La gestión de los casos de VIH-SIDA en Rumanía
El VIH/SIDA sigue siendo un problema de salud en todo el mundo.
România Internațional, 15.07.2020, 14:11
El VIH/SIDA sigue siendo un problema de salud en todo el mundo. La enfermedad ya ha matado a millones de personas. Aunque se están haciendo progresos, aún no se ha descubierto un tratamiento para curar completamente esta enfermedad. En 2018, había más de 37 millones de personas en el mundo infectadas con el VIH, y en Rumanía su número aumenta a 16 000 personas. Cada año, se producen alrededor de 700 casos nuevos, pero más de la mitad de las personas con VIH son diagnosticadas en etapas avanzadas de la infección.
Sin embargo, la esperanza de vida de un paciente con VIH ha aumentado en los países que han implementado programas nacionales de tratamiento. Rumanía tiene a través del Programa Nacional contra el VIH/SIDA los medicamentos antirretrovirales (ARV) de última generación, que previenen la infección de nuevas células con el VIH, pero se necesitan programas educativos de prevención centrados en los grupos vulnerables y las comunidades desfavorecidas. Horațiu Moldovan, secretario de Estado del Ministerio de Sanidad :
“Nuestro objetivo es mantener a Rumanía como un país con bajo riesgo de infección con VIH. Nosotros, desde el Ministerio de Sanidad, gestionamos un programa nacional de VIH/SIDA que comenzó en 1985. En 2018, el presupuesto de este programa fue de 303 millones de lei. Aumentó en 2019 a 328 millones de lei. Este es un pequeño aumento del 9% y actualmente atendemos a unos 13 000 pacientes con VIH/SIDA. Mientras tanto, el Ministerio de Sanidad ha desarrollado un plan estratégico nacional para la vigilancia, el control y la prevención de los casos de VIH/SIDA entre 2019 y 2021. Es un documento de estrategia de política pública que está finalizado, pero durante el mandato anterior no ha sido aprobado e implementado por el Ministerio de Sanidad».
Desafortunadamente, la estigmatización y la discriminación son más difíciles de soportar que la enfermedad, dicen los afectados. Hay personas infectadas que ocultan su enfermedad, lo que en consecuencia conduce a su propagación. Horaţiu Moldovan:
“Desde mi práctica personal, como cirujano cardíaco, a menudo tengo que operar a pacientes infectados. Más difícil que operar a pacientes infectados fue distribuir pacientes infectados a mis colegas cirujanos y observar cierta resistencia para involucrarse en el tratamiento de estos casos. No es suficiente que un cirujano acepte operar a un paciente infectado, es necesario que la institución lo acepte, porque hay muchos profesionales implicados en el tratamiento hospitalario. Existe el temor a los pacientes infectados con VIH, pero estamos proponiendo desde el Ministerio de Sanidad programas tendientes a disminuir estas asperezas para que todos estos pacientes puedan beneficiarse del tratamiento médico y quirúrgico».
Otro problema a resolver es la discontinuidad en el tratamiento, dado por las dificultades en el suministro de medicamentos. Rumanía cumple parcialmente los objetivos relacionados con el acceso a la terapia antirretroviral continua. El 67% recibe tratamiento específico y el 54% ha alcanzado la supresión viral (ya no transmite la enfermedad). Prof. Dr. Adrian Streinu Cercel, gerente del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas «Prof. Dr. Matei Balş»:
“El paciente infectado por el VIH de hoy ya no se parece al paciente infectado del año 1985. Hoy toma una píldora al día, que contiene 3 o 4 ingredientes, y vive una vida absolutamente normal. Obviamente, en la vida, pueden ocurrir todo tipo de cosas, pero que no están relacionadas con el VIH. A pesar de los progresos en el tratamiento, el VIH no ha desaparecido. Y esto sobre todo por culpa nuestra, porque no nos protegemos… Si no nos protegemos, corremos riesgos. Rumanía se ha beneficiado y continúa beneficiándose de un maravilloso programa, que incluye el apoyo al paciente».
A partir de este año, los pacientes con VIH de Rumanía podrán recibir la medicación en su hogar. Esta es una medida extremadamente beneficiosa, dicen los médicos, especialmente para los pacientes activos, que tienen un trabajo, porque, cada mes, tenían que pedir permiso del trabajo para ir al hospital y recibir su tratamiento. Además, en Rumanía, el programa VIH-SIDA está muy bien monitoreado. En este momento, se sabe muy bien dónde viven las personas infectadas con el VIH/SIDA, si cambian de domicilio o no, por lo tanto, se podría hacer una distribución de medicamentos por regiones, dice Adrian Streinu Cercel:
“La tendencia en Rumanía es tan buena como ha sido posible: el número de infecciones ha disminuido y está disminuyendo constantemente. Las personas infectadas con el VIH están bien monitoreadas y dirigidas a los centros regionales y, obviamente, la cantidad de nuevas infecciones ha disminuido. Rumanía es el único país de la Unión Europea que registra a cada paciente con sus nombres, apellidos y código numérico personal y, como tal, en cada momento tenemos una idea de lo que sucede con esta enfermedad. En 2018, todas las tendencias estaban disminuyendo. Todavía tenemos problemas con las mujeres embarazadas infectadas porque algunas se niegan a tomar medidas preventivas para proteger al recién nacido. Por eso se ha realizado un registro en el que están dados de alta todos los recién nacidos de madres VIH positivas y los monitoreamos».
Los especialistas estiman que para 2020 habrá alrededor de 500 000 infecciones con el VIH en todo el mundo, y para 2030 llegará a 200 000 casos.