CV y responsabilidad política
El liberal Florin Roman ha presentado su renuncia como ministro de Investigación y Digitalización, en medio de la controversia sobre su currículum vitae y sus estudios. En una publicación de internet, ha declarado que impugnará las acusaciones.
Mihai Pelin, 16.12.2021, 12:11
El ministro rumano de Investigación y Digitalización, el liberal Florin Roman, ha presentado su dimisión. Ha salido del Gobierno que dirige Nicolae Ciucă menos de un mes después de hacerse cargo de la cartera, tras una investigación de un diario que cuestiona los estudios que asegura haber realizado. Los periodistas dicen que Florin Roman ha incluido en su CV una licenciatura que no tiene y que plagió su disertación. Además, presuntamente publicó un libro, que, sin embargo, no se pudo encontrar. El exmandatario rechaza todas las acusaciones y declara que ha anunciado su dimisión para que no se vea afectada la imagen del Gobierno. Ha precisado que es inocente y que es víctima de un linchamiento mediático y político relacionado con las decenas de miles de millones de euros aprobados para la implementación de soluciones digitales para el Ejecutivo.
Algunas de las acusaciones de los periodistas también fueron apoyadas por la dirección de la Universidad Babeş-Bolyai de Cluj-Napoca (noroeste), que confirmó que Florin Roman nunca obtuvo su licenciatura en esta universidad, sino solo un diploma que acredita sus estudios en un colegio en Alba Iulia (cerca de Cluj). Su cargo ha sido asumido temporalmente por el ministro de Energía, Virgil Popescu. Florin Roman fue, durante un tiempo, también presidente de la Cámara de los Diputados, siendo uno de los liberales más influyentes. Considera que el líder de la USR (oposición), Dacian Cioloş, fue el que coordinó los ataques en su contra y declara que lo impugnará en el tribunal. En respuesta, Dacian Cioloş, ex primer ministro en el período 2015-2017, ha dicho que no está impresionado por esta amenaza y que la renuncia de Roman es un acto necesario. Florin Roman no es una víctima. Florin Roman es un exponente de la clase política rumana que destruyó lo que Rumanía tenía mejor, dice el líder de la USR. Muchos políticos rumanos muy conocidos han sido acusados de plagio en los últimos años. Quizás la mejor radiografía del fenómeno la hizo en 2016 el antiguo diputado del PSD y actual alcalde del sector 3 de Bucarest, Robert Negoiță, acusado de plagio por su tesis doctoral y bajo investigación penal, en ese momento, por tal hecho:Todos lo hacían, así que yo también lo hice.
Robert Negoiță terminó la secundaria a los 31 años, en 2003, y un año después de graduarse de la segunda facultad, en 2009, ya estaba matriculado en su doctorado. Pero el caso más notorio de plagio en la política rumana es el del antiguo líder del PSD, Victor Ponta, que finalmente renunció, pero por razones completamente diferentes. Ex primer ministro entre 2012 y 2015, fue investigado penalmente por delitos de derechos de autor en relación con su tesis doctoral, pero su caso fue cerrado por la Fiscalía General. Entre los acusados de plagio se encuentran Mihai Tudose, ex primer ministro, Gabriel Oprea, ex vice primer ministro y ministro de Defensa, Radu Stroe, exministro del Interior, Mihai Stănișoară, exministro de Defensa. En 2020, Rumanía ocupa el puesto 69 en la clasificación de Transparencia Internacional desde la perspectiva del Índice de Percepción de la Corrupción.
(Versión española: Simona Sarbescu)