Rumanía, hacia la plena adhesión a Schengen
Con todas las cuestiones relacionadas con el acervo de Schengen ya resueltas, Rumanía, junto con Bulgaria, con la que forma tándem en este expediente, se incorporó el 31 de marzo al espacio europeo de libre circulación, pero sólo con las fronteras aéreas y marítimas.
Corina Cristea, 08.04.2024, 16:49
Con todas las cuestiones relacionadas con el acervo de Schengen ya resueltas, Rumanía, junto con Bulgaria, con la que forma tándem en este expediente, se incorporó el 31 de marzo al espacio europeo de libre circulación, pero sólo con las fronteras aéreas y marítimas. Esto significa que, 17 años después de su adhesión a la UE, los viajeros procedentes o con destino a otros países de la UE ya no están sujetos a controles de documentos de viaje en 17 aeropuertos y cuatro puertos de todo el país. Se trata de un paso importante que aporta muchos beneficios: «el paso hacia esta nueva etapa contribuirá a impulsar los vínculos comerciales entre Rumanía y los demás Estados miembros, el turismo dentro de la UE y en las relaciones con terceros países«, ha declarado la jefa de la diplomacia de Bucarest, Luminița Odobescu.
Invitado a Radio Rumanía, el ministro del Interior, Cătălin Predoiu, habló de los considerables esfuerzos realizados por Bucarest durante más de una década para llegar a este punto:
«De hecho, Rumanía está preparada para incorporarse al espacio Schengen desde 2010. Desde entonces, ha tomado medidas para reorganizar los controles en la frontera estatal, luchar contra la inmigración ilegal, la cooperación policial internacional, aplicar la legislación europea, poner en marcha sistemas de información Schengen y un sistema de información llamado EURODAC, para controlar el tránsito de inmigrantes. Se han invertido cientos de millones de euros en estos proyectos, en sistemas que son plenamente operativos y funcionales. También se han realizado ocho visitas de evaluación a lo largo de los años para comprobar que se cumplen los criterios de Schengen, y todas estas visitas han concluido con éxito, confirmando que cumplimos los criterios técnicos para la adhesión. Pues bien, en base a este esfuerzo en los últimos años, pero especialmente el año pasado, el Ministerio del Interior ha hecho esfuerzos considerables para construir una relación de confianza, no sólo con el Ministerio del Interior austriaco, sino con todos los demás Ministerios del Interior de los Estados miembros de la Unión Europea, con la Comisión Europea, el comisario europeo de Asuntos de Interior, con otros socios de Rumanía. (…) Tampoco puedo pasar por alto el hecho de que ya estamos exportando experiencia en la lucha contra la inmigración ilegal, en el ámbito de la legislación sobre asilo.»
A partir de este momento, el proceso de adhesión de Rumanía al espacio Schengen también con fronteras terrestres es irreversible, pero esta decisión depende también de factores que no están en la esfera de la intervención diplomática de Rumanía, de acontecimientos y coyunturas políticas exteriores, ha precisado el ministro Cătălin Predoiu. «Es un comienzo y en base de este comienzo, en función de los resultados de las elecciones de otoño en Austria, el único país que se opone a la adhesión de Rumanía con fronteras terrestres, creo que podremos dar el siguiente paso«, considera el politólogo Cristian Pârvulescu:
«He hablado con innumerables austriacos que sienten vergüenza a la hora de hablar de esta situación, de todos los colores políticos. Dicen que es una injusticia que se ha cometido con los dos Estados, entienden muy bien el contexto político y dicen, y esto es muy importante, que en realidad ni siquiera han conseguido sus objetivos, porque al final esta situación sólo ha aumentado el peso electoral de la extrema derecha, del Partido de la Libertad, y no del Partido Popular del canciller Nehammer. En consecuencia, es posible que hacia finales de este año las negociaciones avancen un poco más rápidamente, y dependerá también de la Presidencia húngara y de la nueva Comisión. Habrá muchos imponderables, pero en contextos que podemos esperar sean favorables, podrían conducir a la resolución de este problema que hemos visto perpetuarse durante 13 años».
En cifras, la no adhesión con las fronteras terrestres le cuesta a Rumanía 10.000 millones de euros al año. ¿Contará para alcanzar este objetivo la forma en que Rumanía se presente en Air Schengen?
De nuevo en declaraciones para RRI, el profesor Cristian Pârvulescu:
«Obviamente, nos vigilarán de cerca y cualquier error será especulado por los austriacos para retrasar las cosas, para justificar lo que han argumentado. Por supuesto, sabemos que sus argumentos migratorios no se sostienen. Las instituciones de la Unión Europea, Frontex en primer lugar, a través de los datos que publican, demuestran que las acusaciones austriacas no tienen fundamento. Al contrario, Croacia, cuya entrada permitieron en 2023, está más en la ruta migratoria balcánica que Bulgaria y Rumanía.»
Creo que el problema más complicado que tenemos es con la migración legal desde Rumanía, que ha aumentado mucho: 100.000 migrantes procedentes de países asiáticos, sobre todo en 2022-2023, que debería aumentar a 250.000 este año, dice el politólogo Cristian Pârvulescu:
«Habrá que vigilarlos muy de cerca, porque en cualquier momento pueden coger un avión e ir a los países occidentales. Si escapan a los controles de los aeropuertos rumanos, tendremos efectivamente un problema y existe esa tentación. Vienen a Rumanía, por supuesto, porque también es un mercado un poco más abierto, pero también porque esperan poder ir a Occidente y ahora tienen una oportunidad».
Sin embargo, las autoridades rumanas han asegurado que seguirá habiendo patrullas de la policía de fronteras en los aeropuertos, que verificarán a quienes puedan infringir la ley, porque quienes vienen a trabajar a Rumanía no se benefician del derecho de libre circulación en el espacio Schengen, recuerda Cristian Pârvulescu.