Club cultura: La danza en el Festival Internacional de Teatro de Sibiu 2017
El baile ocupa un lugar privilegiado en el programa del Festival Internacional de Teatro de Sibiu. Este año uno de los grandes atractivos del Festival ha sido la compañía de danza Vertigo Dance Company de Israel.
Luana Pleşea, 05.08.2017, 10:00
El baile ocupa un lugar privilegiado en el programa del Festival Internacional de Teatro de Sibiu. Este año uno de los grandes atractivos del Festival ha sido la compañía de danza Vertigo Dance Company de Israel.
Fundada en 1992 en Jerusalén por Noa Wertheim y Adi Sha’al, Vertigo Dance Company es una de las más famosas compañías de danza de Israel, y es la quinta vez que ha venido este año a Sibiu para participar en el Festival. Este año ha presentado dos espectáculos: ”Vértigo 20”, producción ganadora del premio de excelencia del Ministerio de Cultura de Israel, y un espectáculo más reciente, ”Yama”, firmado igual que el primero por la coreógrafa Noa Wertheim quien nos ha hablado primero sobre ”Vértigo 20”.
”He empezado el espectáculo pensando en una celebración pero para mí como artista es muy fácil crear una danza solo para la diversión o para una fiesta. No soy ese tipo de artista. Siempre procuro llegar a la esencia de mi trabajo. Lo que me parece muy interesante es el tema de la elección y en este tema he centrado mi trabajo. Porque siempre me hago la pregunta de si nosotros podemos decidir algo y qué es lo que podemos controlar en esta vida. Así pues, la gran pregunta es qué deberíamos elegir y cómo hacerlo. Con este espectáculo quise celebrar los momentos de fiesta de nuestra vida, sugerir el tiempo de celebración y el espacio entre la tierra y el cielo. Sugerimos los lugares donde los pies no tocan el suelo, como unas sillas, pero creadas de forma abstracta, creando un espacio como si fuera una habitación entre el cielo y la tierra. Siempre que queramos actuar entramos en este mundo dando saltos y salimos como unos títeres manejados por Dios, por el público…”.
”Yama” es diferente completamente de ”Vertigo 20”, salimos de esta zona de la celebración para entrar en un mundo mucho más espiritual. Noa Wertheim.
”Yama significa agua, pero los trajes son negros, todo es negro. Tenemos una cajas que cuelgan encima de nosotros porque queremos sugerir lo que está escrito en la Biblia, que el segundo día fueron creados el agua y el cielo. Uso el agua en movimiento, las olas, una física muy fuerte que en las artes marciales se llama ”Fa jin”. Al final creamos un baile de derviches. Es completamente diferente. ”Vertigo 20” es fiesta, mientras que ”Yama” es difícil, serio, profundo y al final trae esperanza espiritual, creo yo.”
En la sección Danza del Festival de Teatro de Sibiu ha vuelto a participar por segundo año consecutivo la Compañía de Danza Aérea Brenda Angiel de Argentina. Fundada en 1994, de la compañia que lleva su nombre Brenda Angiel crea la primera escuela de baile aéreo de Buenos Aires en 1998. El año pasado tuvo un éxito enorme en Sibiu con su producción ”Tango a la altura” y este año ha vuelto con un espectáculo que continua al anterior en que los bailarines flotan por el aire, creando un caleidoscopio de movimiento y animación. Este tipo de baile es un lenguaje especial, no una acrobacia de circo. Brenda Angiel.
”Lo que estoy mostrando ahora es resultado de 22 años de trabajo en que practicamos los mismos movimientos. No es algo que se puede hacer de un día para otro. Me gusta mucho investigar el movimiento, para obtener perspectivas diferentes, para cambiar las posiblidades. Me he centrando en la danza aérea, y he descubierto que puede ofrecer nuevas dimensiones al movimiento, y puede ofrecer al público una nueva perspectiva. Esto me parece muy atractivo. De alguna forma ofrece oportunidades infinitas. También es cierto que hoy día el baile aéreo es un género relacionado más bien con el circo, pero yo vengo de la danza y describo mi trabajo como danza. No busco hacer acrobacias. Yo bailo. Y los elementos acrobáticos vienen de aqui. Por eso creo que la esencia de mi trabajo es la danza. Y la danza habla con el movimiento, no necesita nada más. A veces la danza puede llegar a ser muy emotiva o puede contar cuentos… yo juego de alguna forma con lo abstracto, sugiero cuentos pero al final siempre vuelvo al movimento”.
Además de Israel, Argentina, España, Francia y Corea del Sur, Rumanía no podía faltar en la serie de espectáculos de baile del Festival de Sibiu. Gigi Căciuleanu ha vuelto este año con un espectáculo de teatro coreográfico que se dirige sobre todo a los jovenes: #EMOJIPLAY, llevado al escenario del Teatro Excelsior, de Bucarest. «#EMOJIPLAY combina de forma aparentemetne lúdica el lenguaje tridimensional de los BailActores con la visión y un mundo extraño bidimensional de nuevos símbolos y metáforas” afirma el artista. Gigi Căciuleanu.
”La idea de comunicación es la protagonista del espectáculo, la idea del diálogo. A veces puede ser un diálogo de sordos, otras veces relámpagos dialogantes, tal como ocurre cuando limpias el polvo de una pantalla o pasas el dedo como si fuera una cabeza de cerrilla por el raspador del cerillero. … Es cierto que este gesto puede destrozar a un interlocutor si le das un no me gusta por ejemplo… Además, esta necesidad de humanidad en un mundo que se está deshumanizando es muy importante. Esta sería la idea del espectáculo. El hombre moderno pasa mucho tiempo delante de todo tipo de pantallas y se aprovecha de los progresos de la teconología que finalmente no sabemos si son beneficiosos para la humanidad. A lo mejor deberíamos transformarnos en robots o todo lo contrario: como vivimos entre tantas pantallas es posible que nuestro cuerpo cobre más importancia. Es posible que nuestra carne, nuestra piel, nuestros ojos, nuestra mirada se conviertan en un diálogo mucho más interesante que los signos en una pantalla.”.
Gigi Căciuleanu recibió una estrella en el Paseo de la Fama de Sibiu en la primera edición de este proyecto lanzado en 2013, por la ”unicidad de su creación en el mundo de la danza y del teatro”.