Preparativos para Schengen por aire y mar
Rumanía entra el domingo en el espacio Schengen de libre circulación con sus fronteras aéreas y marítimas.
Roxana Vasile, 29.03.2024, 11:05
Rumanía y Bulgaria entrarán en el espacio Schengen de libre circulación por aire y mar a partir del 31 de marzo, lo que significa que se suprimirán los controles fronterizos para las personas que viajen hacia y desde otros países Schengen. En Rumanía, han concluido los preparativos técnicos en 17 aeropuertos y cuatro puertos marítimos. En los aeropuertos, se han reconfigurado las puertas de control, de modo que a partir del domingo, tras los controles personales de seguridad y equipaje, los pasajeros pasarán directamente a las zonas de embarque con sus pasaportes o documentos de identidad y los documentos de viaje exigidos por la ley. La medida se aplica también a los menores de edad.
Bogdan Despescu, Secretario de Estado del Ministerio del Interior:
«Concretamente, las personas que accedan a la terminal, tras pasar por el procedimiento de control de seguridad, no estarán sujetas al control fronterizo en los mostradores que todos conocemos. Estos mostradores funcionarán, a partir del domingo, sólo en el flujo no Schengen».
Sin embargo, las personas que viajen hacia o desde otros países miembros de Schengen podrían ser controladas sin previo aviso por los guardias fronterizos en los aeropuertos en base a un análisis de riesgos. Para ello, el Ministerio del Interior ha comprado 4.000 tabletas, terminales móviles que escanearán los documentos de identidad.
Al mismo tiempo, en vísperas del 31 de marzo, algunos grandes aeropuertos rumanos han inaugurado este fin de semana nuevas terminales. En Iași (este), construido sobre 3 hectáreas y con una capacidad de procesamiento de más de 3,5 millones de pasajeros al año, una nueva terminal asegurará tanto los vuelos Schengen como los nacionales. En Timișoara (oeste), una nueva terminal con numerosas zonas comerciales, restaurantes y cafeterías se destinará exclusivamente a vuelos exteriores. Pero no perdamos de vista que el mayor flujo de personas y mercancías hacia y desde Schengen se produce por tierra. Sin embargo, debido a la feroz oposición de Austria, Rumanía y su vecina Bulgaria, que técnicamente están preparadas desde hace más de una década, tendrán que esperar para incorporarse al espacio de libre circulación con este componente.
El politólogo y profesor universitario Cristian Pârvulescu describe las decisiones políticas que podrían conducir a la plena adhesión:
«He hablado con innumerables austriacos que dicen que esto es una injusticia que se ha cometido con los dos Estados, entienden muy bien el contexto político y dicen, y esto es muy importante, que en realidad ni siquiera han conseguido sus objetivos, porque al final esta situación sólo ha aumentado el peso electoral de la extrema derecha, del Partido de la Libertad, y no del Partido Popular del Canciller Nehammer.»
Como resultado, dice Cristian Pârvulescu, es posible que hacia finales de este año las negociaciones entren en una zona algo más rápida, dependerá tanto de la Presidencia húngara como de la nueva Comisión Europea.