Las enfermedades del sistema sanitario rumano
Las autoridades de Bucarest buscan soluciones en hospitales de Italia, República Checa o Alemania para los enfermos que necesitan un trasplante urgente de pulmón, después de que el hospital AKH de Viena anunciara que dejará de recibir pacientes rumanos.
Mihai Pelin, 22.03.2017, 14:20
Todos los Gobiernos de los últimos 25 años han procurado reformar el sistema sanitario rumano, pero los resultados tardan en aparecer. La subfinanciación crónica, la corrupción, la falta de programas de prevención, las infecciones contraídas en los hospitales, el alto índice de mortalidad y el éxodo de los médicos en busca de un trabajo más estable y mejor remunerado, son solo algunos de los problemas de un sistema sanitario enfermo.
Recientemente ha recibido un nuevo golpe de parte del hospital AKH de Viena donde los pacientes rumanos ya no pueden ir para la operación de trasplante de pulmón. Este centro hospitalario ha dado a conocer que su capacidad ha bajado y ha renunciado unilateralmente al contrato con las autoridades de Bucarest. En opinión del ministro de Sanidad, Florian Bodog, lo que han hecho los austriacos es incorrecto e ilegal. Por otra parte, tampoco la Agencia Nacional de Trasplantes de Rumanía ha reaccionado de forma adecuada, ha explicado el ministro asegurando que se están buscando soluciones a este problema. Florin Bodog:
“Según el protocolo, la clínica de Austria no tenía el derecho a rescindir unilateralmente este contrato. Hemos contactado con los centros que realizan trasplante pulmonar de Praga y Alemania. También es cierto que los de la Agencia Nacional de Trasplantes tendrían que trabajar con al menos dos centros porque no es la primera vez que pasa esto. El año pasado esta misma clínica de Viena bloqueó el trasplante y yo creo que este bloqueo unilateral del trasplante es ilegal”.
En los últimos diez años, casi 40 rumanos han sido sometidos a un trasplante de pulmón en el hospital AKH y otros cinco están en la lista de espera. El Estado rumano pagó 120.000 euros por cada uno de estos paciente. En Rumanía se pueden realizar trasplantes de riñones, de hígado y de corazón pero de momento no se puede realizar el trasplante pulmonar en condiciones de seguridad para los pacientes. En este contexto no es nada sorprendente que el sistema sanitario rumano ocupe el último lugar en Europa, según un estudio reciente realizado en 35 países. Este documento informa que en Rumanía los pacientes deben esperar mucho para recibir medicinas innovadoras, la mortalidad general es un 25% mayor que la media de la UE y la tasa de mortalidad infantil es dos veces y medio mayor que la media europea.