Retrospectiva semanal, 22 de julio de 2023
Ola de calor. Reemplazos para dos ministros del gabinete de Ciolacu. El fútbol rumano, a la deriva.
Ştefan Stoica, 22.07.2023, 14:15
Ola de calor
La ola de calor también afectó a Rumanía y persistió durante toda la semana, sin tener, sin embargo, la intensidad de la ola de calor que afectó al sur del continente. Las temperaturas alcanzaron los 40 grados, especialmente en el sur y oeste, el estrés térmico fue alto y el índice de temperatura-humedad superó el umbral crítico de 80 unidades. En muchas ciudades, los ayuntamientos habilitaron espacios en áreas congestionadas donde la gente pudo refrescarse y tomaron medidas para que las fuentes y los sistemas de aire acondicionado en el transporte público fueran funcionales. Se restringió el transporte por carretera de vehículos pesados en determinados tramos de carretera. El transporte ferroviario también se vio afectado. Las altísimas temperaturas y la negligencia humana favorecieron la ocurrencia de incendios de vegetación, pero de tamaños que los hacían controlables. En varias zonas del país, el excesivo calor alternó con tormentas y ventiscas.
Reemplazos para dos ministros del gabinete de Ciolacu
La temperatura política bajó aún más luego de que el PSD, parte de la coalición gobernante, nominara los reemplazos de los dos ministros que habían renunciado en medio del escándalo relacionado con los centros sociales donde reinaban los tratos degradantes y la falta de empatía con los pacientes. La diputada Natalia Intotero reemplazó a Gabriela Firea en el Ministerio de Familia, Juventud e Igualdad de Oportunidades, y otra diputada socialdemócrata, Simona Bucura-Oprescu, asumió el Ministerio de Trabajo de Marius Budăi. El primer ministro Marcel Ciolacu, que había advertido que habría despidos en todos los lugares donde se descubrieran irregularidades en las residencias para ancianos, pidió a la nueva titular del Ministerio de Trabajo que suspendiera del cargo a los jefes de los departamentos de asistencia social de 7 distritos y la capital Bucarest. Admitió que, si bien son necesarios, los despidos y las renuncias sólo resuelven una parte del problema, por eso sigue la otra parte esencial, la modificación de la legislación relativa a la acreditación, licenciamiento, monitorización y control de estos centros. Por otro lado, descontento porque su partido es el único que paga los costes políticos del escándalo, el portavoz del PSD, Lucian Romaşcanu, declaró que también se impondría la renuncia de la actual ministra de Cultura, la liberal Raluca Turcan, porque aprobó los llamados asilos del horror cuando estaba al frente del Ministerio de Trabajo. La Sra. Turcan respondió que, al momento de la aprobación, todo estaba en orden, y firmar la acreditación es un requisito administrativo y una obligación, si se cumplen las condiciones previstas por la ley.
Día de la aviación rumana y formación para pilotos ucranianos
El entrenamiento de pilotos ucranianos en aviones F-16 podría comenzar en Rumanía a fines de agosto. El anuncio, en realidad una confirmación de la información que apareció recientemente, ha sido hecho por el presidente Klaus Iohannis. El jefe de Estado ha precisado que se trata de un proyecto importante y de larga duración, que debe estar bien preparado para que sea un éxito. En la semana del anuncio, se marcó el Día de la Aviación y de las Fuerzas Aéreas Rumanas. Representan un componente moderno e importante del Ejército rumano, como medio de respuesta a los desafíos de seguridad militar en la región del mar Negro y en todo el Flanco Oriental, y las acciones realizadas por los aviadores militares, junto con los demás soldados, contribuyen significativamente a la consolidación del perfil del país a nivel regional y euroatlántico, ha enfatizado el presidente Iohannis. Según el jefe de Estado, la asignación, a partir de este año, del 2,5 % del PIB para Defensa permitirá desarrollar grandes proyectos para dotar a las Fuerzas Aéreas y mejorar significativamente las condiciones para la ejecución de misiones de combate, como la incorporación de aviones F-16, que hacen la transición a las plataformas F-35.
El famoso actor estadounidense John Malkovich subió al escenario del Teatro Nacional de Timişoara el jueves y el viernes, en representaciones con la obra «Comedia Infernal», un estreno absoluto para la ciudad y un momento cumbre de la Capital Europea de la Cultura. «Comedia Infernal» es un espectáculo que su autor, el austriaco Michael Sturminger, que también firma la dirección artística, escribió especialmente para Malkovich, construyendo un diálogo entre el lenguaje hablado y el cantado. El universo sonoro está marcado por la música de Vivaldi, Mozart, Beethoven, Haydn, Weber, Gluck y Boccherini. «Comedia infernal» se representó en más de 150 salas de todo el mundo, en países de tres continentes. Doblemente nominado al Óscar, Globo de Oro y BAFTA, John Malkovich ha protagonizado numerosas películas con impacto a nivel mundial. Su personaje de Con Air, Cyrus ‘The Virus’, es conocido como uno de los personajes negativos más impactantes del cine de la segunda mitad del siglo XX.
El fútbol rumano, a la deriva
El poseedor del título en Rumanía, el Farul Constanza (sureste), fue eliminado de las preliminares de la Liga de Campeones de Fútbol por el Sheriff Tiraspol, el campeón de la República de Moldavia. Este se impuso, en casa, por 3-0, en el partido de vuelta de la primera ronda preliminar, tras perder el primer partido por 1-0. Con el Sheriff, fuimos la peor versión de nosotros mismos, dijo el entrenador del Farul, Gheorghe Hagi. El año pasado, el campeón CFR Cluj (noroeste), fue eliminado en la misma fase por un equipo casi anónimo de Armenia. Incapaz de proponer formaciones para afrontar enfrentamientos contra equipos anónimos del este del continente, el fútbol rumano se encuentra actualmente en su versión más débil de la historia. El Farul Constanza, junto con el CFR Cluj, el Sepsi Sfântu Gheorghe (centro) y el FCSB (Bucarest), intentarán ahora conseguir un lugar en los grupos de la última competición continental importante, la Conference League.
Autor: Ştefan Stoica
Versión en español: Brigitta Pana