El Café Virtual
Si echan de menos salir y conversar con los amigos, deberían saber que no son los únicos. Los artistas tampoco se sienten a gusto en aislamiento y por esta razón, desde que se impuso el distanciamiento social, buscaron una manera de socializar en línea: así surgió la idea de crear una cafetería virtual.
Ana-Maria Cononovici, 27.04.2020, 18:09
Si echan de menos salir y conversar con los amigos, deberían saber que no son los únicos. Los artistas tampoco se sienten a gusto en aislamiento y por esta razón, desde que se impuso el distanciamiento social, buscaron una manera de socializar en línea: así surgió la idea de crear una cafetería virtual.
Roxana Donaldson, escritora y artista plástico, nos ofrece más información.
“El Café Virtual fue creado para mantener viva la comunicación. Estamos viviendo momentos difíciles, las normas de distanciamiento social son muy estrictas, las reuniones fueron canceladas, sin embargo el tiempo parece transcurrir más lentamente en el entorno virtual. Nos ofrece la posibilidad de trasladar allí una parte de lo que antes era el mundo real. Tanto mis amigos, como yo pensamos que ya era hora de llenar de alguna forma este tiempo que pasa más lentamente, manteniendo viva la comunicación, valiéndonos de los instrumentos digitales. Todos somos personas muy sociales y sentimos la necesidad imperiosa de seguir comunicando, de acudir a una cafetería para intercambiar opiniones e ideas. El Café de los Artistas existe desde hace mucho tiempo, es un lugar donde se comparten reflexiones y se mantiene una comunicación intelectual. Esto es lo que nos proponemos con nuestro Café Virtual.”
A este café pueden acudir todas las personas interesadas, según nos ha confesado Roxana Donaldson:
“Cada uno de nosotros viene de un entorno distinto, hay gente procedente de las artes visuales, de la literatura, del medio de negocios, otros son autónomos, y a todas estas personas las une el deseo de comunicar y de mantener las cosas funcionando. En cada edición, las personas hablan de las cosas que las apasionan. Cada uno propone temas de debate, trae invitados, plantea problemas, hace preguntas… Nuestras reuniones están abiertas a todos los que quieran participar, de manera gratuita. Nos pueden seguir en nuestras páginas de Facebook, la gente se puede conectar a través de una aplicación, puede escuchar, se puede implicar, puede hacer preguntas, comunicamos, nos sentimos libres.”
Roxana también nos ha dicho cómo empezó todo esto.
“En la primera sesión hablamos sobre las limitaciones del entorno digital, sobre la escuela en línea, el teletrabajo, ya que creamos este espacio desde el primer momento en que se impuso el distanciamiento social. Todo empezó con preguntas y respuestas acerca de cómo podemos adaptarnos a esta nueva situación, cómo enfocar el entorno digital y cómo aprovechar mejor sus facilidades, en las condiciones en que era la única forma de mantener viva la comunicación. Es una solución de momento, con muchas imperfecciones, pero por ahora nos permite continuar lo que estábamos haciendo. Desgraciadamente, tiene sus limitaciones. Nos hemos dado cuenta de que podemos hacer cosas en este entorno digital, pero de una manera completamente distinta a nuestras acciones en el mundo real. Si tuviéramos que seguir trabajando por mucho tiempo en este espacio virtual habría que encontrar una manera de optimizarlo. Lo bueno es que nos hemos dado cuenta que es una opción que se debe aprovechar.”
Tener que trasladar nuestra vida al entorno virtual nos ha tomado por sorpresa a todos, pero parece que esta iniciativa de participar en una cafetería virtual ha sido del agrado de muchas personas, según nos ha dicho Roxana Donaldson:
“Sí, ha sido de nuestro agrado. Hemos invitado a Axel Mustaş (Alex Mustata por su nombre real, actor rumano, presidente de la Fundación Ileana Mustatza y fundador del grupo Improvisneyland), quien nos ha confesado qué significa ser actor y cómo puedes interpretar papeles en las condiciones actuales. Ha sido muy interesante porque hemos participado en un ejercicio de improvisación en línea y ha funcionado, nos ha encantado. Generalmente, cuando pasamos por momentos de crisis cada uno piensa en cómo aquello le afecta a él. Cuando tienes la posibilidad de ver las cosas desde otra perspectiva, aprendes a valorar de otra manera lo que está pasando y puedes ver mejor cuán profundos son los cambios en el ámbito social.”
Otro tema enfocado fue “Perfect strangers”. Aislados entre lo real y lo virtual, unos extraños se ven unidos por el entorno digital, tratando de sobrevivir. Ha habido debates sobre arte, proyectos, coronavirus, fotografías y recuerdos. Seguidamente escucharemos a Cristina Irian, presidenta de la Asociación Omnia Photo, quien nos amplía detalles:
“He participado en tanto que invitada y he contado cómo logramos continuar la actividad de la asociación y qué hacemos con los archivos de fotografías. El nombre de nuestra asociación se compone de una fusión de los nombres de dos estudios fotográficos que funcionaron en Rumanía, en el período de entreguerras. Mi compañero de Craiova, Dorin Delureanu, y yo encontramos una serie de fotografías de los años 30-40. Él encontró fotos de Photo Omnia Craiova, mientras que yo, de Photo Omnia Bucarest e hicimos preguntas sobre estos estudios fotográficos menos conocidos. Así se nos ocurrió la idea de crear esta asociación que se dedica a recuperar fotografías antiguas de colecciones privadas, poco conocidas.”
El Café Virtual se propone organizar tales reuniones una vez a la semana, mientras que los participantes se proponen seguir conectados incluso cuando este distanciamiento social termine. Por lo tanto, los interesados se pueden unir a este proyecto a través de la página Cafeneaua Virtuală Brand Trainers.
Versión española: Valeriu Radulian