El Teatro Ţăndărică cumple 70 años

Creada en 1945 bajo el nombre de Teatro de Títeres Ţăndărică, la institución dirigida en los 15 últimos años por Călin Mocanu se ha convertido desde 2008 en el Teatro de Animación Ţăndărică.

Andrei Popov, 04.10.2015, 13:09

Creada
en 1945 bajo el nombre de Teatro de Títeres Ţăndărică, la institución dirigida
en los 15 últimos años por Călin Mocanu se ha convertido desde 2008 en el Teatro de Animación
Ţăndărică. Se trata del más antiguo teatro de este género, donde han colaborado
artistas famosos como Radu Penciulescu, Silviu Purcărete, Cătălina Buzoianu, Cristian Pepino,
Victor Ioan Frunză o Ion Caramitru.

El
director Călin Mocanu habló sobre el repertorio del Teatro Ţăndărică :

Soy el director del Teatro Ţăndărică, un
teatro que cumple 70 años desde su fundación, pero no es nada viejo. Esta es
una de sus características: siempre se ha adaptado a la actualidad y ha sido
contemporáneo con los niños, con los adolescentes y con los adultos. Tenemos
representaciones para niños, así como para jóvenes y adultos, espectáculos de
animación como Fausto, Candid, Play Shakespeare o La Galaxía Svejk,
destinados a los adolescentes y los adultos. Además de estos espectáculos, ya
conocidos, contamos con historias contemporáneas, obras de Vişniec y otros autores contemporáneos
europeos. De esta forma, intentamos
convencer a nuestro público de todas las edades de que nosotros formamos parte
de la gran familia del teatro visual. Queremos estimular el teatro de
animación, el teatro visual, el teatro de baile de títeres y el teatro cabaret
de títeres… Contamos con títeres con personajes diseñados por un artista. Cada
uno de ellos representa una creación artística y sus manipuladores son
grandes actores. Un intérprete
manipulador debe ser un buen actor, un buen cantante y debe tener una larga experiencia de
movimiento plástico sin el cual no podría sugerir la simbolística del
respectivo personaje.

El Teatro de Animación Ţăndărică de Bucarest es el más
antiguo teatro de títeres del país. ¿Qué tiene distinto ? Nos lo explica el actor y
director Călin Mocanu:

Nuestro antiguo teatro ha sido una fuente de
inspiración para muchos teatros de nuestro país, como los de Arad o de
Braşov. El Teatro Ţăndărică ha iniciado aquí una sección de actores
manipuladores de títeres (…) ¿Qué tenemos distinto? El Teatro Ţăndărică es una experiencia de creación colectiva, lo que
significa que es un estado de ánimo, como si fuera un ser vivo. Esta es nuestra
forma de entender el teatro, lo que nos ha acompañado a unos lugares muy
interesantes, nos ha unido y nos ha determinado a luchar. !Piénselo!, que durante 70 años de historia,
hemos tenido muchos regímenes políticos que nos han afectado de manera
significativa. El Teatro ha sido fuerte e incluso ha generado un movimiento europeo.

A veces
considerado el hermano pequeño y más modesto del teatro, digamos para adultos,
el teatro de títeres en general y el Teatro Ţăndărică, en particular, han
generado nuevas modalidades de expresión y han creado espacio para la libertad
de la palabra como resistencia artística ante el régimen comunista. Călin
Mocanu:

Entre los años 1950 y 1970 aquí colaboraron
todos los artistas rumanos desde bailarines hasta escultores, coreógrafos,
actores, manipuladores o dramaturgos… que han creado el teatro de títeres moderno, que se vinculaba al movimiento del
arte plástico rumano y europeo. Hay que comprender todas estas cosas. Según
decía rotundamente Cristian Pepino, el teatro de títeres es arte plástico en
movimiento. Y así lo es. Durante 70 años, la columna vertebral del teatro ha sido el arte plástico. Textos
atrevidos, una escenografía impresionante, actores manipuladores buenísimos y
voces de actores famosos … casi todos los actores que forman la generación de
oro han sido las voces de los títeres del Teatro Ţăndărică. Aquí en los años
70, nacieron Las Nocturnas. Era un movimiento que apoyaba el experimento,
contra el teatro osificado.

En
1990, el director Silviu Purcărete presentó, y con mucho gusto según declara,
una representación de La Cenicienta, que no
es una representación del conocido cuento de
La Cenicienta, sino una creación del director Silviu Purcărete,
en el sentido de un comentario tierno y al mismo tiempo irónico sobre esta
conocida historia . Silviu Purcărete ha recordado aquel
momento:

No era una idea muy buena, pero
en aquel periodo las representaciones se grababan. Se hacía una grabación como
en la radio, con música y voces. Luego se ponía la cinta y los manipuladores
solo venían con los títeres sin hablar en el escenario. Eso se hacía en el Ţăndărică, para facilitar
las cosas, porque de otra manera habría sido muy difícil. En Constanza, los actores hablaban en el
escenario, pero en el Ţăndărică era otra cosa, sobre todo porque ellos tenían muchas giras. Recuerdo que una
vez para esta representación tuve que grabar una cinta en rumano, otra en
inglés y en español y otra en alemá . Este espectáculo todavía forma parte del
repertorio del teatro. Los actores se van, los pobrecitos, pero los títeres se
quedan. El público es siempre nuevo, diferente. Toda la representación parece
desarrollarse en un armario. Me gustaría ir a verlo!.

(versión española Simona
Sarbescu)