Diálogo UE – Turquía sobre los migrantes
La Unión Europea aplaza la decisión final sobre un ambicioso acuerdo con Ankara destinado a frenar el flujo de refugiados hacia Europa.
România Internațional, 08.03.2016, 15:30
Los líderes europeos se reunieron este lunes en Bruselas para identificar una solución a la crisis migratoria, aunque aún tendrán que terminar de definirse todas las medidas en la próxima cumbre de la Unión Europea (UE), los días 17 y 18 de marzo.
Acordaron acelerar el pago de 3.000 millones de euros prometidos en octubre del año pasado y una cifra adicional para ayudar a Turquía a combatir la crisis. El primer ministro rumano, Dacian Ciolos, ha declarado después de la reunión que no se llegó a un acuerdo firme pero que el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk recibió el mandato de continuar los debates con todos los Estados miembros para ultimar todos los detalles de este acuerdo con Ankara, antes de la próxima cumbre de la UE.
El mandatario rumano ha dicho que las propuestas de Turquía con respecto a la gestión de los inmigrantes han sido bien recibidas por los jefes de Estado y de Gobierno, y su puesta en práctica desalentará la migración ilegal hacia la UE.
En su opinión, el objetivo de un acuerdo con Ankara sería frenar el paso ilegal de los refugiados de Turquía hacia Grecia. La UE podrá controlar así la inmigración ilegal en sus fronteras externas. Dacian Cioloş:
«La propuesta consiste en que Turquía se compromete a recibir a los inmigrantes que lleguen a Europa desde su territorio, con el objetivo de enviar a sus países de origen a los que no procedan de Siria y de aceptar en su torritorio como solicitantes de asilo solo a los sirios. Estambul, por parte, pide que por cada inmigrante que retorne, la Ue acepte un refugiado sirio.»
Turquía reclama también más fondos, progresos en la integración del país con el bloque y que se aceleren los planes que permitan a los turcos viajar a la UE sin visado, con la vista puesta en levantar los requerimientos de visado para junio de 2016.
A Rumanía han llegado los primeros quince de un total de más de 6000 refugiados que Bucarest se ha comprometido a recibir en base a las cuotas establecidas por la Unión Europea. Por el momento Rumanía solo cuenta con 1500 plazas de alojamiento en sus centros de acogida.