Embajadores gastronómicos de Rumanía
Es un producto de pastelería que se prepara con hojaldre relleno de queso salado, mezclado con requesón, huevos e yogur. Las hojas del producto se obtienen al extender y tirar el hojaldre.
Corina Cristea, 21.07.2023, 13:38
Es un producto de pastelería que se prepara con hojaldre relleno de queso salado, mezclado con requesón, huevos e yogur. Las hojas del producto se obtienen al extender y tirar el hojaldre. Una vez rellenas, se enrollan, se arrugan y se colocan en forma de espiral en badejas redondas. El producto tiene una consistencia blanda, tierna, debido a la mezcla de huevos e yogur que se vierte encima, frente a otros productos de este tipo, que tienen una consistencia crujiente, con una superficie un poco quebradiza. Otra diferencia frente a otros productos de este tipo es el uso del hojaldre sin congelar, recién preparado para cada bandeja del producto final. Estamos hablando de la empanada de Dobrogea, «plăcinta dobrogeană» en rumano, un producto muy popular en el sudeste del país, pero que se prepara también en toda Rumanía, y que ha recibido reconocimiento y protección a nivel europeo en el sistema de calidad Indicación Geográfica Protegida (IGP). Los trámites comenzaron en 2017, cuando fue creada también la Asociación Tradicional Moesis para promover el producto tradicional rumano y a los productores, y también la construcción de la identidad de los productos rumanos, tanto en los mercados interiores, como exteriores.
Plăcinta dobrogeană completa pues la lista, de momento no muy larga, de productos alimentarios rumanos reconocidos ya en los sistemas de calidad europeos. Esta lista comenzó con la Mermelada de ciruela Topoloveni, e incluye también el Salami de Sibiu, el Novac ahumado de Ţara Bârsei, el Arenque del Danubio ahumado, las Salchichas de Pleşcoi, la Telemea de Sibiu (un tipo de queso), el Caşcaval de Săveni (otro tipo de queso rumano), la Ensalada de huevas de lucio de Tulcea y la Ensalada tradicional con huevas de carpa, todos ellos con Indicación Geográfica Protegida, junto con el tipo de queso Telemea de Ibăneşti, con Denominación de Origen Protegida (DOP).
En el sudeste de Rumanía, plăcinta dobrogeană, un producto con cientos de años de tradición, nunca falta de la mesa de Año Nuevo (con billetes o al menos una moneda oculta para los afortunados del próximo año), y tampoco falta en el último domingo durante el cual se puede comer queso antes del comienzo del ayuno («Duminica Lăsatului sec de brănză», como se denomina en rumano), justamente antes del comienzo de la Cuaresma, como afirma Paula Vals, líder de la Asociación Tradicional Moesis. Según se menciona en la receta que se pasa de generación en generación, las novias preparan esta empanada en Dobrogea, y también en otras regiones del país, un día después de la boda para mostrar a los invitados que saben preparar y extender la hoja más fina. Los detalles burocráticos muestran que los pasos y el procedimiento a seguir para obtener el reconocimiento y la protección a nivel europeo en el sistema de calidad IGP están mencionados en el Reglamento de la UE 1151/2012 y en una Orden de 2015, que establece ciertos procedimientos. Stefan Pădure, presidente de la Asociación para la promoción del producto rumano, ha explicado estas cuestiones técnicas en Radio Rumanía:
«Los reglamentos y los esquemas de calidad representan la manera a través de la cual los Estados miembros pueden financiar sus productos dentro de una política agrícola común en la que uno no puede intervenir para apoyar la venta de algunos productos o su promoción en el mercado único europeo. Así se hace una diferencia y a partir de aquí vamos a encontrar una explicación para varias cosas. En primer lugar, para proteger también los equivalentes en los reglamentos europeos, tenemos cinco reglamentos que crean productos protegidos: 1151 – con indicación geográfica, denominación de origen y especialidad tradicional garantizada y producto de montaña. Después hay reglamentos respecto a los productos orgánicos, bio o ecológicos, denominaciones idénticas según cada país. Aquí tenemos los vinos, las bebidas alcohólicas y las bebidas aromatizadas. Estos reglamentos se aplican de forma unitaria en todos los Estados miembros. Después hay un punto b, donde tenemos esquemas de calidad nacionales. Y, desgraciadamente, en Rumanía hay solo dos: producto tradicional y receta establecida. Cuando se comunican a la Comisión Europea y cumplen con las normas del Reglamento 1305, producen el mismo efecto que los reglamentos europeos, es decir que un producto puede cumplir con un reglamento europeo o con un esquema nacional, si se notificó a Bruselas sobre aquel esquema. Entonces, todos los Estados miembros intentan buscar el mayor número de esquemas de calidad posible, para certificar el mayor número de productos nacionales posible. Y eso porque, en los Estados miembros, para poder apoyar en el mercado a los granjeros, a los productores agrícolas, y para poder ofrecer productos de alta calidad y mantener la calidad, hay que proporcionar estos esquemas de apoyo».
Actualmente en la UE hay más de 1.600 productos con indicación geográfica protegida o denominación de origen protegida. Italia tiene 317, Francia, 260, España, 204, seguidos por Alemania, Portugal y Grecia con más de 100 productos cada uno. Y China, país que no es miembro de la UE, tiene actualmente 99 productos. Nuevamente ante el micrófono, Ștefan Pădure, quien ha hablado sobre los esquemas de calidad:
«Estos esquemas de calidad con indicaciones geográficas son más restrictivos en el caso de la Denominación de Origen Protegida, porque no es necesario conseguir la materia prima y desarrollar todas las actividades en una zona delimitada. En el caso de la Indicación Geográfica, es posible obtener la materia prima fuera de la zona delimitada. Estamos en un espacio, en una globalización y en una europeización en que se pierde el carácter nacional. En cambio, Europa ha entendido que este carácter regional local se puede mantener, y justamente esto es lo que pasa a través de los esquemas de calidad europeos y nacionales. Las cosas son muy estrictas y están muy protegidas ahora».
Además de los productos alimentarios, Rumanía también tiene bebidas alcohólicas registradas en el Registro de las indicaciones geográficas de la UE, en las categorías Aguardiente de frutas («rachiu de fructe», en rumano) y Aguardiente de vino («rachiu de vin», en rumano). Además, en el Ministerio de Agricultura se desarrollan, por ejemplo, actividades que tienen por objetivo registrar en los sistemas de calidad europeos el producto «Pelin», en la categoría de las bebidas aromatizadas.
Autora: Corina Cristea
Traducción al español: Monica Tarău