Un Gobierno más allá de los orgullos
“El Gobierno de los orgullos dejados de lado formado por el Partido Nacional Liberal (PNL), el Partido Social Demócrata (PSD) y la Unión Democrática de los Húngaros de Rumanía (UDMR, por sus siglas en rumano) ha jurado su cargo y ha empezado a trabajar.
Roxana Vasile, 26.11.2021, 17:02
Después de casi tres meses de crisis política, a partir de este jueves, Rumanía tiene un Gobierno con plenos poderes. Sin embargo, es un Gobierno que ni siquiera los analistas políticos más experimentados habrían anticipado hace tiempo en la versión actual. Desde otoño de 2019, después de la destitución a través de una moción de censura, incluso bajo la presión de la calle, del Gabinete socialdemócrata de Viorica Dăncilă, el PNL, animado más o menos de manera imperceptible por el presidente del país, Klaus Iohannis, se propuso intercambiar lugares para que el PSD, su adversario político declarado, pasase a la oposición por lo menos para las próximas dos elecciones parlamentarias. Lo logró un año más tarde, en diciembre de 2020, pero no ganando las eleciones, sino desde el segundo lugar, creando una alianza gubernamental con los partidos que ocuparon el tercer y quinto lugar, la USR y la UDMR respectivamente. Aunque fueran ganadores, los socialdemócratas tuvieron que esperar.
En septiembre, tras cierto descontento con el primer ministro liberal Florin Cîțu, la USR salió del Gobierno y votó la moción de censura presentada por el PSD contra el Ejecutivo del que el mismo USR había formado parte. Dos intentos de formar un Gabinete en minoría, primero de la USR y después de la PNL y la UDMR, fracasaron. Aunque inicialmente el PNL no quería tener nada que ver con el PSD y el PSD quería que se organizaran elecciones anticipadas, las dos formaciones enemigas, junto con la UDMR y apoyadas por las minorías nacionales, han negociado finalmente para crear una mayoría parlamentaria y un Ejecutivo de coalición. Así que, después de varios debates intensos, el Gobierno del PNL, la PSD y la UDMR liderado por el liberal Nicolae Ciucă ha recibido este jueves el voto en el Parlamento con una mayoría cómoda y ha jurado su cargo ante el presidente del país. Orgullos más pequeños o más grandes superados parece haber sido uno de los temas centrales del día. El presidente Klaus Iohannis ha destacado lo siguiente:
La gente está harta de crisis, la gente está harta de promesas. La gente quiere ver hechos, la gente quiere ver resultados. Les invito a entregarlos.
General del ejército retirado, el nuevo primer ministro, Nicolae Ciucă, ha prometido lo siguiente:
Nos comprometemos a hacer todo lo que depende de nosotros para que la situación económica, social y sanitaria de Rumanía mejore. Hemos entendido que más allá de cualquier orgullo y de cualquier adversidad política está el interés de los rumanos.
Marcel Ciolacu, presidente del PSD, ha hablado también de orgullos superados y de acción urgente para la estabilización de Rumanía:
Aumentaremos los subsidios, las pensiones, el salario mínimo y las prestaciones por discapacidad. Además, los jubilados que tienen las pensiones más bajas recibirán ayuda para pagar sus facturas este invierno. Vamos a traer más dinero al presupuesto, pero también a los bolsillos de la gente.
El Gobierno del PNL, el PDS y la UDMR ha empezado ya a trabajar. Quedan por ver los resultados.
Versión española: Monica Tarău