El Parlamento Europeo condena el pacto Ribbentrop-Mólotov
Rumanía ha acogido con satisfacción la resolución respecto a la conmemoración de 80 años desde el estallido de la Segunda Guerra Mundial y al significado de la memoria histórica para el futuro de Europa, resolución aprobada por el Parlamento Europeo.
Corina Cristea, 20.09.2019, 15:23
80 años después del estallido de la Segunda Guerra Mundial, la UE ha condenado, mediante una resolución, el pacto Ribbentrop-Mólotov, firmado el 23 de agosto del año 1939, entre la Unión Soviética estalinista y la Alemania nazi, un tratado de no agresión que junto con sus protocolos secretos dividiría prácticamente Europa y territorios de los Estados independientes entre los dos regímenes totalitarios. En la resolución del Parlamento Europeo se subraya que a raíz del pacto Ribbentrop-Mólotov y del Tratado de amistad y fronterizo soviético-alemán del 28 de septiembre del año 1939, “la República polaca fue invadida primero por Hitler, y dos semanas más tarde por Stalin, que acabaría con la independencia de este país, lo que representó una tragedia sin precedentes para el pueblo polaco. El 30 de noviembre del año 1939, la Unión Soviética empezó una guerra de agresión contra Finlandia y en el mes de junio del año 1940 ocupó y anexionó territorios de Rumanía que nunca retrocedería y también anexionó las repúblicas independientes de Lituania, Letonia y Estonia.
Tras la derrota del régimen nazi y al final de la Segunda Guerra Mundial, anota la resolución, algunos países europeos lograrían restaurarse y comprometerse a un proceso de reconciliación, mientras que otros países permanecerían bajo la dictadura o bajo la ocupación o influencia soviética directa durante decenas de años, sin acceso a la libertad, soberanía, dignidad, derechos humanos y al desarrollo económico.
En Bucarest, el presidente, Klaus Iohannis, ha acogido con satisfacción la resolución apreciando esta gestión como un paso adelante hacia la sanción de los regímenes totalitarios, responsables de la destrucción de un número impresionante de vidas humanas y de la grave violación de los derechos y las libertades fundamentales.
“Educar a la joven generación en el espíritu del respeto a los principios democráticos y a la dignidad humana incluyendo en los planes educativos la historia de los regímenes totalitarios, representa una necesidad apremiante para la sociedad actual, ha transmitido el jefe del Estado rumano.
En un comunicado de la Administración presidencial se ha reiterado que honrar a las víctimas de los regímenes totalitarios, defender la democracia y al Estado de derecho, respetar los derechos humanos, promover los valores y los principios europeos, asumir de manera correcta el pasado traumático y actuar de modo sostenible en aras de combatir el extremismo, el revisionismo y el iliberalismo, y todas las manifestaciones que pretenden debilitar la democracia y atacar la paz social representan objetivos prioritarios de Rumanía. Conforme con las previsiones del pacto soviético alemán, en 1940, Rumanía perdió, a raíz de un ultimátum, Besarabia y el norte de Bucovina, territorios que en el presente pertenecen a las exrepúblicas soviéticas de Moldavia y Ucrania.