Investigaciones en el sistema de sanidad
La corrupción en el sistema rumano de sanidad es mayor que en otros sectores, afima la fiscal jefa de la Dirección Nacional Anticorrupción, Laura Codruţa Kovesi.
România Internațional, 24.05.2016, 14:19
La noticia más importante del momento en Bucarest es la muerte, el pasado domingo, en un accidente de tráfico, del dueño de la empresa HexiPharma, Dan Condrea. Desde hace algunas semanas, Condrea era la persona pública más odiada del país, después de que una investigación periodística confirmada por los exámenes de laboratorio revelara que dicha compañía había fabricado y distribuido a decenas de hospitales desinfectantes diluidos, incapaces de prevenir las infecciones intrahospitalarias que han ocasionado numerosas víctimas. La muerte de Condrea, conveniente para muchos, según afirma la prensa, sólo un día antes de una nueva citación en la fiscalía, puede significar también el entierro de las informaciones sobre la complicidad a alto nivel en el sistema de sanidad, sin las cuales su negocio con desinfectantes diluidos no habría sido ventajoso durante casi un decenio. Sin embargo, el caso Condrea — HexiPharma es solo la punta del iceberg. El peso de los sobornos en el sistema de sanidad es mayor que en otros sectores y más de 75 personas han sido enviadas a la justicia solo en los últimos dos años, por corrupción en dicho sector, según ha señalado la fiscal jefa de la DNA, Laura Codruţa Kovesi, quien ha añadido también que en los casos de corrupción están implicadas compañías del extranjero. Kovesi ha abogado por un enfoque estratégico en la lucha contra dicho fenómeno:
“Las investigaciones actuales de la DNA en estos expedientes muestran que la corrupción se manifiesta a través de las mismas acciones reiteradas. A falta de algunas medidas claras de prevención y control, la tipología de los hechos investigados y los mecanismos que han permitido que ellos ocurran se reiteran. Se necesita un enfoque estratégico para prevenir la corrupción, sobre todo cuando hablamos de sectores que afectan directamente a la vida de los ciudadanos, como es el sector de la sanidad.”
La fiscal jefa aprecia que la corrupción en el sector de la sanidad solo se puede eliminar si las personas investigadas o condenadas por recibir soborno pierden sus cargos públicos. Kovesi ha anunciado también que en todo el país se están desarrollando investigaciones sobre la adquisición de productos auxiliares, medicamentos y aparatos médicos. Cabe mencionar que actualmente dos exdirectores de la Casa Nacional de Seguros de Salud, Vasile Ciurchea e Irinel Popescu están investigados penalmente por abuso en funciones en un nuevo expediente de corrupción. Ambos están acusados de haber comprado programas informáticos y servicios de asistencia técnica a precios muy altos, lo que habría causado un perjuicio de casi 17 millones de euros. La ofensiva de los fiscales contra la corrupción del sistema de sanidad se desarrolla en el contexto en que han continuado las protestas de los sindicatos del sector, que están descontentos por los sueldos bajos y piden casi trimestralmente subidas de los salarios. Es una situación absurda que justifica las afirmaciones de los comentaristas según las cuales no es que el sistema tenga una financiación insuficiente, sino que los empleados del sistema roban demasiado.