Reporteros sin Fronteras: Informe sobre la libertad de prensa
Rumanía ocupa el puesto 53 de un total de 180 países en la clasificación que ha elaborado la renombrada organización de defensa de la libertad de prensa, Reporteros sin Fronteras. Un comentario de Bogdan Matei.
Bogdan Matei, 04.05.2023, 13:52
La falta de transparencia en la financiación de los medios de comunicación de masas, especialmente con fondos públicos, así como las dificultades del mercado socavan la fiabilidad de la información y la confianza en los medios de comunicación, señala el informe de la organización «Reporteros sin Fronteras», en lo que respecta a Rumanía.
Los autores reconocen que el entorno mediático rumano es diverso y pluralista y es propicio para realizar investigaciones potentes de interés público. En la clasificación del 2023 relativa a la libertad de prensa, Rumanía ocupa la posición no. 53 de un total de 180, lo que marca un avance en comparación con el año pasado, cuando ocupó la quincuagésima sexta posición.
Partes importantes de la población de Rumanía tienden a creerse los bulos que la propaganda rusa difunde a menudo, lo que provoca desinterés y desconfianza en el periodismo de calidad, se menciona igualmente en el informe.
El Estado rumano sigue situándose entre los últimos de Europa, en lo relativo a acatar y garantizar la libertad y la seguridad de la prensa, así como el acceso libre a información de interés público, según declaró también la presidenta de la organización no gubernamental rumana, ActiveWatch, Liana Ganea, el mes pasado. Su declaración llega después de que la propia vicepresidenta de la Comisión Europea para Valores y Transparencia, Vera Jourova, afirmara que «la situación de la prensa de Rumanía no es muy buena y se puede mejorar considerablemente». Uno de los problemas principales, afirman las dos señoras, sigue siendo el hecho de que los partidos políticos grandes financian de manera no transparente la prensa, lo que conlleva sospechas razonables de que la agenda pública, en los medios de comunicación de masas, esté distorsionada. Al mismo tiempo, las escasas voces periodísticas que critican al poder político se han convertido en el blanco de campañas de descrédito, iniciadas sea por factores políticos, sea por instituciones mediáticas con un largo historial de desvíos de la ética profesional. Es más, los periodistas siguen siendo amenazados, incluso de muerte.
En 2022, las instancias judiciales dictaron dos sentencias penales contra personas que habían cometido delitos contra la seguridad de los periodistas. Una de esas condenas, que no es firme, era por haber planeado el asesinato de un periodista, especificó Liana Ganea.
Además, según manifiesta la corresponsal de Radio Rumanía en París, el informe elaborado por Reporteros sin Fronteras señala que las condiciones en las que se ejerce la profesión de periodista son difíciles en siete de cada diez países del mundo. Más del 50 % de la población mundial vive en países donde la situación es muy desfavorable y menos del 1 % gozan del privilegio de una libertad real de prensa.
El año pasado, 55 periodistas fueron asesinados mientras ejercían su profesión o a causa de ejercerla, y otros siete han perdido la vida en lo que va de año. En la actualidad, más de 500 periodistas están encarcelados o retenidos por delitos de prensa. La propaganda política, las manipulaciones económicas y los bulos generados por la inteligencia artificial causan desinformación y ésta, según el informe, es la mayor amenaza contra la libertad de prensa en el mundo.
Traducción al español: Gabriela Ristea