Descontento sindical y patronal
La semana ha comenzado en Rumanía con nuevas protestas sindicales.
Roxana Vasile, 16.02.2021, 12:36
Desde los primeros días del año corriente, los representantes sindicales de una serie de categorías profesionales han tomado las calles para expresar su descontento con el actual Gobierno de coalición de centro-derecha, dominado por los liberales quienes están en el poder desde finales de 2019 por la manera en que está gestionando los efectos de la pandemia.
Los rumanos de todo el país exigen salarios dignos, pensiones justas, servicios públicos de calidad y la correcta aplicación de la legislación. En el contexto de acaloradas discusiones políticas sobre la ley de presupuesto para el año en curso, los sindicalistas de la Federación Sanitas han protestado este lunes, delante del Ministerio de Hacienda. Menos dinero para la sanidad es, en su opinión, no solo una injusticia para los trabajadores del sistema, sino también un acto profundamente inmoral contra los ciudadanos de Rumanía. Los miembros del sindicato afirman que al sector sanitario se le debería asignar el 9% del PIB, porque los rumanos necesitan un sistema público que pueda gestionar la epidemia de SARS-CoV-2, tratar sus enfermedades agudas y crónicas y brindarles tratamiento de emergencia. Uno de los participantes en la protesta ha explicado por qué ha venido desde el noroeste del país, de la ciudad de Cluj, a Bucarest para protestar:
“Las injusticias que prevé el Gobierno en su proyecto de presupuesto y la disminución de los complementos salariales o incluso su recorte para diferentes categorías de trabajadores es lo que nos preocupa, porque al principio, este mismo Gobierno prometió que no tocarían los sueldos de los trabajadores sanitarios ni tampoco sus bonificaciones”.
También hay un gran descontento en el sector HORECA. Los empresarios del sector turístico piden al Ejecutivo que pague las indemnizaciones prometidas desde el año pasado al sector de la hostelería que ha registrado una caída del 70% y que siga otorgando vales de vacaciones a los empleados públicos. El Gobierno ha decidido eliminar estos vales a partir de este año. Dragoş Anastasiu, coordinador de la Coalición para el Desarrollo de Rumanía:
“La industria está sufriendo actualmente y necesita el apoyo del principal accionista de cualquier empresa que es el Estado rumano. Es inaceptable desde nuestro punto de vista que no se cumplan promesas firmes, algunas previstas incluso en leyes».
Por último, pero no menos importante, a los sindicalistas profundamente descontentos con la política económica y social del actual Ejecutivo se unen compañeros de la Confederación Nacional Sindical Cartel Alfa, quienes, hasta finales de este mes, continuarán sus protestas callejeras iniciadas el pasado 14 de enero. Cartel Alfa dice que la carga de la austeridad será soportada exclusivamente por los trabajadores y los jubilados, lo que afectará a los sectores vulnerables de la población de bajos ingresos.