Temores causados por la pandemia
Una cuarta parte de los empleados rumanos no tienen ahorros, ni siquiera para un mes, si pierden su trabajo.
Roxana Vasile, 20.03.2020, 14:51
Uno de cada dos empleados rumanos teme que los efectos de COVID-19 desencadenen una crisis económica, y una cuarta parte de los empleados dicen que no tienen ahorros ni siquiera para cubrir un mes, si se quedan sin trabajo, indica un sondeo realizado por la plataforma de reclutamiento BestJobs. Un 21% de los encuestados dicen que tienen suficiente dinero para cubrir sus gastos de mantenimiento durante un máximo de tres meses, y casi un 10%, durante seis meses.
Solo un 7,4% de los rumanos tienen dinero reservado para al menos un año. Según la encuesta, un 34,5% de los que se sentían amenazados con su trabajo estaban muy preocupados. Al mismo tiempo, más del 43% de las personas entrevistadas temen que la situación de la pandemia de coronavirus pueda afectar económicamente a la empresa donde trabajan, y, si se encontraran en la situación de buscar un nuevo trabajo, más de un 45% piensan que esto sería difícil y más de un 20%, muy difícil.
Desde la perspectiva de los empleadores, más de la mitad de ellos han declarado que tienen planes de continuidad comercial en caso de agravamiento de la epidemia de coronavirus en Rumanía. Al menos por ahora, los principales efectos del contexto epidemiológico son que los empleados tienen miedo de entrar en contacto directo con los clientes, que algunos proveedores no han podido cumplir con las demandas, que los precios de ciertos productos que compran han aumentado sustancialmente o que los empleados ya no pueden viajar por trabajo al extranjero.
La mayoría de los empleados, casi un 44%, dicen que están un poco preocupados de que puedan contraer coronavirus, mientras que un 35% dicen que están muy preocupados. La mayoría (alrededor del 82%) han declarado que se lavan y desinfectan las manos con mucha frecuencia, más de 7 de cada 10 encuestados han dicho que evitan los espacios públicos abarrotados tanto como sea posible, y un 67% ya no entran en contacto directo con otras personas. Al mismo tiempo, casi la mitad evitan el transporte público. La encuesta se realizó entre el 9 y el 16 de marzo.
(Versión española: Simona Sarbescu)