La miscelánea: ¿Cuánto reciclamos en Rumanía?
Sea cual sea el nivel de conocimientos, la sostenibilidad debería ser algo por lo que los ciudadanos deberían guiarse en la actualidad.
Brigitta Pana, 08.07.2024, 15:00
Para que todos los esfuerzos respaldados por los países europeos se consideren un éxito, los ciudadanos son los principales peones que deben cumplir las normas impuestas por las autoridades. Dependiendo de su acceso a la información y de su grado de exposición a las acciones inteligentes, las personas han desarrollado diferentes comportamientos de reciclaje. La importancia que la gente concede a este ámbito varía de un Estado a otro.
En 2022, al igual que en 2021, los rumanos ocuparon el último lugar de la Unión Europea en cuanto a la producción y reciclaje de residuos municipales, según los datos publicados en febrero por Eurostat. Así, en 2022, una persona de la Unión Europea produjo 513 kg de residuos municipales, 19 kg o un 4% menos que en 2021 (532 kg), pero 46 kg más que en 1995 (467 kg).
La cantidad de residuos municipales varía mucho entre los Estados miembros de la UE. En 2022, los «campeones» en la producción de residuos municipales en la UE fueron los austriacos (827 kilogramos por persona) y los daneses (787 kilogramos). En el polo opuesto se encuentran los rumanos, que en 2022 produjeron «sólo» 301 kilogramos de residuos municipales per cápita, lo que supone un ligero descenso respecto a los 302 kilogramos de residuos municipales per cápita en 2021. Sólo el 11% de los residuos se recicla, el resto acaba en el vertedero.
Rumanía fue condenada por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea a pagar una multa de 1,5 millones de euros por no cerrar 31 vertederos que no cumplían las normas. Hasta la fecha, Rumanía ha cerrado y rehabilitado 92 vertederos. De un distrito a otro, de un sector a otro, tenemos diferentes soluciones de reciclaje. En Bucarest, por ejemplo, en la mayoría de los sectores la basura va directamente al vertedero, aunque una gran parte podría reciclarse. Se estima que cada año se generan 11.200 millones de toneladas de residuos sólidos en todo el mundo. A día de hoy, solo se recicla el 9 % del plástico producido, mientras que el 12 % se incinera y el 79 % restante se acumula en vertederos, basureros o directamente se vierte en el medio ambiente.
Para facilitar el reciclaje, Rumanía implementó el 30 de noviembre de 2023 un sistema de garantía y devolución. En virtud de este, los consumidores pagan una garantía de 50 bani (10 céntimos de euro) cuando compren una bebida en un envase de vidrio, plástico o metal no rellenable y recuperarán la garantía cuando devuelvan el envase. Con la implementación del Sistema de Garantía de Devolución, Rumanía da un paso adelante en la consecución de los objetivos medioambientales fijados por la Unión Europea. Dado que nuestro país se encuentra a la cola de la clasificación de la Unión Europea en cuanto a tasa de recogida selectiva de residuos, con la alarmante cifra de sólo el 13%, la implementación del SGD es una medida esencial para mejorar esta situación y proteger el medio ambiente para las generaciones futuras. En cifras, el objetivo del Sistema de Garantía de Devolución es reciclar unos 7.000 millones de envases de bebidas al año. No debería ser difícil: al parecer, 6 de cada 10 rumanos están dispuestos a recuperar la garantía que pagaron con cada bebida que compraron al devolver sus envases de plástico.
Los rumanos afirman que quieren reciclar pero encuentran obstáculos. Según una encuesta realizada por Recolamp en toda Rumanía, se ha identificado una serie de características nacionales de los ciudadanos rumanos. Más de la mitad de los encuestados, el 58%, opta por informarse sobre las últimas noticias y acciones de reciclaje a través de Internet. Internet se considera un buen lugar para estar al día de lo que ocurre en el ámbito del reciclaje, mientras que en el polo opuesto están las personas cercanas (familia o amigos). El factor más importante para los hogares que reciclan residuos es la proximidad de los centros de recogida. Más de la mitad de los encuestados sería más responsable de los residuos que genera si tuviera un centro de recogida cerca de su casa. Así pues, podemos deducir que la intención de recoger selectivamente los residuos existe a escala nacional, pero las personas que viven a una distancia significativa de los centros de recogida tienen un índice de participación menor. Rumanía también está a la cola en este aspecto, ya que se encuentra entre los 18 países con un alto riesgo de no alcanzar el objetivo del 55% de preparación para la reutilización y el reciclaje de los residuos municipales para 2025. Además, nuestro país también forma parte del grupo de 10 países en riesgo de no alcanzar el objetivo del 65% de reciclaje de residuos de envases, también para 2025, según una evaluación de la Agencia Europea de Medio Ambiente. Además, algunos países siguen depositando en vertederos la mayor parte de sus residuos municipales y es probable que no alcancen el objetivo de vertido para 2035″, señala el comunicado de prensa de la Comisión Europea.
Reciclar reduce la cantidad de desechos que acaban en los vertederos, sin duda una gran fuente de contaminación ambiental donde se emiten gases de efecto invernadero, como el metano, que contribuyen al calentamiento global. Además, los desechos pueden filtrarse en el suelo y en las aguas subterráneas, lo que puede contaminar los suministros de agua potable y afectar negativamente a la salud pública.