Agua del Danubio, buena para beber
En 1897, la reina Guillermina de los Países Bajos financió la construcción de una torre de agua en Sulina.
Ana-Maria Cononovici, 22.10.2024, 14:51
En 1897, la reina Guillermina de los Países Bajos financió la construcción de una torre de agua en Sulina. Esto sucedió después de amarrar su barco en el Danubio, en la ciudad portuaria del mar Negro, y después de ver que, al pedir agua para beber, le ofrecieron agua del Danubio.
Más tarde, después de 126 años, una ambientalista holandesa, Li An Phoa, fundadora del movimiento de los Ríos Potables, y su pareja, Maarten van der Schaaf, llegaron al delta del Danubio tras recorrer tres tramos diferentes a lo largo del río, analizando la calidad del agua danubiana como agua potable.
El Danubio, bueno para beber forma parte del proyecto europeo Restauración de la cuenca hidrológica del Danubio para los ecosistemas y las personas, desde las montañas hasta el mar. ¡El Danubio para todos! (versión original: Restoration of the Danube River Basin for ecosystems and people from mountains to coast – Danube4all).
Con el propósito de hacer que los ríos del mundo sean ecológicamente saludables (y por lo tanto lo suficientemente limpios) como para que su agua sea potable, Li An Phoa se embarcó en un viaje a pie por el delta del Danubio del 18 de septiembre al 11 de octubre. A lo largo de su recorrido, se reunió con agricultores, escolares, pescadores, empresarios, políticos y dirigentes, y habló con ellos sobre la visión del Danubio con agua potable. Li An Phoa:
«Era importante para el proyecto El Danubio para todos elegir uno de los sitios de demostración y cuando vi que uno de ellos estaba en Rumanía, elegí ir y recorrer los tramos del Danubio en Rumanía. Si tuviera que recorrer todo el río desde el manantial hasta el mar, que es siempre lo que más me gusta, me habría llevado más de un año. Así que decidimos no hacer eso. Ya había estado tres veces en Rumanía, en Transilvania, y me gustó tanto que estaba deseando centrarme en Rumanía. Así que esa fue la primera motivación. Al mismo tiempo, tomamos esta decisión porque un tercio del Danubio se encuentra en Rumanía, por lo que la importancia de un Danubio saludable para Rumanía también es muy alta».
Nuestra interlocutora nos confesó que viniendo de los Países Bajos, un país que tiene un delta, pudo apreciar aún más el delta del Danubio, al unirse a WWF (World Wildlife Fund) y a GeoEcoMar (Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo en Geología y Geoecología Marinas) y juntos eligieron los lugares relevantes para explorar.
Li An Phoa, fundadora del movimiento de los Ríos Potables:
«Elegimos tres lugares en el delta del Danubio, básicamente fuimos a lo largo de la laguna y luego a las zonas húmedas restauradas cerca de Mahmudia, los humedales de Carasuhat. Y la segunda semana tuvimos una vista muy diferente. Caminamos un poco a lo largo del Danubio, pero caminamos sobre todo por las zonas inundables hasta la confluencia con el río Jiu. Y luego fuimos a contracorriente a lo largo del río Jiu durante dos días. Así que vimos la zona de la llanura y el río Jiu y la zona de confluencia. Finalmente, la tercera semana estuvimos cerca de Drobeta Turnu-Severin y la presa de las Puertas de Hierro. Y nos fuimos aguas abajo desde la presa hacia la ciudad. Así que el segundo paso consistió en identificar las secciones después de elegir Rumanía. Y luego expresé mis deseos in situ, lo que siempre hago cuando estoy cerca de un agua: quedarme con los lugareños, estar allí como invitado, no como turista. Empiezo el día con un análisis de la ciencia ciudadana junto con los niños, así que nos pusimos en contacto con las escuelas y otros clubes o asociaciones y tuvimos una invitación abierta para que la gente se uniera a la caminata y tal vez nos mostrara, hiciera un viaje, visitara algún lugar y eso es lo que hicimos entonces».
De hecho, los dos investigadores llevaron a cabo pruebas de calidad del agua del Danubio, hablaron con los lugareños sobre su relación con el agua y también recogieron residuos junto con escolares movilizados a través del programa Patrulla Cero Plástico, mediante el cual WWF Rumanía pretende eliminar el plástico de la naturaleza hasta 2030. El componente educativo del programa Patrulla Cero Plástico se solapó con la actividad de ciencia ciudadana a través de la cual Phoa y Van der Schaaf, junto con los escolares de las localidades por las que pasan, realizan mediciones diarias del Danubio con fines científicos.
Esta experiencia educativa involucra a los jóvenes en el estudio del río cerca del cual viven. El estudio forma parte del programa internacional de ciencia ciudadana Ríos Potables, que permite a las personas aprender más sobre la salud de sus ríos. Los socios locales en Rumanía seguirán utilizando esta herramienta ahora, una vez finalizado el viaje, y vigilarán la evolución de la salud del Danubio.
Li An Phoa describe la alegría de vivir con los lugareños en Rumanía:
«Es una experiencia muy especial porque vienes como una persona desconocida, ¿verdad?, como un invitado, y te vas abrazado como si estuvieras en una familia. Y eso es lo que he aprendido de estos paseos por el río: el río es como nuestro linaje. Literalmente nos conecta con el agua. Y luego, para continuar con mi idea, ese fue uno de mis descubrimientos. Me siento profundamente agradecida por esta generosidad y hospitalidad y, en segundo lugar, por el hecho de que todavía haya tal riqueza de especies que muchos de los otros países europeos han perdido, como el número de especies de aves, especies de peces, libélulas y mariposas. Está en otro nivel. Hay varios hábitats que todavía están bastante sanos, como en el delta del Danubio, que es una zona tan importante. Al mismo tiempo, se ve que, como en otras zonas de Europa, el paisaje también ha perdido gran parte de su vitalidad. Y luego las principales razones fueron la urbanización, la industrialización y la agricultura».
A través de su trabajo, Li An Phoa, fundadora del movimiento de los Ríos Potables, quiere que los ríos del mundo sean tan ecológicamente saludables (y, por lo tanto, lo suficientemente limpios) que su agua sea apta para beber.
Versión en español: Mihaela Stoian