Ferias en abril
Ya sea que estén relacionadas con las vacaciones de Semana Santa, o simplemente por el buen clima que invita a socializar al aire libre, abril llega con muchas ferias por todo el país, por lo tanto, nos detenemos en algunas de ellas para disfrutar de su sabor.
Ana-Maria Cononovici, 16.04.2024, 14:39
Ya sea que estén relacionadas con las vacaciones de Semana Santa, o simplemente por el buen clima que invita a socializar al aire libre, abril llega con muchas ferias por todo el país, por lo tanto, nos detenemos en algunas de ellas para disfrutar de su sabor.
El primer fin de semana de abril comenzó con Fashing – la Fiesta de la Tortita en Prejmer, un evento que llegó a su 17ª edición, que este año superó oficialmente las fronteras del distrito de Braşov, formando parte de la oferta de las agencias de viajes por primera vez. Además de la atracción principal, que sigue siendo la exposición de tortitas a la venta, los turistas pudieron asistir a la caravana Fashing, una tradición que pretende ahuyentar a los malos espíritus y traer la primavera.
Bucarest no es una excepción. Tradicionalmente, aquí tiene lugar la Feria Prier (el nombre popular de abril), de la que nos habla Corina Berariu, de la Asociación de Eventos Urbanos, organizadora del evento:
«Es la 10ª edición de la Feria Prier, que organizamos en el Museo Nacional del Campesino Rumano en abril. Allí se reunirán 60 artesanos populares de todo el país, artistas, productores con productos de ayuno, pero también productos dulces y coleccionistas con antigüedades campesinas. Juntos presentarán sus mejores obras a lo largo del tiempo, con una temática primaveral, habrá artistas con cuadros con flores, con cuadros de flores prensadas, decoradores de huevos, cerámica, marroquinería tradicional, joyas, collares, juguetes de ganchillo o lana de fieltro, iconos sobre madera o vidrio, talladores de madera y otros jóvenes artistas con diferentes objetos de decoración, con lavanda, árboles, esquejes de rosas; tenemos un productor originario del distrito de Dâmboviţa con un surtido muy amplio de plantas aromáticas, flores, árboles, que se pueden plantar durante este período».
Corina Berariu añade:
«Ya se ha convertido en una tradición, y el Museo Nacional del Campesino Rumano es un anfitrión acogedor. La gente está acostumbrada, está esperando las ferias de fin de semana. Es una feria familiar, donde la gente viene a pasear, a sentirse bien, a ver y admirar a los artistas trabajando, hace buen tiempo y también tendrán demostraciones in situ, traen a sus hijos a ver cómo se elaboran los objetos tradicionales. Es una feria donde la gente viene a abastecerse de productos de temporada, frutas frescas, verduras, mermeladas, zacusca (un plato tradicional de verduras frescas, al horno o frito en aceite), jarabes, para comer algo in situ, desde los tradicionales kürtőskalács o langos (especialidades húngaras), una tortita, hasta los productos preparados in situ por la Terraza Tradicional, en el distrito de Dâmboviţa. Es un mundo especial, un mundo muy hermoso, de conocedores y para conocedores. Vienen a contar historias y a buscar pequeños tesoros. La Pascua católica ya pasó, a continuación, el Domingo de Ramos, fiesta que también estará marcada por una feria de artesanos organizada por el Museo Nacional del Campesino Rumano, pero de alguna manera, ya, la gente siente acercándose el espíritu de las fiestas, se preparan para el Domingo de Ramos ortodoxo o la Pascua ortodoxa, los talladores aparecen, y la gente viene a probar, a hacer sus pedidos para las vacaciones de Pascua, o simplemente vienen a disfrutar del buen tiempo y la gente guapa en la feria».
Florentina Dunaev, responsable cultural de la Casa de la Cultura de Sulina, nos habla de la Fiesta de la Caballa Azul, que este año llegó a su séptima edición y tendrá lugar a finales de abril:
«El festival está dedicado a la vida que tiene lugar a orillas del agua. El evento se centra en la migración de los cardúmenes de caballa, corriente arriba, en el río Danubio, hacia las zonas de desove. La vida de los habitantes de estos asentamientos ha estado marcada a lo largo del tiempo por esta migración, que era un indicio anual de la entrada plena de la primavera en pleno derecho, constituyendo una fuente de alimento, pero también un motivo de celebración para nosotros, los del Delta del Danubio. Todos los años tiene lugar en primavera. Este año lo hacemos el Domingo de Ramos, porque también hay absolución al pescado (nota del editor: para los que han ayunado está permitido comer pescado ese día, una semana antes de la Pascua ortodoxa) y luego los que ayunan también pueden venir a la fiesta, para degustar la caballa hecha de varias maneras en la fiesta: y a la parrilla, y marinada. Habrá otros platos de pescado, no solo caballa. Pero, por supuesto, la caballa será la reina de la fiesta, como nos gusta decir, cada año».
Florentina Dunaev, referente cultural de la Casa de la Cultura de Sulina, ofrece más detalles:
«El evento tiene como objetivo preservar y resaltar la gastronomía basada en las recetas tradicionales deltaicas, promover el potencial turístico del Delta del Danubio, preservar y capitalizar las tradiciones. Este evento contará con la presencia de conjuntos y equipos de chefs del Delta del Danubio. Habrá preparaciones de pescado, y conservas de pescado, y zacusca de pescado, pescado marinado, pescado frito, pescado a la plancha, probablemente también dorados y bagre, en cada stand habrá una oferta de pescado diversificada, pero hasta los más exigentes podrán degustar un mititel a la plancha (plato tradicional rumano), los que no comen pescado».
Estas ferias tratan de promover las costumbres tradicionales, de una forma lo más accesible posible para el ritmo acelerado de las personas de hoy en día.
Versión en español: Mihaela Stoian