Nuevamente problemas en la votación de la diáspora
Miles de personas no han podido ejercer este domingo su derecho constitucional al voto a causa de la mala organización, y en el contexto de esta situación se ha pedido la dimisión del ministro de Exteriores.
Corina Cristea, 28.05.2019, 15:03
Delante
de la sede del Ministerio de Exteriores de Bucarest se ha pedido este lunes por
la tarde la dimisión del jefe de la diplomacia, Teodor Meleşcanu, después de
que un número muy grande de rumanos que viven en el extranjero no pudieran
votar este domingo en las elecciones europarlamentarias y en el referéndum
sobre cuestiones de la justicia. Al mismo tiempo, una petición en línea sobre
la dimisión del ministro de Exteriores ha sido firmada ya por decenas de miles
de personas durante el primer día en el que ha sido iniciada.
Miles
de personas no han podido ejercer su derecho constitucional al voto a causa de
la mala organización a pesar de haberse casi doblado el número de centros de
votación para la diáspora. Sin embargo, el procedimiento es pesado, y un simple
cálculo muestra que habría sido necesario tener más cabinas, más sellos, más
personal implicado, para que durante el tiempo destinado a la votación todos
los que querían expresar su opción tuvieran la posibilidad de hacerlo.
Aquellos
que han criticado a los organizadores de las elecciones recuerdan que lo mismo
pasó durante las elecciones presidenciales de 2014, al final de las cuales el
ministro de Exteriores, el mismo Teodor Meleşcanu, presentó su dimisión. Ahora
se ha limitado a pedir disculpas porque los rumanos de la diáspora tuvieron que
formar colas durante horas para poder votar. O esperaron en vano, porque gran
parte de ellos renunciaron o simplemente no pudieron votar porque las urnas
fueron cerradas a la hora prevista, a pesar de las solicitudes de los rumanos,
de los partidos de la oposición o del presidente del país de prolongar el
tiempo.
El
día después de las elecciones, Klaus Iohannis ha vuelto a enfocar la situación
de la diáspora:
La burla de las autoridades
contra los rumanos de la diáspora es inaceptable. Los rumanos han sido
sometidos a una nueva humillación por parte de unos miembros del Gobierno
incapaces de entender que tienen el papel de servir al ciudadano, y no de estar
en contra del ciudadano. Pido a las autoridades responsables que después de los
incidentes muy graves de 2014 que se repitieron lamentablemente ayer, tomen medidas
urgentes para que los rumanos de la diáspora puedan votar en condiciones
normales, sin formar colas interminables durante horas solamente para poder
ejercer un derecho constitucional, el derecho al voto.
Teodor
Meleşcanu ha admitido que la votación no se ha desarrollado en condiciones
satisfactorias en varios países, ha anunciado que ha dispuesto que se
desarrolle una investigación y ha solicitado que se ponga en marcha una ley
para un sistema de votación adaptado a las necesidades de la diáspora. En
Bruselas, la Comisión Europea considera que los Estados deben asegurarse de que
todos los ciudadanos puedan ejercer su derecho al voto y ha precisado que
redactará un informe que evaluará atentamente el desarrollo de las elecciones
en todos los países miembros.