“100 corazones para 100 niños”
Hoy les presentamos un proyecto que ha tenido mucho éxito en varios ámbitos.
România Internațional, 18.04.2018, 18:26
Hoy les presentamos un proyecto que ha tenido mucho éxito en varios ámbitos. Un proyecto que ha obtenido el segundo puesto en la categoría “La escuela te hace una persona de verdad”, una sección dedicada a los proyectos de formación profesional en el marco de la Gala de los Fondos Estructurales 2017. Debido a este proyecto, en 2016 se creó una nueva especialización para los médicos residentes de Rumanía: la cardiología pediátrica. Es más, este proyecto desarrollado bajo el lema “100 corazones para 100 niños”, ha logrado salvar muchas vidas.
Cristian Grasu, secretario de Estado en el Ministerio de Sanidad, ha explicado como cooperan las instituciones rumanas con las europeas, para aplicar los proyectos destinados a la salud:
“Se han emprendido esfuerzos importantes, hemos obtenido apoyo y financiación, y la Comisión Europea siempre nos ha ayudado mucho, incluso en el último periodo, y esto se nota. El proyecto (n.r.”100 corazones para 100 niños”) ha mostrado que se pueden hacer muchas cosas con fondos europeos, incluso en Rumanía, y este no es el único proyecto. Algunos han obtenido más fondos, otros menos, o han sido realizados por voluntarios, pero todos tienen el mismo objetivo: salvar vidas, salvar a los pacientes. En este momento, la infraestructura representa una prioridad para Rumanía y es uno de los principales motivos de descontento e insatisfacción, causados por la baja calidad de los servicios médicos y también por el número insuficiente de servicios. Tenemos un problema de infraestructura: el último hospital público fue construido en Rumanía en 1981, y desde entonces se ha construido solo un centro médico, en Iaşi. Todos los demás hospitales fueron construidos en los años 1970 e incluso hay algunos más antiguos, que son monumentos históricos.”
El doctor Vlad Mixich, periodista especializado en problemas de salud, ha señalado un aspecto paradójico de nuestro país:
“Una de las causas de la mortalidad infantil son las malformaciones congénitas de corazón. La mortalidad infantil es un tipo de problema que en Rumanía aparece por lo menos una vez al año, cuando se presentan estadísticas y se publica otro artículo más para destacar la grave situación en Rumanía. Pero esta es una paradoja: es cierto que Rumanía tiene el nivel más alto de mortalidad infantil de la UE, pero al mismo tiempo, desde 1990 hemos logrado reducir la tasa de mortalidad, lo que ha sido un gran éxito, un logro de la medicina rumana. Porque el nivel de reducción de la mortalidad infantil es uno de los mejores del mundo. Ha bajado rápidamente, en muy poco tiempo. Aunque seguimos situándonos en la cola de la lista, hemos registrado progresos importantes y las cosas van mejorando más rápido frente a otros países que tienen el mismo problema.”
A este éxito también ha contribuido la aplicación del proyecto “100 corazones para 100 niños”. El catedrático dr. Grigore Tinică es gerente del Instituto de Enfermedades Cardiovasculares “Prof. Dr. George I. M. Georgescu” de Iaşi, que cuando se ha unido a este proyecto europeo que preveía cursos de especialización en el extranjero para todas las categorías de personal médico en un campo tan sensible como la cirugía cardiovascular pediátrica, ha solicitado como condición para su participación, que fueran operados al menos 100 niños, un número que ya ha sido superado:
“En Rumanía cada año nacen entre 1500 y 2000 niños con malformaciones congénitas, y unos 800 … 900 deberían ser operados en los primeros 12 meses de vida. Ahora solo podemos operar unos 250 … 300 niños. Hay muchos niños que nunca han sido operados y que ahora tienen 10, 11, 12, incluso 15 años o son adultos con malformaciones congénitas. En total se trata de 1000 casos de malformaciones congénitas en Rumanía. Tenemos algunos hospitales donde se realizan operaciones de este tipo. La cirugía cardiovascular pediátrica es mucho más difícil que otros tipos de cirugía, porque un niño o un bebé representa un universo distinto.”
Si bien el Ministerio puede aplicar políticas, obtener fondos o cambiar mentalidades, los proyectos son realizados por los directamente implicados: médicos, asistentes, físicos, terapeutas, kinetoterapeutas. A ellos se unen representantes de la sociedad civil. Un ejemplo en este sentido es la Asociación El Corazón de los Niños, que tiene como objetivo ayudar a los niños con problemas médicos, sobre todo con problemas cardíacos, según nos explica Alexandru Popa, presidente de la Asociación:
“Hemos optado por la cardiocirugía porque en 2006, cuando se creó nuestra asociación, había un problema grave con los niños que padecían enfermedades cardiovasculares que en aquel momento eran la principal causa de mortalidad infantil no accidental. Ahora las cosas han cambiado un poco. Todavía tenemos niños que mueren porque no reciben un diagnóstico o no se interviene a tiempo, porque sus padres no saben donde ir con su hijo enfermo. Esperamos que esto cambie pronto. Hacemos esfuerzos e intentamos contribuir al desarrollo de estos hospitales y no nos preocupamos solo por casos individuales, aunque estos también nos piden ayuda y muchas veces nos vemos obligados a negársela. Nuestra asociación ha invertido más de 4 millones de euros en la infraestructura, dinero que hemos recaudado de varias empresas, de donaciones privadas y que ha sido enviado al sistema público de sanidad. Y queremos continuar de la misma manera.”
A pesar de haber sido todo un éxito, ya que ahora se realizan operaciones incluso en bebés de solo dos semanas, hay muchas cosas que quedan pendientes. Según han dicho nuestros invitados de hoy, este proyecto, aparte de ser muy beneficioso, tiene que afrontar algunas dificultades.