La historia del edificio situado en la calle Doamnei no. 4
Uno de los bancos históricos de Rumanía ha sido incluido en el circuito turístico de Bucarest al ser transformado en hotel de lujo.
Valeriu Radulian, 18.08.2021, 18:36
En esta edición de “Vale la pena visitar Rumanía hacemos un alto en la calle Doamnei, no 4., en el casco viejo de la capital para conocer la historia del edificio que albergaba uno de los bancos históricos de Rumanía y que acaba de ser transformado en hotel de lujo.
Ese edificio tiene una historia muy interesante. Era tan conocido en la época que incluso el autor Marin Preda, considerado el novelista más importante de la literatura rumana posterior a la Segunda Guerra Mundial lo mencionó en su novela “La familia Moromete, obra que le trajo al autor el Premio Literario del Estado en 1956. La novela se concentra alrededor de una familia de campesinos rumanos, algo similar a la familia del propio autor. De la novela nos enteramos que Ilie Moromete había recibido un préstamo del banco Marmorosch por un valor de 5.000 lei. Tenía que devolver este dinero más los intereses. En caso contrario, el banco le quitaba sus tierras.
En fin, volvamos a nuestro tema de hoy. Este edificio construido hace más de 100 años que albergaba el Banco Marmorosch, uno de los más antiguos bancos rumanos, es monumento histórico del grupo A y las obras de restauración fueron bastante complicadas, porque en estos casos se requiere de mucha atención durante la rehabilitación. Por más de 3 décadas el edificio construido entre 1914 y 1923 había quedado en la ruina. De la riqueza a la pobreza absoluta, pero el edificio logró renacer gracias a una inversión de 42 millones de euros. Recientemente, fue inaugurado e incluido en el circuito turístico albergando ahora un hotel de lujo. Está situado en una calle del casco viejo de Bucarest, cerca de la famosa Calea Victoriei y a 2 minutos andando de la sede del Banco Central de Rumanía.
El edificio fue proyectado por un conocido arquitecto rumano, Petre Antonescu, 1873-1965, discípulo del que es considerado el padre del estilo neo-rumano, Ion Mincu. Cabe mencionar que hoy en día la Universidad de Arquitectura de Bucarest lleva su nombre, un tributo por su inestimable contribución a la cultura rumana. Petre Antonescu continuó el trabajo de su profesor y contribuyó a definir un estilo nacional de arquitectura. Entre las obras maestras de Petre Antonescu cabe mencionar también el edificio del Ayuntamiento de Bucarest, la sede del Instituto Cultural Rumano o el Palacio Kretzulescu, que alberga la sede de la UNESCO en la capital rumana. Hay muchos más y todos y cada uno continúan deleitando las miradas de los que pasan por delante de estas joyas arquitectónicas.
Este edificio situado en el centro de Bucarest es uno de los más representativos para el estilo neo-rumano. Como decía, fue construido para albergar un banco histórico rumano, creado por Iacob Marmorosch en 1848. Más tarde, en 1864, éste se asoció con Mauriciu Blank. Este banco ha desempeñado un papel importante para el desarrollo de la industria rumana a finales del siglo XIX. El edificio tiene influencias bizantinas y góticas, pero también moldavas, mientras que el interior fue diseñado al estilo Art Nouveau y Art Déco.
El hotel resultado de la rehabilitación del antiguo banco dispone de 217 habitaciones y un restaurante con una capacidad de 200 personas. Las ventanas muy grades dejan entrar mucha luz a las habitaciones. El proceso de restauración se ha basado en estudios muy complejos. Se estableció exactamente qué se tenía que conservar, qué había que poner de relieve y qué se tenía que modificar y cómo. El Ministerio de Cultura tuvo que dar su visto bueno antes de que empezaran las obras porque se trataba de un edificio monumento histórico.
Como mencionaba antes, el hotel dispone de 217 habitaciones y tal vez la más impresionante es la antigua oficina de Iacob Marmorosch que fue transformada en una suite presidencial.
Nada más pisar el umbral de este hotel, una sala enorme, con techo de vidrio nos deja sin aliento, es tan impresionante que uno se puede imaginar que se equivocó y entró a un museo.
Igual de impresionante es la antigua caja fuerte del banco que fue transformada en bar. Ya no guarda dinero, sino licores de los más finos. Está ubicado en el sótano del edificio y fue completamente restaurado. Creo que podemos afirmar que es el único bar que tiene paredes que miden 40 centímetros de grosor con sistemas de cierre completamente funcionales. Se compone de dos habitaciones que albergan más de 3.100 cajas de valores que se restauraron y conservaron todas. Incluso la puerta metálica fue restaurada y es la original. ¿A que sí te apetece tomar una copa en esta caja fuerte?
Tras un trabajo agotador y una inversión de 42 millones de euros un grupo lituano integra este edificio histórico en el circuito turístico de la capital Bucarest. Los bucarestinos pueden disfrutar de una copa en el bar y aprovechar para admirar este edificio, mientras que los turistas pueden gozar de todas las comodidades de un hotel de 5 estrellas.
Termina aquí nuestro viaje de hoy en el que hemos descubierto algunos de los encantos del Bucarest de antaño y de modo especial este edificio histórico situado en el casco viejo de Bucarest.
La próxima semana volveré con más información turística. Mientras tanto, si se quieren poner en contacto conmigo, lo pueden hacer enviándome mensajes al correo electrónico valeriuradulian@yahoo.es o dejándome su mensaje en la publicación de Facebook, en nuestro perfil de la radio: Radio Rumanía Internacional o en mi perfil personal Valeriu Radulian
Hasta la próxima semana.