Chisinau condena la intervención de Moscú
En la República de Moldavia (exsoviética, con mayoría de rumanohablantes), el presidente filorruso se posiciona nuevamente contra el Gobierno y el Parlamento proeuropeo.
Bogdan Matei, 09.02.2018, 16:04
Menos de un año antes de las elecciones legislativas, en la República de Moldavia todo es política y todo tiene reverberaciones geopolíticas. A la derecha, el Partido Liberal (parlamentario, en la oposición), así como numerosas formaciones extraparlamentarias y organizaciones cívicas abogan fuertemente por la reunificación con Rumanía. Asimismo ha aumentado el número de consejos locales que adoptan declaraciones simbólicas de unión. Al centro, el Gobierno de coalición declarado prooccidental, dominado por el Partido Demócrata, apuesta por la carta de la integración europea y, sin compartir el objetivo unionista, cultiva relaciones excelentes con Bucarest y glaciales con Moscú. A la izquierda, los restos del antiguo partido único comunista y los socialistas dirigidos, de hecho, por el jefe del Estado Igor Dodon no ocultan su intención de reubicar a la República de Moldavia en la órbita rusa. Dominado numéricamente por los adeptos del camino occidental, el Parlamento de la República de Moldavia ha adoptado este jueves una declaración a través de la cual condena los ataques de la Federación Rusa contra “la seguridad de la información y la intervención abusiva en la actividad política de la República de Moldavia”. Los ataques, lanzados a través de las televisiones de Moscú y de algunas instituciones de prensa autóctonas, están destinados a denigrar a la República de Moldavia, a algunas instituciones y varios políticos pero de modo especial a los ciudadanos del país, según indica el documento adoptado por los diputados. Previsiblemente, éste fue votado el pasado miércoles por los miembros de la coalición mayoritaria y rechazado por los socialistas y comunistas filorrusos.
En opinión de los comentaristas, la declaración es una réplica al documento adoptado el pasado lunes por la Duma Estatal de la Federación Rusa que condena la nueva ley audiovisual de la República de Moldavia denominada “ley antipropaganda” que restricciona la difusión de las cadenas de televisión rusas. El presidente Dodon ha afirmado que la declaración del Legislativo de Chisinau representa el mensaje antirruso más impulsivo lanzado a alto nivel en los últimos 25 años.
Exconsejero presidencial en Bucarest y fundador de un centro de pensamiento (think-tank) especializado en el análisis del espacio exsoviético, el catedrático Iulian Ghifu ha explicado lo siguiente para Radio Rumanía:
“La Federación Rusa se beneficia de la contribución de este presidente prorruso socialista Igor Dodon que tan sólo el año pasado emprendió 8 visitas a Rusia con o sin objetivo, con más o menos sentido. Lo cierto es que, desde el punto de vista de la imagen, hay un mensajero prorruso muy fuerte”.
Según considera el catedrátido Chifu, la reacción del Parlamento de la República de Moldavia es estrictamente defensiva. Un 80% del espacio público de la República de Moldavia es controlado desde el punto de vista de la audiencia por los medios de comunicación rusos. En plena guerra internacional hay que elogiar el hecho de que exista una ley antipropaganda destinada a moderar la desinformación y prevenir la manipulación en beneficio de Moscú, concluye Chifu.