Desigualdades de desarrollo en la UE
Las desigualdades entre los Estados miembros de la UE son ahora mucho mayores que hace 30 años.
Mihai Pelin, 26.11.2019, 14:56
Los Estados miembros enfrentan niveles de desigualdad más altos que hace 30 años, cuando tuvo lugar la caída del comunismo, según muestra el Consejo de la UE en un informe reciente. Esto amenaza la implementación de la Agenda 2030, aprobada en 2015, que incluye objetivos ambiciosos con respecto a la igualdad de género y raza, la erradicación de la pobreza, la abolición total de la violencia y el odio. Hace cuatro años, los líderes mundiales aprobaron un ambicioso plan de desarrollo sostenible para los próximos años, cuyo costo se estima en varios miles de millones de dólares anuales. 193 Estados miembros de las Naciones Unidas han acordado una nueva y ambiciosa agenda global, con el objetivo de acabar con la pobreza para 2030 e identificar un futuro sostenible.
Nada menos que 17 objetivos de desarrollo sostenible han centrado la atención de los líderes mundiales, entre ellos la erradicación de la pobreza extrema, el acceso universal a la educación y la salud, la promoción de la mujer, la reducción de las desigualdades y la lucha contra el calentamiento global. Cuatro años después de la aprobación de estos objetivos, el Consejo de la UE señala que muchos países socios continúan enfrentando altos niveles de desigualdad, lo que es un obstáculo importante para la erradicación de la pobreza y el crecimiento económico sostenible.
Al mismo tiempo, puede amenazar la democracia, la cohesión social y la inclusión y puede empeorar la degradación ambiental y el cambio climático, subrayan los funcionarios europeos.
Todo esto puede socavar la capacidad de los países de lograr un desarrollo sostenible, gestionar adecuadamente los recursos naturales y la desigualdad en sus diversas formas. El informe del Consejo también muestra que los derechos humanos, la buena gobernanza y el Estado de derecho son esenciales para rehabilitar y apoyar a las personas vulnerables. El Consejo recomienda invertir más en desarrollo humano, especialmente en salud e inclusión social, en educación de calidad accesible para todos, y también en educación superior. La creación de empleos decentes, especialmente para los jóvenes en zonas pobres, o la contratación de mujeres, son otras medidas que pueden ayudar a reducir la desigualdad entre los Estados miembros.
Las conclusiones también confirman el carácter pluridimensional de la desigualdad, que abarca cuestiones económicas, sociales, políticas y ambientales, y necesita atención urgente. También se constatan grandes diferencias en el caso de los ingresos. Según Eurostat, en 2017 Rumanía, que se unió a la UE en 2007, se encontraba entre los Estados miembros con la mayor desigualdad de ingresos, superada solo por Bulgaria, Lituania y España. En el extremo opuesto estaban la República Checa y Eslovenia. La forma en que los ingresos y la riqueza se distribuyen en una sociedad determina la medida en que los individuos tienen igual acceso a los bienes y servicios producidos dentro de una economía nacional. Además, en opinión de los líderes europeos, la igualdad y la solidaridad se encuentran entre los valores y principios que guían a la Unión y su acción exterior.
(Versión española: Simona Sarbescu)