministro Victor Ponta, posible candidato al cargo de presidente, se ha implicado ya en importantes casos de política exterior. Este fin de semana, Ponta ha invitado al Delta del Danubio a sus homólogos de tres estados que aspiran a ingresar a la Unión Europea, es decir, Iurie Leancă de la República de Moldavia, Irakli Garibashvili de Georgia, Aleksandar Vučić de Serbia, y a los responsables de dos estados miembros, Robert Fico de Eslovaquia y Bohuslav Sobotka de la República Checa.
La sorprendente reunión ha tenido lugar antes del 27 de junio, cuando los gobiernos de Chisináu, Tiflis y Kiev firmarán los acuerdos de asociación y libre comercio con la UE. Los debates del Delta del Danubio se han centrado en la colaboración entre los países del este de la Unión y la manera concreta en la que los estados miembros pueden apoyar el recorrido europeo de los candidatos. El primer ministro Victor Ponta ha vuelto a afirmar lo siguiente:
“Rumanía, pero también los demás miembros de la UE de esta región, sostienen firmemente el recorrido europeo y democrático de Moldavia, Georgia y Ucrania. Existen numerosos aspectos que podemos debatir juntos respecto a la integración europea, a las cosas positivas que han hecho Rumanía y la República Checa y a los errores que hemos cometido y que espero que nuestros amigos de la región eviten.”
En nombre de la administración pro-occidental de Chisináu, el primer ministro Iurie Leancă ha agradecido el constante apoyo del Gobierno de Bucarest:
“El haber estado aquí casi dos días nos ha ofrecido energía positiva y una oportunidad de tener debates útiles para que el 27 de junio, en Bruselas, además de firmar el acuerdo de asociación, tengamos suficiente energía, suficiente poder para pasar a la siguiente etapa, es decir, poner en marcha las normas de este acuerdo sumamente importante para el futuro de la República de Moldavia.”
Aunque sea un impulso para los candidatos exsoviéticos, el apoyo de los miembros excomunistas de la UE ayuda, pero no soluciona fácilmente el caso de su integración. Esto no se soluciona ni en el Delta, ni siquiera en Bruselas, sino a través de las reformas de los gobiernos de Chisináu, Kiev y Tiflis.