La República de Moldavia entre Este y Oeste
Aunque habían sido previstas para el mes de noviembre del año pasado, las elecciones parlamentarias de la República de Moldavia han sido pospuestas para el 24 de febrero de 2019.
Corina Cristea, 15.02.2019, 18:39
Aunque habían sido previstas para el mes de noviembre del año pasado, las elecciones parlamentarias de la República de Moldavia han sido pospuestas para el 24 de febrero de 2019. ¿Por qué? Porque se van a organizar sobre la base de un nuevo sistema electoral, lo que reclama más tiempo para una mejor organización. Un sistema electoral mixto, criticado por la comunidad internacional y por la oposición de Chisináu. Conforme con el nuevo sistema, 50 de los 101 diputados serán elegidos en listas de partido, y 51 en colegios uninominales. Los críticos dicen que el sistema es denso, complicado y deja lugar a muchas interpretaciones. Los contrincantes electorales con mayor oportunidad son tres formaciones de orientación política distinta. Se trata del Partido de los Socialistas, de izquierda, que es respaldado también por el presidente rusófilo, Igor Dodon, el Bloque Electoral, AHORA, integrado por dos partidos de oposición, de centro derecha y proeuropeo: el Partido Acción y Solidaridad, dirigido por Maia Sandu y la Plataforma de Andrei Nastase, Democracia y Verdad, y por el Partido Demócrata, actualmente en el poder, que se ha declarado prooccidental, pero que mediante muchas de sus acciones consideradas antidemocráticas, han llevado a un enfriamiento de las relaciones con Bruselas.
Recientemente, Vladimir Plahotniuc, el líder del Partido Demócrata se ha declarado adepto de una cuarta dirección, a saber, ni del Este, ni del Oeste, ni de la unión con Rumanía, sino de la propia Moldavia, ha explicado para Radio Rumanía, Dan Dungaciu, director del Instituto de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales de la Academia Rumana, haciendo también hincapié en unas posibles alianzas después de las elecciones, y en lo que está en juego.
“Siempre ha estado algo en juego en la República de Moldavia, desde el momento en que ésta declaró su independencia en Moldavia, las elecciones no son políticas sino geopolíticas, igual que los partidos, y siempre ha existido esta presión e indecisión por parte de la República de Moldavia a la hora de encaminarse decididamente hacia el Este o el Oeste. Porque a raíz de este balanceo registrado a veces durante los mismos mandatos presidenciales, hombres políticos importantes de la República de Moldavia han ganado un mandato político electoral sobre la base de una oferta prooccidental y otro mandato con una oferta prooriental. Desde este punto de vista nos mantenemos en el mismo estado de ambigüedad pero como siempre, las elecciones que están por venir parecen ser más importantes que las de antes.
En general, los partidos de izquierda han sido partidos fuertes que han alcanzado la mayoría de los votos, ha añadido Dan Dungaciu. Pero esta vez nos enfrentamos con una fragmentación ya que no habrá ningún bloque político, ningún partido capaz de alcanzar la mayoría por sí solo. Por lo menos esto resulta de los sondeos y en consecuencia bien habrá una coalición o bien se organizarán elecciones anticipadas. ¿Qué tendrá que hacer Rumanía y a qué deberá prestar atención en relación con el proceso electoral de la República de Moldavia? Dan Dungaciu:
“Rumanía ocupa la presidencia rotatoria del Consejo de la UE en un una etapa complicada, lamentablemente. La República de Moldavia no ha logrado mantener una buena imagen en Bruselas, siendo ésta peor que durante la época de Voronin. En el presente, los responsables de la República de Moldavia ya no son aceptados ni en Bruselas ni en EE. UU. y se puede decir que la República de Moldavia nunca ha dado peor imagen. Desde esta perspectiva, Rumanía se ha creado un problema más porque a raíz de unas infelices decisiones políticas tomadas en la respectiva época, defendió a Moldavia cuando Bruselas intentaba sancionarla severamente e incluso cuando le cortaron la financiación. Las financiaciones se mantendrán bloqueadas para la República de Moldavia hasta que pase la prueba de las elecciones parlamentarias que deberían desarrollarse de manera sumamente correcta. También desde esta perspectiva, Rumanía tendrá que mostrarse firme en transmitir que la batalla política, parlamentaria, tiene que ser justa. Durante su presidencia, Rumanía asume el papel de debatir el tema de la Asociación Oriental, difícil de aplicar a nivel europeo ya que en Bruselas, el nivel de saturación al respecto es máximo. En consecuencia, si Rumanía plantea este asunto sin asegurarse de que lo que ocurre en Moldavia es por lo menos decente, corre el riesgo de perder la credibilidad en la relación con los socios de la UE.
El mismo día de las elecciones parlamentarias, en la República de Moldavia será organizado un referéndum consultivo sobre la reducción del número de diputados de 101 a 61, así como a fin de conceder a los ciudadanos el derecho a revocar del cargo a los diputados. Una gestión calificada por muchos de populista y de arma en las manos del actual poder que persigue aplazar cualquier debate relacionado con la lengua o con la integración europea de la República de Moldavia.
(versión española: Rodica Popa)