En el norte de Rumanía, entre los actuales distritos de Maramureș y Bistrița-Năsăud, en una zona montañosa y muy pintoresca, se escribió una página importante en la historia de los Ferrocarriles Rumanos y en la historia del comunismo. Se trata de la carretera de hierro entre las localidades de Salva, en Bistrița-Năsăud, y las localidades de Vișeul de Jos y Vișeul de Sus, en Maramureș.
El sentimiento de amistad entre las naciones, especialmente las socialistas, fue cultivado asiduamente por la propaganda comunista y mucha gente todavía cree en él. Pero las lecciones de la historia demuestran lo contrario: cuando un país necesitaba ayuda de una nación considerada amiga, la mayoría de las veces no la recibía.
El 27 de marzo de 1918, Besarabia se unió al Reino de Rumanía después de la votación del Consejo Nacional, el órgano representativo de la provincia. Inmediatamente después de la salida de Rusia de la Primera Guerra Mundial, los desórdenes creados por el ejército ruso constituyeron un peligro real para la vida y la propiedad de los civiles. Un factor decisivo para estabilizar la situación fueron las tropas voluntarias de Transilvania que, junto con el ejército rumano, garantizaron la paz y el orden.
En su historia, el ejército rumano ha tenido generales que lucharon con honor en los grandes conflictos en los que participó Rumanía en el siglo XX: dos guerras mundiales y conflictos locales como las guerras de los Balcanes y la guerra rumano-húngara del año 1919.
En marzo de 1990, la Sociedad "Timişoara", formada por intelectuales cívicos y anticomunistas, publicó la Proclamación de Timişoara, uno de los documentos más importantes de la Revolución rumana de diciembre de 1989. Exigía reformas profundas y el retorno a los principios de una sociedad libre. En el famoso punto 8, el documento proponía la depuración de la sociedad rumana, lo que suponía romper con el pasado comunista.
Una de las fechas con un significado profundamente negativo en la historia de la Rumanía contemporánea fue el 6 de marzo de 1945.
La historia de la prensa durante los años comunistas también tiene un pequeño capítulo, un tanto honorable, en el que los periodistas intentaron aplicar la ética profesional y ser la voz de la sociedad.
La triste fama de la ciudad de Aiud, con una población de unas 22 mil personas, viene dada por la cárcel que allí se encuentra.
Durante la política de sistematización de la capital rumana en los años 80 también se perdieron edificios del patrimonio religioso. Los lugares de culto y sus dependencias, tanto en el centro de la ciudad como en sus afueras, se convirtieron en monumentos emblemáticos para los amantes del arte y la cultura.
En 2025, la Iglesia Ortodoxa Rumana marca el cumplimiento de dos épocas redondas de su historia. El primero es el 140 aniversario de la autocefalia, en 1885, y el segundo es el centenario del Patriarcado, en 1925.
Independientemente de las distancias físicas, las personas, las comunidades y las sociedades se acercan porque sienten y quieren estar cerca.
Después de 1945, Europa quedó profundamente dividida, y las esperanzas de los europeos de que al final de la Segunda Guerra Mundial se volvería a la normalidad, tras deshacerse del fascismo, se hicieron añicos.
En Rumanía, las ciudades modernas comenzaron a desarrollarse según el modelo europeo después de la década de 1830.
Considerado un deporte de la mente debido a su alto grado de complejidad, anticipación de la estrategia del oponente, velocidad en la toma de decisiones, uso intenso de la memoria, el ajedrez ha atraído y atraerá a muchos practicantes. Se considera como un enfrentamiento militar en miniatura y se utiliza como metáfora en la descripción de una situación compleja en la que dos bandos se duelan.
En sus casi 250 años de historia, la prensa rumana también registra la aparición ininterrumpida más larga de una publicación. Se trata de Gaceta de Matemáticas, una revista especializada para los amantes de las matemáticas, publicada en 1895 en Bucarest por iniciativa de un grupo de matemáticos e ingenieros.