Rumanía y las agencias internacionales de calificación
Las agencias internacionales han reconfirmado la calificación soberana de Rumanía y su perspectiva estable, pero hay margen para el crecimiento, afirma el ministro de Finanzas, Marcel Bolos
Ştefan Stoica, 22.04.2024, 10:24
El responsable de finanzas del Gobierno, Marcel Bolos, se reunió recientemente en Washington, donde asistió a las reuniones de primavera del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial, con representantes de las agencias de calificación S&P y Moody’s, que miden continuamente los parámetros fiscales y presupuestarios de las economías del mundo. Los debates se centraron en las especificidades económicas de Rumanía y en las estrategias para garantizar la estabilidad macroeconómica.
Las agencias han reconfirmado nuestra calificación soberana y nuestra perspectiva estable, pero esto no significa que no haya margen para el crecimiento, declaró el ministro Bolos más tarde en Facebook. Recordó que los inversores extranjeros tienden a fijarse en países con calificaciones altas porque se consideran más estables. Una calificación alta, insistió, facilita el acceso a la financiación en los mercados internacionales de capitales a costes más bajos.
En esencia, un país con una calificación alta suele considerarse un socio más fiable y estable en los negocios, escribió el ministro de Finanzas en su página de Facebook. Bolos reiteró que se están estudiando medidas como la consolidación fiscal, el aumento de la inversión en infraestructuras y educación, el estímulo de la inversión privada y el fomento de una gobernanza económica eficiente y transparente para aumentar la competitividad económica y crear un entorno propicio a la inversión sostenible.
El 12 de abril, la agencia de calificación S&P reconfirmó la calificación de la deuda pública de Rumanía en «BBB-/A3» para la deuda en divisas a largo y corto plazo, y una perspectiva estable. Según el Ministerio de Finanzas, la decisión de reconfirmar la calificación soberana y mantener la perspectiva estable se apoya, en opinión de la agencia, en el moderado nivel de deuda externa y pública y en las sólidas perspectivas de crecimiento para los próximos dos años.
Al mismo tiempo, S&P anticipa que los compromisos de Rumanía en el marco del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia de la Unión Europea seguirán sirviendo de anclaje para las reformas políticas de las autoridades de Bucarest.
A principios de noviembre del año pasado, Moody’s también confirmó la calificación a largo plazo de Rumanía en «Baa3» con perspectiva estable. Según la agencia, la confirmación de la calificación «Baa3» se debe a las sólidas perspectivas de crecimiento a medio plazo de Rumanía, apoyadas por sólidas entradas de fondos europeos e inversiones extranjeras directas.
La calificación reconfirmada también refleja los indicadores sobre la carga de la deuda y la asequibilidad de la deuda. Estos siguen siendo más sólidos que los de otros países con la misma calificación, aunque se espera que ambos se deterioren gradualmente en los próximos años, debido al nivel aún elevado del déficit presupuestario y al aumento de los costes del pago de intereses. La evolución favorable se ve compensada, sin embargo, por la debilidad de la calidad de las instituciones del país y la susceptibilidad a los riesgos geopolíticos y de vulnerabilidad externa, señala Moody’s. Rumanía tiene una calificación de inversión favorable por parte de ambas agencias.
Versión en español: Antonio Madrid