¿Rumanía, preferida por cada vez más extranjeros?

Médicos, profesores, constructores o agricultores, un número significativo de rumanos optan por abandonar su país natal

Roxana Vasile, 14.08.2016, 10:27

Médicos, profesores, constructores o
agricultores, un número significativo de rumanos optan por abandonar su país
natal. La falta de un empleo o de un trabajo bien pagado les
obliga a buscar una vida mejor en el extranjero. Según los datos del más
reciente censo realizado en 2011, más de 727.000 rumanos estuvieran establecidos
en el extranjero por un período de un año como mínimo, la mayoría de ellos en
Italia, España, Alemania, Francia y Reino Unido. En realidad, el número de los
miembros de las comunidades de rumanos que residen en el extranjero sería 3
veces mayor, pero es muy difícil de contar, según afirman las autoridades. La
única información verdadera es que en Italia viven más de un millón y en España
casi un millón de rumanos.

Por otra parte, hay extranjeros que
deciden vivir en Rumanía. Entre ellos, europeos, incluso occidentales así
como sudamericanos, árabes, africanos o
chinos. ¿Por qué vienen y por qué se quedan? ¿Es Rumanía un nuevo territorio
para los inmigrantes, sobre todo después de la entrada, en 2007, en la Unión
Europea?

Después de recibir una beca Erasmus en
2005-2006, en el campo de las lenguas extranjeras, el joven español David Grau
se establecía en Bucarest en 2008:

Recuerdo que mis
amigos estaban contrariados porque abandonaba un país donde las cosas
marchaban bien por uno que no iba muy bien. Ahora me preguntan si aquí la gente
encuentra fácilmente trabajo. Los papeles se han cambiado y
Rumanía recibe bastantes españoles que tratan de probar
suerte aquí.

Por su parte, Yveline Bonora llegó a
Bucarest hace casi 10 años. Su esposo llegó un año antes para poner las bases
de un restaurante, su propio negocio dedicado a preparados
a base de frutas 100% rumanas

Junto con mi esposo decidimos hacer
mermeladas; al comienzo para nuestros amigos y luego para los clientes…porque
el negocio ha venido desarrollándose bastante bien. Ahora, los
principales clientes son los hoteles que compran nuestra confitura. Estamos
colaborando también con algunas tiendas de lujo de Bucarest.

En cuanto al británico Tom Rees, después de especializarse en gastronomía en París, abrió
en Bucarest una panadería-pastelería.

Soy responsable de la creación de
nuevos productos, pero cuento con un equipo integrado por cinco personas que se
encargan de la pastelería y tres de la panadería, todos de Rumanía. Antes de
abrir la tienda, nos costó mucho encontrar personal. Un 90% de nuestros
empleados es muy responsable. Evidentemente tuve problemas con uno o dos de
ellos y tuve que reemplazarlos, pero repito, la mayoría ha estado trabajando
desde hace más de un año, está progresando diariamente, ama su trabajo y nosotros lo recompensamos.

En cambio, el profesor alemán Matthias
Thesing ve también el vaso medio vacío, no sólo medio
lleno

Los sueldos son demasiado bajos.
La vida es bella, pero hay que sobrevivir. Yo no tengo dinero extra de
Alemania, a diferencia de otros extranjeros que reciben diferentes cantidades
de dinero también de sus países natales. Si uno se ve obligado a vivir del
trabajo propio, del sueldo ganado aquí en Bucarest, el dinero sólo le alcanza
para pagar el alquiler y comer. Pero depende de lo que uno quiere de esta vida.
Es obvio que desde el punto de vista económico, las condiciones son mejores en
Alemania, pero también los gastos son más grandes allí. A mí me gusta Rumanía,
me siento más cerca de su cultura.

Los cuatro ejemplos indican diferentes
experiencias de adaptación rumana. Razones que tienen que ver estrictamente con
la vida privada; oportunidades profesionales, alimentación bio y localidades
rurales tranquilas; relación gastos-ingresos mejor que en sus países de origen;
Bucarest situado en el lugar 159 (de 211) en la clasificación mundial de las
ciudades en las que el nivel de vida de los extranjeros está considerado
barato… Los argumentos de los extranjeros que optan por establecerse en
Rumanía son múltiples. Por un lado, existe la categoría de los que esperan
ganar más que en su país natal, se trata de extranjeros que provienen
expecialmente de países asiáticos y africanos. Por otra
parte, son extranjeros que ocupan cargos altos o
desempeñan actividades en campos que necesitan una preparación superior. Para
ellos, la experiencia de Rumanía representa, en general, un salto en su carrera
profesional.

Según los datos publicados en 2014 por
la Inspectoría General para Inmigraciones, en Rumanía hay casi 100.000 extranjeros con permiso de residencia, de los cuales más
de 41.000 provienen de los estados de la UE y del Espacio Económico Europeo. La
mayoría son italianos, seguidos por moldavos y turcos. Hay también chinos,
húngaros, alemanes, búlgaros, franceses, griegos, servios, sirios y polacos.
Tampoco faltan los estadounidenses, británicos, ucranianos, españoles,
noruegos, venezolanos o iraquíes. Claro que en comparación con el número de los
rumanos que optan por vivir en el extranjero, el de los extranjeros de Rumanía
es mucho menor. Sin embargo, es lo suficientemente importante para preguntarnos si esto representa un
indicador de que nuestro país se vuelve más atractivo.