La fortaleza de Făgăraș, entre las más bellas del mundo

Hoy nos paramos en el centro de Rumanía, en la provincia de Brașov, y conocemos uno de los monumentos mejor conservados en todo el país.

Daniel Onea, 10.08.2023, 09:06

Hoy nos paramos en el centro de Rumanía, en la provincia de Brașov, y conocemos uno de los monumentos mejor conservados en todo el país. Muchas publicaciones de todo el mundo han escrito que es una de las fortalezas más bellas del mundo. La fortaleza de Făgăraș, cuya construcción se completó en el siglo XVII, fue sitiada más de 26 veces, pero nunca fue conquistada. Hoy, en el espacio interior, funciona el Museo de la Tierra de Făgăraș Valer Literat, cuyas puertas nos abre Elena Băjenaru, su directora:

La fortaleza de Făgăraş, el monumento histórico más importante del área de Făgăraş, es un monumento histórico construido hace más de 600 años por los gobernantes de Valaquia. Se trata de una fortaleza que, en este momento, está finalizando un proyecto de restauración con fondos europeos. En nuestra fortaleza, el turista ingresa por un puente de madera reconstruido tal como era en el siglo XVII, gracias a este proyecto. Es una fortaleza que actualmente es una de las fortalezas defensivas mejor conservadas de Rumanía, rodeada por un foso de agua también construido a mediados del siglo XVI. Es una fortaleza rodeada por dos muros defensivos macizos y cuatro baluartes. Además, esta fortaleza, que tiene un sistema defensivo muy bien establecido, nunca fue conquistada por la fuerza de las armas, pero fue saqueada varias veces.

Antes de entrar en el museo, visitando el castillo, el turista puede realizar un circuito exterior:

“Se pueden ver los baluartes, las dos murallas de defensa, se puede caminar por el sendero de guardia reconstruido y restaurado tal y como era en el siglo XVII. En uno de los bastiones se instalará una exposición dedicada a la guardia de la fortaleza de Făgăraş. Tenemos la guardia de la fortaleza y recreamos una ceremonia de apertura y cierre de las puertas, como se hacía en el siglo XVII, en tiempos de una de las princesas de la fortaleza, Anna Bornemisza. Luego se accede a un patio interior muy bonito, en medio del cual se ha restaurado la fuente del siglo XVII. Se suben las escaleras y, partiendo del primer piso, se llega al museo. En el museo presentamos, por un lado, la historia de la Tierra de Făgăraş, una zona con una historia muy rica. El turista también verá reconstrucciones de época en este circuito de exhibición. Hemos reconstruido la Sala de Dieta, la Dieta de Transilvania, el Gobierno y Parlamento antiguo de Transilvania, hemos reconstruido un dormitorio de una de las princesas de la fortaleza de Transilvania, Anna Bornemisza, y por supuesto, se pueden ver exposiciones de arte decorativo, artes plásticas, artesanía campesina y exposiciones temporales. En el segundo piso, tenemos cuatro habitaciones. Las llamamos el Salón del Trono. En los inventarios de la fortaleza del siglo XVII, se las llamaba Gran Palacio, donde los príncipes de Transilvania recibían a los mensajeros de las embajadas de las potencias europeas. Miron Costin, así como también el rey de Polonia, Sobieski, fueron invitados a esta sala. Ahora estas cuatro habitaciones tienen destinos culturales. Organizamos eventos culturales, conciertos de música clásica, conciertos de música medieval, actividades culturales en general, y son espectaculares

El proyecto de restauración de la fortaleza se completa a finales de mayo y, una vez finalizado, a partir del 1 de junio, se reanudará la ceremonia de cierre y apertura de las puertas. Verás entonces a la guardia de la fortaleza, formada por 12 soldados, ataviados con armaduras del siglo XVII, y también aparecerá una de las princesas de la fortaleza, que leerá un documento emitido cerca del año 1678. Por otro lado, dice Elena Băjenaru, directora del Museo de la Tierra de Făgăraș Valer Literat, es interesante que podamos establecer una conexión entre la tortura y la fortaleza por al menos dos razones:

Después de 1700, se llevó a la fortaleza un mecanismo de tortura: la Doncella de Hierro. Se trata de un mecanismo que apareció por primera vez en España, en algún momento cerca de 1515, cuando al condenado a muerte se le enviaba a besar como último homenaje una imagen de la Virgen María que colgaba del cuerpo de este mecanismo. El condenado se acercaba a este mecanismo y pisaba una trampilla, y por detrás salían unos cuchillos que atravesaban el cuerpo del condenado. La trampilla se abría y el cuerpo caía en un canal donde había unas lanzas puntiagudas. El canal comunicaba con el río Olt, situado a 700-800 metros de distancia. Luego, la fortaleza de Făgăraş tiene una Torre de Mazmorras que fue una prisión medieval bastante dura y una prisión comunista durante una década, entre los años 50 y 60, donde estuvieron encarcelados casi 5000 presos políticos.

En la temporada de verano, que se acerca, al llegar a la fortaleza de Făgăraș, podrás participar en eventos inolvidables:

“Además de proyectos culturales, exposiciones temporales y presentaciones de libros, organizamos un festival medieval el último fin de semana de agosto. Es un festival medieval al que asisten órdenes de caballería de Transilvania y de toda Rumanía. Tenemos espectáculos de teatro medieval, espectáculos de fuego, conciertos de música medieval, conciertos de música clásica, teatro medieval, demostraciones de lucha, talleres de herrería, todo lo que significaba y significa una actividad en torno a esta fortaleza medieval. Luego, a la salida del circuito de exhibición, tenemos una tienda de suvenires muy bien surtida. También tenemos guías de la fortaleza en inglés y húngaro, tenemos libros en inglés sobre Transilvania, sobre los monumentos más importantes que tiene Rumanía, además de lo que solemos ofrecer: suvenires con la fortaleza de Făgăraş.

Cerca de la fortaleza de Făgăraş, hay otros dos monumentos que Elena Băjenaru, directora del Museo de la Tierra de Făgăraș Valer Literat, recomienda a los turistas que pasen más tiempo en la zona:

“En primer lugar, los enviaría a ver la iglesia construida por Brâncoveanu a finales del siglo XVII, cerca de 1697, por al menos dos razones. La iglesia está dotada de una pintura muy hermosa, realizada por Preda Zugravul, y porque el iconostasio de esta pequeña iglesia es quizás el iconostasio más hermoso del arte brâncovenesc. Además, está muy cerca de la fortaleza, por lo que merece la pena. También recomendaría a un turista que visite la Iglesia Católica Romana, un antiguo monasterio franciscano, que también está muy cerca. Se considera una de las primeras iglesias pintadas en estilo barroco en Transilvania.

He aquí, por tanto, un destino interesante, que a partir del 1 de junio te espera no solo con las puertas abiertas, sino también con muchos y variados eventos.