Domingo 2 de diciembre
Cartas de la semana
Victoria Sepciu, 02.12.2018, 11:57
-¡Muy buenas noches, queridos amigos! y ¡bienvenidos a nuestra primera reunión del mes de diciembre!, un mes especial, porque siempre lo relacionamos con cosas bellas: las fiestas navideñas y de fin de año, la luz y las esperanzas renovadas. Diciembre es además el período de los balances sobre lo que ha sido y de los proyectos sobre lo que vendrá. Espero, amigos, que este mes nos traiga a todos días llenos de paz y alegrías y que en nuestras almas florezcan sueños y luces.
-Bueno, pues para los rumanos las fiestas ya han empezado: el 30 de noviembre celebramos el día de San Andrés, el patrón de Rumanía y el primero de diciembre festejamos el Día Nacional de Rumanía, fecha que conmemora la finalización del movimiento histórico que condujo a la unión de todas las provincias históricas rumanas en un solo estado nacional, Rumanía. Como muchos de vosotros ya saben, este año ha sido especial para los rumanos porque el Estado nacional unitario rumano ha cumplido 100 años, motivo de fiesta y alegría. La unión de todas las provincias rumanas fue un proceso en etapas que tuvo lugar durante varios siglos. En 1600, el vaivoda Miguel el Valiente realizaba la primera unión política de Transilvania, Moldavia y Valaquia. Un año más tarde fue asesinado, acto que respondía perfectamente a los objetivos de los poderes vecinos que no aceptaron la creación de un Estado independiente que podía modificar de manera sustancial el número de fuerzas de la zona.
En 1859, bajo el reinado de Alexandru Ioan Cuza, Moldavia y Valaquia vuelven a unirse en un nuevo Estado, Rumanía. Luego, en 1866, el primer soberano de Rumanía de la Casa de los Hohenzollern, Carlos I, moderniza el Estado y en 1877, después de la guerra ruso-turca, Rumanía obtenía la independencia del moribundo Imperio otomano después de siglos de obediencia.
Carlos I muere en 1914 y su sobrino Fernando se convierte en sucesor. Bajo su reinado, Rumanía entra en la Primera Guerra Mundial para realizar su unidad nacional, proceso finalizado cuatro años más tarde mediante la voluntad de todos los rumanos de las provincias que hasta aquel entonces estaban bajo ocupación extranjera.
El 27 de marzo de 1918, a finales de la primera conflagración mundial, sobre el trasfondo de la disolución del Imperio zarista, el Consejo del País, organismo legislativo de Besarabia, votaba la unión de esta provincia con mayoría de rumanohablantes con la Patria Madre. Fue el primer acto de la constitución del Estado nacional unitario rumano, proceso que, a finales del mismo año, finalizó con la entrada el 28 de noviembre, de Bucovina (en el noroeste) bajo la autoridad de Bucarest en un contexto europeo muy favorable. Después de que las Potencias Centrales fueran derrotadas en la Primera Guerra Mundial beneficiándose del apoyo militar concedido por el rey Fernando y del apoyo moral y diplomático de la reina María, los miembros del Congreso General de Bucovina votaban en Cernauti, por unanimidad, la unión con Rumanía. Siguió la unión con las demás provincias rumanas de Transilvania (en el centro), Banato, Maramures y Crisana (en el oeste) que hasta entonces estaban bajo la ocupación del Imperio habsbúrgico y así nacía, el 1 de diciembre, el Estado nacional unitario rumano después de un proceso muy difícil. En el plano internacional, el nuevo estatuto político territorial de Rumanía fue reconocido mediante los tratados firmados en el marco de la Conferencia de paz de París (1919-1920). Desafortunadamente, la unión no duró mucho. En verano del año 1940, tras un ultimátum, la Moscú de Stalin anexionó tanto Besarabia como el norte de Bucovina, territorios que en el presente pertenecen a las antiguas repúblicas soviéticas de Moldavia y Ucrania. Centenares de miles de habitantes de Besarabia se refugiaron entonces en la Rumanía disminuida, otras decenas de miles fueron deportados a Siberia o Kazajistán y en su lugar los ocupantes trajeron colonos reclutados de todos los rincones del imperio.
Y ahora, queridos oyentes, paso a contestar la correspondencia de hoy y quisiera agradecer, primero, los saludos y buenos deseos que varios amigos oyentes nos mandaron con motivo del Día Nacional de Rumanía. Uno de ellos es Hugo Longhi de Rosario-Argentina, quien nos envió este mensaje: Al aproximarse la celebración del Día Nacional de Rumanía, la creación de la Rumanía Grande, que pronto llegará al centenario, quisiera saludarte y en tu nombre a todos los rumanos que yo quiero tanto.
Un fuerte abrazo en este día tan importante para el país.
¡MUY FELIZ 1 DE DICIEMBRE DIA DE LA FIESTA NACIONAL RUMANA!, es el mensaje que nos envió Miguel Ramón Bauset desde Alboraya, Valencia, España.
-Muchas gracias, amigos, por saludarnos en nuestro aniversario y por seguir apoyando nuestra labor. A mi turno os mando un gran abrazo y mis mejores deseos. ¡Hasta siempre!
Miguel Ramón Bauset desde Alboraya, Valencia, España, nos mandó asimismo un nuevo material de su serie de artículos reunidos bajo el título de “ESTAMPAS DE LA VIDA”, su título es: UNA GRAN PALABRA DE SIETE LETRAS.
Había transcurrido el verano del año 2010 y con la llegada del curso escolar la familia de Sergio que tenía un único hijo de 16 años, Fede, solicitó un intercambio con la familia de un joven de Estados Unidos afín de perfeccionar ambos el mundo de los idiomas. El momento llegó y apareció Peter en su casa. Peter era un muchacho un año mayor que Fede que conocía algo el castellano. Muy pronto se integró con la familia española de Valencia y se matriculó en el curso de la ESO que le correspondía.
