Actualidad deportiva 28 de septiembre de 2022
La delegación rumana que ganó cuatro medallas de oro en el Campeonato Mundial de Remo celebrado en Racice, República Checa, regresó al país este lunes, siendo recibida en la sala oficial del aeropuerto Henri Coandă.
Simona Sarbescu, 28.09.2022, 18:18
La delegación rumana que ganó cuatro medallas de oro en el Campeonato Mundial de Remo celebrado en Racice, República Checa, regresó al país este lunes, siendo recibida en la sala oficial del aeropuerto Henri Coandă.
Durante la ceremonia, la presidenta de la Federación Rumana de Remo, la gloria del remo mundial, Elisabeta Lipă, dijo al ministro de Deportes, Eduard Novak, que espera que la bicampeona del mundo Simona Radiş sea premiada por el Gobierno con 200.000 euros, tal como lo fue David Popovici tras las dos medallas del Mundial de natación.
Simona Radiş obtuvo en el Campeonato Mundial de Racice (que se llevó a cabo del 18 al 25 de septiembre) dos medallas de oro en remo doble femenino y ocho más uno femenino.
En junio, el nadador David Popovici ganó dos medallas de oro en los 100 m estilo libre y 200 m estilo libre en el Campeonato Mundial de Natación en Budapest. Estos fueron los dos primeros títulos mundiales de natación masculina rumana. A su regreso al país, el ministro Eduard Novak entregó en el aeropuerto a Popovici un trofeo y un cheque por valor de 200.000 euros por parte del Gobierno de Rumanía.
Posteriormente, el presidente del país, Klaus Iohannis, condecoró al deportista David Popovici con la máxima distinción del Estado rumano, la Orden Nacional Estrella de Rumanía en el grado de Caballero.
Rumanía ganó cuatro medallas de oro en el Campeonato Mundial de Remo que finalizó el domingo en Racice, en la República Checa. La delegación tricolor ocupó el tercer lugar en el ranking de naciones, siendo superada solo por Gran Bretaña, con siete medallas de oro, una de plata y cuatro de bronce, y por Italia, que ganó cinco medallas de oro, tres de plata y una de bronce. La primera medalla rumana fue ganada el viernes por Ionela Cozmiuc, en scull individual, la categoría ligera. Reinante campeona de Europa, era la favorita en la lucha por el oro. Pero tuvo un comienzo difícil. Después del primer cuarto de la carrera, estaba en tercer lugar. Luego pasó al segundo lugar, donde también estaba a 1500 metros, un segundo y medio por detrás del primer lugar. Sin embargo, se impuso al final, terminando el recorrido casi dos segundos por delante de Martine Veldhuis, de Holanda, que cruzó la línea de meta en segundo lugar. La medalla de bronce fue para la neozelandesa Jackie Kiddle. El sábado subió al escalón más alto del podio el bote de doble scull masculino, formado por Marius Cozmiuc, marido de Ionela, y Sergiu Bejan. Los dos también son campeones de Europa en este evento, y Marius ganó la plata olímpica el año pasado junto con Ciprian Tudosă. El primer título mundial rumano el domingo lo ganó el equipo de remo doble femenino, compuesto por Ancuța Bodnar y Simona Radiș, campeonas olímpicas y europeas. Favoritas indiscutibles, lideraron la carrera de punta a punta, ganando con un tiempo mejor que el de las holandeses por más de tres segundos.
Simona Radiș nació el 5 de abril de 1999 en Botoşani. Está inscrita en el club Steaua Bucarest. Logró las mejores actuaciones de su carrera junto a Ancuța Bodnar, con quien forma pareja, en el bote de dos remos, desde hace tres años. Su primera actuación se registró en 2019, a principios de junio, y fue ganando medallas de plata en el Campeonato de Europa en Lucerna, Suiza. A esto le siguió, en septiembre, en Linz, Austria, al ganar las medallas de plata en los Campeonatos del Mundo. En las siguientes grandes competiciones, concretamente en los Campeonatos de Europa de Polonia, de Poznan, de 2020, y de Italia, de Varese, del año pasado, Ancuța Bodnar y Simona Radiş ganaron las medallas de oro. También en 2021, en Tokio, ganaron el único título olímpico de la delegación rumana. El año 2022 les trajo un nuevo título europeo, en Múnich, y las medallas de oro de Racice.
Después de tres etapas de la fase de grupos de la Liga de Campeones de balonmano femenino, los dos equipos que representan a Rumanía siguen invictos. El domingo, en el grupo B, el Rapid Bucarest, campeón de Rumanía, derrotó con claridad al Kastamonu en Turquía. El conjunto dirigido por el técnico español Carlos Viver empezó mal el partido, acabando ganando 8-4. Sin embargo, los de Bucarest remontaron y dieron la vuelta a la situación, entrando al descanso con una ventaja de 15 a 12. En la segunda parte del partido, Kastamonu resistió un poco más, pero al final el Rapid se adelantó ganando con siete goles diferencia.
La mejor anotadora de la selección rumana fue Eliza Buceschi, que anotó siete veces. Metz, de Francia, y Rapid lideran la clasificación del grupo, ambos con cinco puntos cada uno.
En el grupo A, el CSM Bucarest evitó por poco la derrota ante el equipo alemán Bietigheim, con el que acabó empatado, 28-28, el domingo, en la capital rumana.el Bietigheim, un equipo invicto durante mucho tiempo, controló la primera parte del juego y en el medio tiempo tenía tres goles más: marcador 16-13. CSM logró darle la vuelta al marcador tras el descanso, pero falló varios ataques, desperdiciando la oportunidad de escapar. Al final, el equipo alemán volvió a la ventaja, pero el subcampeón rumano empató cuando faltaban cinco segundos para el final, por medio de la noruega Malin Aune, tras un ataque fallado por el equipo visitante. En el grupo A, Bietigheim y CSM ahora ocupan el segundo y tercer lugar, con cinco puntos cada uno. En primer lugar está el equipo noruego Vipers Kristiansand, con seis puntos sobre el máximo posible.
El lunes, en Bucarest, en la Liga de las Naciones, la selección rumana de fútbol derrotó a Bosnia y Herzegovina por 4 a 1. La victoria ante los exyugoslavos, sin embargo, dejó de tener trascendencia para la configuración final del tercer Grupo de la Liga. B. Bosnia y Herzegovina ya ascendía al primer escalón desde la penúltima etapa, por lo que llegaba a Bucarest sin varios titulares. Rumanía necesitaba una victoria, pero eso habría producido efectos solo si Finlandia no ganaba en Montenegro. Sin embargo, los escandinavos se impusieron, en Podgorica, por 2-0, por lo que la victoria de los tricolores no influyó en la clasificación. Rumania ocupó el 4° lugar, el último, empatado a puntos con el equipo de Montenegro, pero con menor diferencia de goles. En estas condiciones, a partir del año que viene, los tricolores jugarán en la tercera división de la Liga de Naciones, junto a equipos como Malta, Andorra o Islas Feroe. En la Liga C también hay equipos como Suecia y Bulgaria, que han caido a la zona baja de la nueva competición continental.