Efectos de las lluvias abundantes
El Gobierno ha aprobado la concesión de ayudas de urgencia a lo largo del año 2019 para apoyar a la población afectada por las inundaciones, los corrimientos de tierra y los fenómenos meteorológicos peligrosos producidos a partir del mes de mayo.
Daniela Budu, 04.06.2019, 16:00
Según el calendario y las
temperaturas, ha llegado el verano, y en Rumanía continúan las inundaciones,
las lluvias abundantes, el granizo y las tormentas. La información hidrológica
y meteorológica, los códigos amarillo y naranja por inestabilidad atmosférica
se suceden desde hace semanas en casi todo el país y no parecen estar llegando
a su fin. Los hidrólogos han llamado muchas veces la atención sobre el peligro
de las inundaciones. Numerosos ríos de casi todo el país han estado bajo los
códigos naranja o amarillo, a veces incluso rojo, dado que existe el peligro de
que se produzcan rápidas inundaciones e incrementos de los caudales y los
niveles.
Ha llovido abundantemente incluso
este lunes por la noche, cuando el nivel de los ríos y los riachuelos se ha
incrementado y varios puentes, viviendas, jardines y sótanos han sido inundados.
Los bomberos han evacuado a cientos de personas. Los empleados del Departamento
para Situaciones de Urgencia y de las Aguas Rumanas han intervenido en los
diques de los riachuelos vertiendo de manera controlada el agua de la
acumulación y evitando así la inundación de varios municipios. Prácticamente,
sólo la costa rumana y tres provincias situadas en el oeste del país no han
estado este lunes bajo la alerta por mal tiempo.
También se ha visto afectado el
tráfico vial. Varias carreteras provinciales, nacionales y europeas han quedado
bloqueadas por las inundaciones. El granizo y las inundaciones producidas en
los últimos días también han causado problemas en los cultivos agrícolas, y en
la mayoría de los casos los granjeros no tienen pólizas de seguro para los
cultivos afectados. Cientos de animales han sido arrastrados por el agua.
También a causa de las lluvias abundantes, varias localidades han quedado sin
electricidad. Cientos de postes de electricidad han resultado dañados.
Presentes este lunes en el
distrito de Prahova (en el sur de Rumanía), la ministra de Medio Ambiente, Graţiela
Gavrilescu, y de Aguas, Ioan Deneş, han ido a las zonas afectadas por las
inundaciones y han anunciado que se efectuarán obras de regulación de los
cauces y consolidaciones de las orillas. Ioan Deneş ha afirmado que ha hablado
ya con la primera ministra Viorica Dăncilă para asignar dinero del fondo de
urgencia que está a disposición del Gobierno para efectuar este año las obras
necesarias en la zona, después de que hace unos días cuatro niños fueran
arrastrados por el agua. Sin embargo, el Consejo Provincial de Arad (en el
oeste de Rumanía) ha recordado al Gobierno que todavía no ha concedido las
indemnizaciones prometidas el año pasado después de las inundaciones
producidas en la provincia. Por otro lado, en el centro del país, algunos
psicólogos han estado en las aldeas afectadas por las inundaciones causadas por
las aguas abundantes procedentes de las vertientes de los ríos para ofrecer
apoyo psicológico a la población según sus necesidades. A su vez, la Cruz Roja
ha distribuido a los ciudadanos afectados las cosas necesarias después de las
inundaciones. Y el mal tiempo continúa. Todavía está en vigor una alerta
meteorológica por inestabilidad atmosférica y cantidades significativas de agua
que afecta a todo el país. Según han afirmado los meteorólogos, también en los
próximos días habrá tormentas eléctricas, viento fuerte, granizo y posibles
tormentas.