Desde el final de la Segunda Guerra Mundial en 1945 hasta 1989, el Ejército Rojo impuso regímenes de partido comunista en los países de Europa Central y Oriental.
Según las teorías marxistas-leninistas sobre los medios de producción, la propiedad debía ser común, de todos aquellos que los usaban y producían plusvalía.
La historia de la flota militar rumana comienza a mediados del siglo XIX, cuando tras la unión de los dos principados, Moldavia y Valaquia, se unieron las flotas mercantes fluviales de ambos.
Una de las presencias constantes en la historia del espacio rumano hasta el siglo XIX fue la servidumbre o esclavitud, como se denominaba en los documentos.