Rumanía – Alemania, una relación privilegiada
Poco tiempo después de su visita a Washington y antes de su participación en la reunión del Consejo de Europa de Bruselas, el presidente Klaus Iohannis alcanza, en Berlín, un nuevo hito esencial para la política exterior de Rumanía.
Bogdan Matei, 20.06.2017, 14:24
En 2017, se cumplen 50 años desde que Bucarest, en aquel entonces comunista, estableciera relaciones diplomáticas bilaterales a nivel de embajada con la República Federal de Alemania y 25 años de la firma del Tratado de Cooperación en Europa entre Rumanía y la Alemania reunificada. Enemiga, durante la Primera Guerra Mundial y en los últimos meses de la Segunda Guerra Mundial, aliada en la OTAN y socio en la UE, como hoy día, indistintamente de las circunstancias históricas, los rumanos siempre han respetado y admirado a Alemania. La eficacia y la seriedad alemanas son para los rumanos dos de las características básicas de Alemania. No es de extrañar que Klaus Iohannis ganase las elecciones presidenciales de 2014 prometiendo una Rumanía de las cosas bien hechas. Miembro de la comunidad alemana de Rumanía, el presidente Iohannis se siente, según los analistas, a sus anchas en Berlín. El lunes, él conversó con su homólogo Frank-Walter Steinmeier y con la canciller Ángela Merkel sobre las relaciones bilaterales privilegiadas, sobre el estado actual de la UE y las relaciones transatlánticas. En contraste con la visible frialdad instalada recientemente entre Berlín y Washington, la visita que el presidente de Rumanía ha efectuado este mes a la Casa Blanca y sus conversaciones con Donald Trump han sido evaluadas como un gran éxito de la política exterior. También en Berlín Klaus Iohannis ha destacado lo siguiente:
“La relación transatlántica no es una opción política o diplomática. La relación transatlántica es la base de nuestra civilización democrática y debemos conservarla. Mi impresión es que la gente empieza a entender que debilitar esta relación sería un gran error y por lo tanto, deberíamos mejorar esta relación, porque Europa y los EE. UU. se necesitan mutuamente y entre la OTAN y la UE deben existir únicamente colaboraciones con efecto de sinergia.
Por su parte, Merkel ha puntualizado que la relación entre Europa y EE. UU. debe seguir siendo muy buena y que la UE y la OTAN no son competidoras. Además, la canciller ha mostrado su satisfacción por la visión común que Bucarest y Berlín tienen sobre varios asuntos como el brexit, la protección de las fronteras comunes, la inmigración y el terrorismo. Ángela Merkel considera que Rumanía ha realizado progresos importantes en la función del Estado de derecho y ha puntualizado que ralentizar la lucha contra la corrupción no sería una buena idea. El presidente Iohannis ha subrayado que la actual crisis política de Rumanía no afectará su política exterior y los compromisos asumidos en la relación con la UE y la OTAN.