Rumanía, entre elecciones
Tras la primera vuelta de las elecciones presidenciales marcada por el inesperado ascenso de un candidato independiente, surgen inquietudes sobre el futuro del país.
Daniela Budu, 27.11.2024, 11:58
El resultado de la primera vuelta de las elecciones, que supuso una ruptura histórica con los partidos tradicionales, ha tenido importantes efectos en los mercados financieros, sacudiendo la bolsa y aumentando los costes de endeudamiento de Bucarest. Los analistas afirman que los inversores perciben ahora a Rumanía como un país más arriesgado, ya que el candidato que quedó en primer lugar en la ronda tiene opiniones económicas y políticas que se consideran alejadas de los valores europeos.
Entre las medidas propuestas por el candidato Călin Georgescu figuran un tipo impositivo único del 10 %, incentivos para la acumulación de riqueza, gravar a las grandes empresas con el 2 % de la facturación, así como reorientar los fondos europeos hacia los pequeños agricultores y fomentar la libre asociación de los propietarios agrícolas en cooperativas.
Los economistas afirman que su plan económico no es realista y que la separación de Rumanía del mercado europeo supondría un desastre para las empresas locales. Llaman la atención sobre el peligro inminente que corre Rumanía a la luz de los resultados de la primera vuelta. Advierten de que existe el riesgo de que el país caiga en una crisis de la que no pueda salir.
Tras conocerse los resultados de la primera vuelta, la Bolsa de Bucarest cayó casi dos puntos, los costes de endeudamiento del país subieron y los analistas creen que un episodio de euroescepticismo podría provocar la pérdida de fondos de la UE y una crisis financiera.
El trasfondo electoral de Rumanía también ha provocado descontento en el Parlamento Europeo y en la Comisión.
Los medios de comunicación internacionales también se han hecho eco de los acontecimientos, con publicaciones como Financial Times y Bloomberg que han escrito sobre los efectos políticos y económicos de los resultados de la primera vuelta. Bloomberg, por ejemplo, escribe que quienquiera que tome el poder en Bucarest se enfrentará al reto de sanear las finanzas rumanas, después de que la pandemia, la inflación disparada, la guerra de Ucrania y el gasto público hayan puesto al país en una situación difícil. Los analistas de la publicación creen que las rápidas subidas del salario mínimo promovidas por todos los gobiernos de Bucarest en la última década solo han tenido un impacto limitado, ya que las empresas se han visto afectadas por el aumento de los costes laborales y la disminución de la oferta de trabajadores cualificados.
Inmediatamente después de conocerse los resultados, el Financial Times escribía: «Un político prorruso de extrema derecha ha ganado la primera vuelta de las elecciones presidenciales de Rumanía, sacudiendo el establishment político del país».
A raíz de las «preocupaciones externas» surgidas tras la primera vuelta de las elecciones presidenciales, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rumanía afirma que el país está «firmemente» comprometido con la defensa de los valores democráticos, los derechos humanos, incluida la igualdad de género, la lucha contra el antisemitismo, la xenofobia y todas las formas de discriminación. También señala que «todos los esfuerzos de Rumanía en política exterior son inseparables de su pertenencia al espacio de libertades y derechos que garantiza su condición de miembro de la Unión Europea y aliado de la OTAN».
Versión en español: Victoria Sepciu