Ambos aprendieron y perfeccionaron los idiomas castellano e inglés. La inmersión fue total y muy positiva. Mientras tanto las familias hicieron una gran amistad, primero en la distancia y posteriormente en la realidad. Los padres de Peter viajaron a Valencia en dos ocasiones y los de Fede en el verano del año siguiente estuvieron en Ohio un mes. El curso escolar resultó brillante y a la vez Peter conoció in situ costumbres, ocio y todas las actividades valencianas que se presentaron. Un intercambio brillante, eficaz y muy positivo.
Cuando el muchacho volvió a América, los contactos siguieron. Había quedado como un miembro más de la familia. La amistad siguió.
En las fallas siguientes, se presentó por sorpresa en casa de Sergio. Menuda alegría se llevaron todos. Disfrutó y mucho con esas fiestas que le impactaron el año anterior.
En los siguientes años la amistad todavía se engrandeció más y a día de hoy es todo un modelo de lo grato que puede resultar un buen intercambio.
Hace pocos días Peter encontró un hueco en su apretada agenda y decidió de nuevo viajar a tierras valencianas para ver a su segunda familia y pasar nueve días entre ellos. ¡Menudo recibimiento!
A pesar de ser época de trabajo y no vacacional, se buscaron huecos para atenderle como merece, y participó muy mucho: dio una conferencia a alumnos de bachillerato en su antiguo colegio sobre Hollywood y el cine puesto que él estudió allí; después, se encontró con amigos, con compañeros de clase, dio varias vueltas por Valencia orientándose a la perfección, compartió sesiones de trabajo con su ya gran amigo Fede que hoy es un gran trompetista, tuvieron grandes charlas y sobremesas para conocer más en vivo cómo habían progresado sus vidas, y hasta tuvo momentos para saborear la horchata de chufas junto a los populares fartons, bebida que le encanta desde que la probó por primera vez.
Aunque el tiempo no le acompañó demasiado en estos episodios recientes de lluvias, lo importante fue saber de él y conocer los proyectos de cara al futuro.
Fueron nueve días intensos, combinando su visita con el trabajo cotidiano, pero son amistades que han dejado, dejan y dejarán huella, mucha huella.
Su visita coincidió con el DIA DE ACCIÓN DE GRACIAS americano, y Peter a sus 25 años, se brindó a preparar una cena al más puro estilo de su tierra, o sea tal y como se prepara en América.
No faltó el tradicional pavo relleno, el maíz, el puré de patatas, las judías verdes con cebolla frita, champiñones y maíz, el caldo de pavo y la tarta de calabaza. Todo eso regado con buen vino y con una gran mesa de comensales entre familiares y amigos.
Al final del ágape uno a uno de los asistentes dio gracias por lo que le había acontecido durante el año, terminando la cena con una grata conversación entre los asistentes, de esas que no se ven hoy en día ante la invasión, incluso comiendo, de la televisión y de las redes sociales.
Y como todo tiene un principio y un final, los nueve días se esfumaron y llegó el día de la partida, triste y sentida como suele suceder, pero a la vez pensando en esa anunciada próxima visita a las fallas del 2019 que están a la vuelta de la esquina. Mientras tanto el contacto seguirá entre las dos familias y entre los dos jóvenes que viven a miles de kms, pero están muy cerca por la gran amistad que aquella experiencia de hace ocho años ha llevado consigo.
Un ejemplo más de lo que puede hacer el significado de una simple palabra de siete letras: A M I S T A D.
Hay que saber quiénes son los buenos amigos y diferenciar entre los que no lo son. Ahí está la clave, la gran clave de todo.
El ejemplo de las dos familias, y de sus dos hijos demuestra que todavía hay gente buena en el mundo, que la amistad es una acción extraordinariamente positiva que, sabiéndola mantener, es un gran tesoro de la vida. MIGUEL RAMÓN BAUSET
-Muchas gracias, Miguel, por este bonito comentario y por haberlo compartido. Tienes razón, querido amigo, “La amistad auténtica es tan importante y vale tanto, que tienes que cuidarla como si fuera el tesoro más grande del mundo”. “Todos seguimos caminos diferentes en la vida, pero, da igual dónde y hacia dónde vayamos, ya que siempre llevamos una pequeña parte del otro dentro de nosotros “. Son dos frases sobre la amistad que he encontrado en internet y que me parecen muy acertadas.Espero, Miguel, que disfrutes de este mes y que lo pases de maravilla. Un gran abrazo y ¡Hasta pronto!
Quisiera enviar ahora mis felicitaciones y buenos deseos a nuestros viejos amigos y constantes colaboradores, Celio Romais de Brasil, Raul Guerrero de Argentina y José Moacir Portera de Melo, también de Brasil, quienes cumplieron años hace poco. Una vida llena de emociones, dijo José, precisamente porque escucho emisoras internacionales desde 1987. La radio es mi compañera.
Queridos amigos, espero que lo hayáis pasado en grande en compañía de vuestros seres queridos. Os mando un fuerte abrazo junto con mis mejores votos. ¡Muchas felicidades!
Nos escribe por primera vez Humberto Durier de Rio de Janeiro-Brasil. Este amigo nos manda sus saludos y sus buenos deseos y adjunta un informe de recepción.
-Muchas gracias, Humberto, por escuchar nuestros programas en castellano y por haber contactado con nosotros. Espero, amigo, que mantengas el contacto con RRI y que nos escribas siempre que puedas. Por ahora te mando un cordial saludo y quedo a la espera de tus noticias. ¡Hasta la próxima!