El teléfono del anciano
România Internațional, 04.02.2016, 16:18
El envejecimiento de la población es un fenómeno en crecimiento en toda Europa. Según el Instituto Nacional de Estadística, en Rumanía más de 3 millones de personas tienen más de 65 años de edad. Algunos encuentran sitio en las residencias de ancianos, pero otros viven solos y sin ayuda. Para ayudarles, la Fundación Princesa Margarita de Rumanía ha abierto una línea telefónica gratuita y confidencial a la cual los ancianos mayores de 65 años de edad pueden llamar para varios problemas. Desde hace 25 años, desde que su alteza real ha vuelto a Rumanía, ha intentado ayudar a los ancianos a través de varios programas creados para aumentar su calidad de vida. El Teléfono del Anciano es un proyecto que cumple con las necesidades de los ancianos de Rumanía, ofreciendo información, apoyo emocional o alivio para la soledad, según ha afirmado Mugurel Enescu, director ejecutivo de la Fundación Princesa Margarita de Rumanía:
“Los ancianos pueden llamar al 0800460001 y contestaremos con el alma. Tenemos compañeras que contestan a este número, tienen preparación para dialogar con los ancianos, tienen formación en asistencia social, y hacen todo lo que pueden para ayudar a los ancianos a solucionar sus problemas. El Teléfono del Anciano es una línea que tiene por objetivo conectar a los ancianos a los servicios ofrecidos. Pensamos que los ancianos no están siempre tan informados como los jóvenes que tienen acceso a internet y la habilidad de usar el internet. Los ancianos no pueden hacer esto. Hemos creado una base de datos muy bien estructurada y sabemos ponerles en contacto con otras instituciones no gubernamentales u otras instituciones que les podrían ayudar. Asimismo, podemos recomendarles un club de mayores u otros servicios que hay en su comunidad.”
Y como miles de ancianos se han visto afectados por el fenómeno del aislamiento social y no saben a quién acudir para recibir consejo, muchos de ellos han llamado ya al Teléfono del Anciano, según ha afirmado Mugurel Enescu:
“En los tres meses desde que fue creado hemos tenido aproximadamente 1.100 llamadas, pero lo más importante es que ha habido más de 500 personas que nos han solicitado la ayuda o que simplemente han deseado ponerse en contacto con alguien que les ayude a superar los momentos de soledad. Ha habido más de 120 horas de conversaciones con personas mayores. La gente ha llamado porque deseaba conseguir ayuda financiera o médica, porque necesitaba información práctica o deseaba informarnos sobre un abuso contra ancianos. Si una persona está en un período difícil de su vida, entonces nosotros podemos ponerla en contacto con una organización no gubernamental a nivel local o con el servicio social a nivel local, que tienen el deber de cuidar a los ancianos que están en una situación difícil.”
La señora Elisabeta tiene 62 años, es de Baia Sprie, Maramureş, y se ha declarado encantada con esta iniciativa:
“La emisora Nacional Radio, que escucho muchísimo, anunció este número a principios del año, y llamé el 7 de enero. Tenía curiosidad por saber de qué se trataba y me contestó la señorita Roxana, una chica muy amable. Le dije lo que necesitaba y me ayudó. Me dio el número de teléfono que necesitaba, y me pidió repetirlo para no equivocarme. Llamo y me siento en familia. Llamo con confianza, no estoy nerviosa. Los cosejos son útiles, bienvenidos.”
Lucia Felicia tiene 77 años de edad y es de Galaţi. Suele pintar para aliviar la soledad y llama de vez en cuando al Teléfono del Anciano porque es el único lugar donde recibe soluciones a sus problemas. Sólo aquí encuentra una voz cálida y amistosa:
“He recibido varias sugerencias a mis deseos. A veces uno quiere decir muchas cosas, sobre todo a la tercera edad. Estaba triste cuando vino la cartera y me dejó el folleto con el número de teléfono, y decidí llamar porque no tenía calefacción y estaba muy enfadada. Tengo una afición. Me gusta pintar y por el frí, no lo podía hacer. Llamé y me aconsejaron, me dijeron a dónde llamar. Es decir que es útil, muy útil. Me animan, me preguntan si he empezado a pintar, quería abrir una exposición. Cuando murió mi marido me quedé sola y necesito ánimo, ayuda.”
La Fundación Princesa Margarita lanzó también a finales del año pasado una asociación liderada por voluntarios. La asociación “Nunca solo” se ha propuesto mejorar las condiciones de vida de los ancianos mayores de 65 años de edad, desarrollando y extendiendo unos servicios, según ha afirmado Mugurel Enescu, director ejecutivo de la Fundación Princesa Margarita de Rumanía:
“La asociación tiene más de 200 voluntarios que van a las casas de los mayores o a los centros para ancianos para intentar crear una relación con ellos, sacarles de la soledad y el aislamiento. La asociación intenta volver a animar a los ancianos y, periódicamente, cuando recibimos donaciones por parte de algunas compañías, en la Pascua o la Navidad, intentamos ayudarles también con varios paquetes.”
La nueva asociación se lanzó tras unos estudios realizados por el Instituto GFK que destacaban los mayores problemas de los ancianos de Rumanía. Según el estudio, aproximadamente 1,5 millones de personas mayores de Rumanía están afectadas por la soledad. Mugurel Enescu ha presentado también otros resultados del estudio:
“Ha resultado que uno de cada dos ancianos está afectado por la soledad. El mismo estudio ha mostrado que muchísimos ancianos están afectados por el sentimiento de inutilidad. En concreto, ya no tienen ningún papel en su comunidad y esto les afecta muchísimo. Asimismo, los ancianos no quieren depender de otros, sienten vergüenza por cargar a otros con su existencia. Esto nos hace pensar que la sociedad en la que vivimos, y que está envejeciendo, debe cambiar. Debemos adaptarnos a este problema, adaptarnos al hecho de que estamos envejeciendo, y debemos intentar ofrecer a los ancianos la posibilidad de tener un papel activo en la comunidad. Debemos ofrecerles la posibilidad de ser voluntarios, al igual que nosotros, de tener implicación cívica. Si quieren, debemos ofrecerles la posibilidad de trabajar a tiempo parcial si desean ganar dinero extra.”
La línea denominada el Teléfono del Anciano es una iniciativa de la Fundación Princesa Margarita de Rumanía, en el marco de un proyecto desarrollado en colaboración con la Fundación Vodafone Rumanía.