Resultados económicos
El Producto Interior Bruto de Rumanía ha crecido un 5,2% en el primer semestre del 2016 frente al período similar del 2015, según ha informado el Instituto Nacional de Estadística. Además, el PIB estimado para el segundo trimestre del 2016 ha aumentado un 6% frente al segundo trimestre del año pasado. La ministra rumana de Hacienda, Anca Dragu, ha declarado lo siguiente para Radio Rumanía:
România Internațional, 20.09.2016, 17:50
“Es verdad, tenemos un crecimiento de un 6% en el segundo trimestre, el mayor en Europa. Esto probablemente conllevaría durante todo el año un crecimiento económico algo mayor de lo que hemos estimado a principios del año, de un 4.2%. En cuanto a la estructura de este crecimiento, es verdad que el consumo ha registrado el mayor avance, lo que no es nada asombroso. Esto estaba previsto en nuestras estimaciones, porque hay una serie de medidas que favorecen el consumo, y me refiero a la disminución de las tasas sobre el consumo así como a los aumentos salariales. Pero hemos tenido también inversiones de alto rendimiento en el segundo trimestre. Hemos registrado un crecimiento de las construcciones de un 9%, las inversiones han crecido un 15%, mientras que las grandes inversiones han aumentado un 20% frente al año pasado. Claro que el año pasado las inversiones en la infraestructura financiadas por fondos públicos no fueron muy exitosas en la primera mitad del año. Quisiera mencionar también las inversiones extranjeras directas que han registrado también un crecimietno de casi un 20%. Eso es un elemento muy importante que demuestra que la confianza en la economía rumana es grande. La gente sigue invirtiendo y las compañías tanto rumanas, como extranjeras, realizan inversiones en la economía rumana.
Rumanía registra un crecimiento económico similar con el registrado antes del estallido de la crisis. ¿Existe el riesgo de volver a la situación anterior a la crisis? Anca Dragu opina lo siguiente:
“No existe este riesgo, porque la situación es distinta. Antes de la crisis, Rumanía tenía desequilibrios múltiples, tanto internos como externos. En el ámbito externo, y esto nos ha afectado más, teníamos una dinámica muy difícil de las exportaciones y un déficit de cuenta corriente de un 14% del PIB. Para este año se prevé que el déficit de cuenta corriente rondará el 2%. Por lo tanto, se nota una diferencia muy grande, lo que demuestra un desequilibrio externo. Luego, en el ámbito interno teníamos también una serie de desequilibrios, el déficit presupuestario había crecido. Por eso, debemos continuar las políticas prudentes que no alimenten en el futuro el consumo en la misma medida y también tenemos que mantener el objetivo del déficit presupuestario e incluso debemos empezar la disminución gradual del déficit presupuestario en los años que vienen.
¿Qué sucederá hasta finales del año en lo tocante al crecimiento económico? De nuevo ante los micrófonos de RRI, la ministra de Hacienda, Anca Dragu:
“El 6% es probablemente el nivel máximo. El tercer trimestre está influenciado por la agricultura. El 2016 parece un año bastante bueno, pero puede haber una diferencia significativa entre un año bueno y uno excepcional. Si es un año excepcional, volveremos a registrar niveles muy altos también en el tercer trimestre. Pero, en general, yo diría que no tiene nada que ver con la situación anterior a la crisis. Además, creo que es necesario tener un enfoque prudente y mantenernos dentro de los equilibrios macroeconómicos actuales.
El Instituto Nacional de Estadística ha informado que el pasado mes de agosto, la tasa anual de la inflación fue de – 0,2%. El analista económico Aurelian Dochia aclara:
“Ha habido una inflación negativa por un período bastante largo. Creo que más de un año. Esto es algo poco habitual para nosotros, pero el Banco Central no ha intervenido como han hecho otros bancos centrales que han cortado el interés de política monetaria por debajo de cero. Actualmente hay muchos bancos centrales en el mundo que han cortado el interés por debajo de cero. En Rumanía eso no ha sucedido y es poco probable que suceda, sin embargo esperamos que en la segunda mitad del año la inflación vuelva a registrar una tendencia creciente que podría continuar también el año que viene. Claro que muchas cosas dependen de lo que pasa en el extranjero. El precio del petróleo ha quedado a niveles bastante bajos y no hay perspectivas de subida, y eso significa que incluso en Rumanía la influencia de dicho factor será más bien de mantener la inflación bajo control. La cosecha en 2016 se anuncia bastante uena. Aunque los granjeros decían recientemente que a causa de la sequía los precios de los cereales podrían subir, probablemente no habrá subidas significativas desde el punto de vista del índice de la inflación. Así que al parecer, todos los factores indican una inflación muy baja, incluso negativa hacia finales del año y en 2017 tal vez volvamos a tener una inflación positiva. Sin embargo, muchas cosas pueden ocurrir hasta entonces en los mercados financieros europeos. En Europa hay bastantes señales de que existe cierta inquietud en los mercados financieros y eso puede conllevar cambios tanto en las políticas de los bancos centrales, como en la evolución de otros factores, con un eventual impacto sobre los precios.
El pasado mes de agosto, las más significativas bajadas de los precios se registraron para las frutas frescas, las patatas y otras legumbres, mientras que subidas más significativas registraron los precios de los cítricos, los huevos, el tabaco, la judía, el azúcar y la carne de cerdo.