El centenario del rey Miguel
Este 25 de octubre, el último rey de Rumanía, Miguel I, habría cumplido 100 años. El 25 de octubre también es el Día del Ejército rumano.
Mihai Pelin, 26.10.2021, 13:16
«Soy rumano y así es como me siento. Y siempre que puedo, hago todo lo posible por el país rumano». Este fue el credo del rey Miguel (1921-2017), el último soberano de Rumanía, quien, este 25 de octubre, habría cumplido 100 años. Como muestra de agradecimiento, el Museo Nacional de Arte de Rumanía abrió, el lunes, para visitar los espacios históricos del Palacio Real: el Comedor Real, la Escalera de los Vaivodas y el Salón del Trono, así como la exposición ”Fragmentos de memoria-retratos reales” con obras de arte del rey Miguel I en diferentes etapas de la vida. Fue el primer príncipe nacido después de la unificación de Rumanía en 1918. Era hijo del príncipe Carlos y la princesa Elena, nieto de los reyes Fernando I y María de Rumanía y del rey Constantino I de Grecia. Miguel I fue rey de Rumanía en dos períodos diferentes.
Su reinado (20 de julio de 1927-8 de junio de 1930) bajo la Regencia, siendo menor de edad, estuvo bajo el signo de la incertidumbre, en las condiciones en las que, en el extranjero, su padre, el príncipe Carlos, quería volver al país, y en el ámbito interno, se intensificaba el movimiento carlista por su regreso al trono rumano. El segundo reinado comenzó el 6 de septiembre de 1940 en condiciones dramáticas, en una Rumanía desgarrada territorialmente y en una Europa en guerra. Los acontecimientos del verano de ese año dramático, (en junio la URSS ocupa Besarabia, el norte de Bucovina y Herţa con 3,7 millones de habitantes y en agosto, la Hungría de Horthy ocupa el noreste de Transilvania con 2,6 millones de habitantes), la actitud hostil de los líderes políticos rumanos y el ejército obligaron a Carlos II a renunciar a sus prerrogativas reales el 6 de septiembre de 1940.
El rey otorgó al general Ion Antonescu «plenos poderes para el liderazgo del Estado rumano», y éste último estableció un régimen autoritario entre 1940 y 1944, y dejó al rey Miguel solo con responsabilidades formales. En junio de 1941, Rumanía entró en guerra, junto con Alemania, contra la URSS. En 1943-1944, el rey Miguel y sus principales colaboradores se distanciaron gradualmente de Ion Antonescu, y junto con líderes de los principales partidos políticos democráticos y algunos círculos militares, tomaron medidas para sacar a Rumanía de la alianza con el Eje y unirse a la Entente.
El 23 de agosto de 1944, Ion Antonescu fue destituido y el ejército rumano se unió a la lucha antifascista. Sin el apoyo de Estados Unidos y Reino Unido, el 30 de diciembre de 1947, los comunistas obligaron a Miguel I a abdicar. Solo en 1992, las autoridades poscomunistas le permitieron regresar al país, siendo recibido por más de 1 millón de personas. El exsoberano recuperó su ciudadanía rumana en 1997. Falleció el 5 de diciembre de 2017. El 25 de octubre es también el día del Ejército rumano, celebrado en todo el país, a través de una serie de eventos. El ejército sigue siendo un hito sólido y goza de confianza, contribuyendo a mantener la estabilidad necesaria para el desarrollo de la sociedad rumana, ha dicho el presidente Klaus Iohannis en esta ocasión. Ha destacado que la profesionalidad y la dedicación mostradas por los soldados en las zonas de guerra han contribuido al rumbo euroatlántico y europeo de Rumanía, así como al fortalecimiento de la sólida Asociación Estratégica con los Estados Unidos.
(Versión española: Simona Sarbescu)