Informe anual de Transparencia Internacional
En el marco de la UE, Rumanía se sitúa en el puesto 25 de un total de 28 con respecto a la percepción del nivel de corrupción.
Roxana Vasile, 22.02.2018, 15:51
Más de dos terceras partes de los países del mundo han registrado puntuaciones inferiores a 50 en el informe anual para el año 2017 con respecto al índice de percepción de la corrupción elaborado por la organización Transparencia Internacional (Transparency International), documento en que un 0 significa “muy corrupto” y un 100 “nada corrupto”.
Presentada este miércoles en Berlín, esta clasificación se refiere al sector público de 180 Estados, tal como está percibido por el ámbito de negocios y los expertos independientes. Es la primera vez que en la parte superior de la jerarquía se registran anotaciones por debajo de 90, lo que en opinión de Transparencia Internacional destaca que la mayoría de los Gobiernos no actúa con suficiente energía por combatir la corrupción. Nueva Zelanda encabeza la clasificación de los Estados percibidos como menos corruptos, con 89 puntos, seguida por Dinamarca, Finlandia, Noruega y Suiza. A nivel regional, los mejores resultados han sido registrados por Europa Occidental, mientras que en el polo opuesto se sitúan África Subsahariana, Asia Central y Europa Oriental. Con sus 48 puntos Rumanía supera el promedio mundial y en la UE sigue situándose en el puesto 25 del total de 28, igual que el año anterior. Está a la par con Grecia y es seguida por Hungría y Bulgaria.
En contexto global, en visión de Transparencia Internacional el hecho de que el índice de percepción de la corrupción sea el mismo puede sugerir una leve mejora de la situación. Por ello, dicha organización considera que en los próximos años, además de los medios de coerción, Rumanía necesitará tomar también medidas sistemáticas de prevención, responsabilizar a los factores de decisión, e implicar más seriamente a las comunidades locales. Con este fin, Transparencia Internacional recomienda la aplicación en la administración pública de mecanismos transparentes y eficaces a fin de eliminar la corrupción, para gastar de manera eficiente los fondos públicos y aumentar la integridad en las instituciones públicas. Dado que el sector privado desempeña un papel clave en la manera en que la sociedad responde al fenómeno de la corrupción y que un ámbito de negocios íntegro y transparente puede contribuir de manera decisiva al desarrollo de Rumanía, Transparencia Internacional ha declarado que también en el sector privado hace falta mejorar los mecanismos de conformidad e integridad con vistas a asegurar la competencia económica. La organización ha presentado también propuestas concretas, como por ejemplo la puesta en marcha de un sistema de integridad en las administraciones públicas locales así como el desarrollo y la consolidación de un sistema administrativo de ética y cumplimiento al nivel de la organización.