Preocupaciones antes del invierno
Los rumanos son los que más temen a los aumentos de precios, en primer lugar para los servicios públicos y, en segundo lugar, para los productos básicos. Más detalles al respecto en un material firmado por Stefan Stoica.
Ştefan Stoica, 02.11.2022, 15:56
Rumanía atraviesa un otoño templado, con temperaturas muy por encima de lo normal a principios de noviembre, pero los rumanos temen lo que pueda pasar en invierno. Casi el 60% de ellos dice que les será muy difícil pagar las facturas de los servicios públicos en la temporada de frío, y los jóvenes son los que más miedo tienen ante tal posibilidad, según el estudio realizado por una empresa de investigación de mercado.
La mitad de los encuestados está preocupada por no poder calentar su hogar y, un porcentaje similar espera que haya interrupciones en el suministro de calor debido a la infraestructura antigua. El 58% de los rumanos estima que la temperatura en casa será más baja este invierno que en los años anteriores, un capítulo en el que los jóvenes también son los más pesimistas. La mitad de los encuestados utilizará varios métodos para calentar el hogar y el 32% incluso considera desconectarse del servicio público de calefacción.
El estudio también revela que los rumanos ya han comenzado a prepararse para facturas récord este invierno, lo que les obliga a ahorrar para poder pagarlas. El aumento de los costes con los servicios públicos ha determinado cambios profundos en el comportamiento de consumo y de compra: el 55 % de los rumanos declara haber renunciado a comprar productos que no son esenciales, en una proporción significativamente mayor las personas mayores de 65 años. En cuanto a las soluciones que los rumanos toman en cálculo para la temporada de frío, el 48% declara que reducirá el consumo de electricidad, especialmente los hombres y los ancianos.
El 42 % de los rumanos está dispuesto a ponerse más ropa en casa y el 29 % apagará la calefacción de las habitaciones que no utilizan y usará agua a una temperatura más baja. La central térmica de gas natural se considera el método menos costoso para calentar la casa y la central térmica eléctrica se considera la más cara.
El estudio también indica que, actualmente, el 28% de los rumanos declara que tiene la intención de cambiar el método de calefacción de su hogar el próximo año, especialmente aquellos que usan una central térmica eléctrica o de leña. El 17% de los encuestados declara que se beneficia de la ayuda que ofrece el Estado para calentar la vivienda, pero pocos la consideran suficiente. Según el estudio, las subidas de precios preocupan a los rumanos más que otras fuentes de inquietudes de la sociedad, como la expansión del conflicto en las fronteras del país, el nivel de corrupción o una nueva ola de la pandemia.
El 40% de los rumanos declara que el importe de la factura de la luz o el gas natural es el mayor motivo de ansiedad para el próximo período y el 25% se declara preocupado por el aumento de los precios de los artículos básicos. Sólo el 18% de los compatriotas es optimista, mientras que el 43% es bastante pesimista en cuanto al nivel de vida para el próximo invierno.
Traducción al español: Pana Brigitta