Las mejores iniciativas cívicas de 2017
Conocidas ya en Rumanía y en el extranjero, las numerosas manifestaciones del año pasado y de este año desarrolladas bajo el lema #REZIST muestran un civismo cada vez más presente en los últimos años.
România Internațional, 02.05.2018, 19:22
Conocidas ya en Rumanía y en el extranjero, las numerosas manifestaciones del año pasado y de este año desarrolladas bajo el lema #REZIST muestran un civismo cada vez más presente en los últimos años. Pero no ha destacado sólo este tipo de civismo, construido alrededor de algunos grandes temas de corrupción, sino también otro tipo de activismo: el que se hace con cada petición, paso a paso, mediante la perseverancia y el diálogo con los factores de decisión o intentando iniciar el diálogo. Algunos de estos activistas tienen el apoyo de la asociación no gubernamental Centrul de resurse pentru participare publică (Centro de recursos para la participación pública, CERE, por sus siglas en rumano), que desde hace nueve años galardona también a los más perseverantes y creativos de ellos en la Gala de la Participación Pública.
Este año, mediante la entrega de premios a los proyectos realizados en 2017 se ha intentado celebrar a ambas categorías del activismo: el que se manifiesta mediante amplias manifestaciones en la calle y el activismo practicado por los pequeños grupos de iniciativa preocupados por algunos temas sociales como las condiciones de vida en los barrios, la educación, la igualdad en las escuelas y la protección del medio ambiente. Oana Preda, directora ejecutiva del CERE, ha hablado sobre el tema de la Gala de este año:
“Hemos construido la Gala de este año alrededor del concepto de la solidaridad, pensando que la solidaridad sería una manera en que estos dos tipos de activistas se conozcan y luchen juntos. En los últimos años hemos visto cada vez más espíritu cívico o ciudadano, cada vez más activismo, cada vez más personas dispuestas a luchar. Desgraciadamente, el cambio de actitud de la gente no ha conllevado todavía un cambio profundo al nivel de las autoridades. De momento se siente en el aire un cierto pesimismo, pero la gente está decidida a resistir.”
Algunas de las personas que han resistido e incluso han conseguido que las autoridades públicas escuchen su punto de vista son las madres de la asociación SAMAS. Mediante la campaña “El CNA ante la lactancia materna” han convencido al Consejo Nacional Audiovisual de incluir en las pausas publicitarias de las televisiones un mensaje de promoción de la lactancia materna en exclusiva durante los primeros 6 meses de vida. Este mensaje representa una victoria extremadamente importante teniendo en cuenta que según Unicef, en Rumanía sólo un 12% de los bebés reciben lactancia materna en la primera hora de vida y la tasa de este tipo de lactancia en exclusividad durante los primeros seis meses es del 16%. Seguidamente escucharán a una de las personas que forman parte de la asociación SAMAS, Eli Roman, hablar en la Gala de la Participación Pública:
“Las televisiones siguen evitando la difusión de este mensaje con la misma frecuencia con la que se difunden otros mensajes de interés público. Mediante el mensaje hemos querido animar a las madres. La lactancia materna no es fácil, pero tampoco es imposible. No acusamos a nadie. Si una madre decide no lactar, esta es su decisión exclusiva, pero señoras, madres y padres, que sepan que es gratificante ofrecer a tu niño lo mejor de ti como líquido vital.”
Un líquido igual de vital es el agua procedente de los manantiales de la montaña. Ovidiu Mihuţ, un aficionado a la pesca, se ha unido a otros pescadores para la campaña denominada “La desertificación de los montes Făgăraş y la apropiación ilegal de la tierra pública”. Ovidiu Mihuţ ha llamado la atención de la opinión pública sobre el impacto negativo en el medio ambiente que tienen las microhidrocentrales de las zonas de montaña protegidas. Además, acudiendo a la legislación de la UE, también ha llamado la atención de la Comisión Europea, que ha iniciado una acción de incumplimiento contra Rumanía por no haber acatado sus obligaciones sobre la conservación de los hábitats naturales en el proceso de autorización de las microhidrocentrales de nuestro país. Ovidiu Mihuţ:
“No somos una organización, somos simples ciudadanos y queremos decir que somos de los primeros que han revelado que la construcción de estas microhidrocentrales de baja potencia en las reservas naturales representa sólo una manera de enriquecerse en interés privado, por cuenta de la gente normal. La eficacia económica de estas microcentrales se puede comparar con la eficacia de una pila para relojes que se usa para hacer funcionar una locomotora. Hemos conseguido mostrar que de hecho, estas pequeñas hidrocentrales ocultan una gran corrupción.”
Oana Vasiliu ha mostrado también la importancia de la perseverancia para dar a conocer los deseos mediante la campaña titulada “La revolución de las personas del albergue social Canta”. En las viviendas sociales de ese barrio de Iaşi las condiciones de vida son inhumanas y Oana Vasiliu las ha probado directamente:
“He conseguido escaparme del albergue de Canta. He vivido allí siete años junto con mis tres niños. Es muy difícil vivir allí, es duro. Hay mucha gente enferma, gente con discapacidad, niños con epilepsia y autismo que siguen viviendo allí, en habitaciones de 9 metros cuadrados. Las autoridades locales rechazan cualquier cambio de vivienda en el caso de las personas de Canta. Hice muchas solicitudes durante 7 años, por eso conseguí escaparme de allí. Pero las personas que han quedado en Canta se enfrentan a un continuo rechazo, lo más probable porque no saben cómo defenderse. Con la ayuda de los periodistas, les hemos ayudado para que ahora conozcan sus derechos. Allí hay gente que comete suicidio y es inhumano que las autoridades locales lo sepan y no hagan nada.”
Si mediante esta campaña cívica en Iaşi sólo se ha llamado la atención de la opinión pública, en Constanza la administración pública se ha dejado convencer mediante una campaña para abrir el primer centro de asesoría y acogida en régimen de urgencia para las víctimas de la violencia doméstica. Esto ha sido posible mediante la Asociación “Necuvinte” que a través de la campaña “La caravana de los cambios”, ha sensibilizado y ha informado a la opinión pública sobre la violencia familiar. Simona Voicescu, participante en la campaña, ha hablado sobre el labor de la asociación para convencer a la gente:
“Se ha abierto un albergue, se ha abierto una línea telefónica local que ofrece ayuda gratuita, pero todo se ha hecho con mucho esfuerzo. Nos recibieron con agresividad en Constanza y después de la apertura, cuando pedimos información sobre este centro, nos pidieron que hiciéramos una solicitud escrita que recibiríamos una respuesta en 30 días.”
A pesar de ello, mediante la presión ejercida por las organizaciones cívicas, la opinión pública y la prensa local, la decisión de abrir este centro se tomó sólo después de 25 días. Por esta razón, el CERE ha galardonado esta campaña en la Gala de la Participación Pública, junto con las demás mencionadas.