Riesgos para los niños no vacunados
En el último periodo, en Rumanía ha aumentado el número de casos de rubeola. Según las autoridades sanitarias, la causa ha sido el rechazo de los padres de vacunar a sus hijos. Los médicos han advertido sobre posibles riesgos.
România Internațional, 04.01.2017, 15:35
La ola de casos de rubeola podría aumentar, han anunciado este miércoles los médicos del Hospital de Enfermedades Infecciosas Victor Babeş de Timişoara, distrito situado en el oeste de Rumanía y el que se ha visto más afectado por la epidemia, ya que en los 3 primeros días de 2017, 30 pacientes han sido trasladados al hospital, entre ellos un récord de edad, un bebé de solo 6 semanas.
El año pasado en diciembre habían sido hospitalizados otros 124 niños. La epidemia de rubeola que ha habido desde el otoño pasado en Rumanía ha hecho que el Ministerio de Sanidad junto con representantes de la OMS, UNICEF y el Instituto de Sanidad Pública, propongan una serie de medidas destinadas a luchar contra el virus. Entre dichas medidas figura la bajada de la edad mínima de vacunación a 9 meses, ya que según los expertos, una característica de esta epidemia es que afecta a los niños menores de 12 meses y también la vacunación de los niños de entre 5 y 9 años que no han recibido la segunda dosis.
Hasta ahora se han confirmados 10 muertos y más de 2.000 casos de rubeola registrados en nuestro país. Según el Ministerio de Sanidad, la causa del aumento del número de casos es el rechazo de la gente de vacunar a sus niños. Los expertos advierten que lo importante es respetar las regulaciones epidemiológicas, de prevención específica como la vacunación, ya que la vacuna es el mejor método para prevenir este tipo de enfermedades.
Aunque la vacunación no aporta una inmunidad completa, la enfermedad contagiada será más leve. Los médicos han advertido sobre las complicaciones que pueden aparecer por la contagión del virus de la rubeola, como la bronquitis, y la otitis supurativa, la pneumonia viral y la encefalitis.
La epidemia de rubeola ha vuelto a plantear un tema controvertido en Rumanía. En los últimos años, la campaña de vacunación ha dividido la sociedad rumana. Cada vez más padres han interrumpido la vacunación de sus hijos tras haber sufrido varias reacciones adversas. Según datos oficiales, en Rumanía, la tasa de vacunación ha disminuido de manera dramática, alcanzando incluso un 20%, por debajo del nivel de seguridad del 95%, recomendado por la OMS. Es más, en Rumanía se registra el mayor número de casos de rubeola, tuberculosis y hepatitis B en Europa. Aunque estas graves enfermedades se pueden prevenir a través de la vacunación, en Rumanía la inmunización de la población es bastante difícil.
Entre las causas figuran la falta de vacunas y la desconfianza entre los rumanos respecto a este procedimiento médico. Por otro lado, los médicos han denunciado los problemas frecuentes del Programa Nacional de Inmunización que se deben a la falta de vacunas. En Rumanía hay un plan de vacunación aprobado por el Ministerio de Sanidad, pero los padres pueden rechazarlo completa o parcialmente, sin tener que soportar las consecuencias.
(traducido: S. Sarbescu )