Minivacaciones a principios de junio
Los rumanos aprovecharon al máximo de las minivacaciones del Pentecostés que acaban de terminar. Mihai Pelin aporta detalles.
Mihai Pelin, 06.06.2023, 12:46
Las montañas, los balnearios, el turismo rural, el delta del Danubio y la costa rumana fueron las primeras elecciones de los turistas durante las minivacaciones del Pentecostés que acaban de terminar, según los datos ofrecidos por las organizaciones patronales de la industria hotelera. La mayor demanda se registró en los alojamientos de 3 y 4 estrellas, que ofrecen facilidades y servicios adicionales para la comodidad de los turistas. Numerosos hoteles de 4 estrellas agotaron sus plazas muchas semanas antes y las localidades más conocidas en las montañas y el delta del Danubio se llenaron. La empresa ferroviaria nacional CFR Pasajeros anunció que vendió todos los billetes para la costa y la zona montañosa del Valle de Prahova — Braşov y también para los viajes a Suceava (nordeste) y Craiova (suroeste), por lo que aumentó el número de vagones en circulación.
Como se esperaba, la mayor demanda se registró en la costa, que acogió a decenas de miles de turistas. El buen tiempo, el ambiente relajado y los bajos precios al principio de la temporada de verano hicieron que muchos rumanos eligieran sobre todo el mar Negro. Las playas estuvieron sorprendentemente llenas para un comienzo de temporada y los hoteleros han afirmado que fue un comienzo prometedor. Al igual que los años anteriores, la mayor demanda se registró en Mamaia, la localidad de los clubes nocturnos y de las personas que se divierten hasta la madrugada a orillas del mar. Los precios partieron de 135 leus (aproximadamente 27 euros) por habitación y noche, 220 leus (aproximadamente 44 euros) en un hotel de 4 estrellas con desayuno incluido, y alcanzaron los 500 leus (unos 100 euros) por noche y habitación con pensión completa. Entre las preferencias de los rumanos estuvieron también Eforie y otras ciudades del sur de la costa, como Venus o Saturn, adecuadas sobre todo para el turismo familiar. Varios hoteles anunciaron hace dos semanas que tenían un nivel de ocupación muy elevado.
Las localidades situadas en las montañas también estuvieron muy concurridas. Muchos hoteles se llenaron de gente y los turistas disfrutaron del sol y de las temperaturas muy elevadas. También se formaron filas en los lugares turísticos. En el parque acuático situado cerca de Brașov, la gente hizo cola antes de que abriera para poder ocupar una de las tres mil sillas disponibles. Numerosos turistas eligieron las casas de huéspedes en Bucovina (nordeste), donde las reservas se hicieron en invierno. Los anfitriones prepararon platos típicos de aquella zona y organizaron actividades artísticas y de ocio.
En todo el país, las autoridades tomaron las medidas necesarias para que las minivacaciones se desarrollaran de forma segura. La Policía, la Gendarmería y los Bomberos aumentaron el número de equipos en el campo y en los pasos fronterizos se tomaron medidas para aumentar la fluidez. Numerosos rumanos optaron por pasar las minivacaciones del Pentecostés en Bulgaria, país vecino, o en Grecia. Por lo tanto, las aduanas situadas en el sudeste fueron las más concurridas, especialmente la de Giurgiu, la más frecuentada. También se formaron largas filas en los pasos fronterizos situados en el oeste, en la aduana con Hungría, dado que los rumanos también eligieron destinos en occidente.
Traducción al español: Monica Tarău