Reacciones tras la caída del Gobierno
Tres meses después de llegar al poder, el Gobierno liberal de Ludovic Orban ha sido destituido por una moción de censura.
Corina Cristea, 06.02.2020, 14:38
Criticado por sus opositores políticos por intentar cambiar las leyes electorales asumiendo la responsabilidad política, sin debate en el Parlamento, y solo unos meses antes de las elecciones locales, el primer ministro liberal, Ludovic Orban, ha caído este miércoles tras una moción de censura iniciada contra su gabinete. Tres meses ha tenido el mandato de este Ejecutivo, el cuarto desde las elecciones parlamentarias de 2016 y el primero de un solo color.
Los socialdemócratas (PSD), en la oposición, que estuvieron en el poder hasta finales de octubre del año pasado, cuando también fueron destituidos mediante una moción de censura, ahora han hecho un frente común con Pro Rumanía, la formación dirigida por el ex primer ministro del PSD, Victor Ponta, y apoyados por la UDMR, han obtenido más votos de lo suficiente para derribar el Gobierno de Orban. Lo que está en juego en la iniciativa no se debe descuidar de ninguna manera: el número de vueltas al que se organizarán las elecciones locales. Ahora está prevista una sola ronda, lo que sería beneficioso para los partidos grandes, entre ellos el PSD. Aunque su popularidad está bajando, el PSD sigue teniendo el mayor número de parlamentarios y alcaldes. En esta situación, para ellos, volver al sistema a dos vueltas propuesto por los liberales, sería una gran desventaja. El PNL, que, en comparación con 2016, ha duplicado el número de seguidores, alcanzando un 47%, según las encuestas de opinión, tiene a su vez muchos alcaldes, pero dicen que dos rondas representan una variante que otorgaría más legitimidad. Además, la caída del Gobierno abre el camino para las elecciones anticipadas, algo deseado por los liberales y también por el presidente Klaus Iohannis, que cree que las anticipadas representan la solución más correcta para el país.
Sin embargo, el procedimiento previsto por la Constitución es complejo. Los intentos de formar un nuevo Gobierno deberían fracasar dos veces en un plazo de 60 días antes de que el presidente pueda disolver el Parlamento. El resultado «conviene tanto al PNL como también al PSD, pero por razones diferentes», ha dicho el politólogo Cristian Pîrvulescu. En su opinión, «el PSD tenía que elegir entre dos males, la elección de alcaldes a dos rondas o elecciones anticipadas, y prefirió las elecciones anticipadas porque, sí, comenzando con esta moción de censura, las condiciones para elecciones anticipadas están abiertas».
«El resultado actual es bueno para el PNL, para el PSD y también la UDMR», ha dicho Radu Magdin. «Para los liberales, es probable que se logre una participación parlamentaria de más del 35%, y para los socialdemócratas y los húngaros es la clave para mantener las elecciones locales a una sola vuelta», cree Magdin. También ha precisado que «el resultado, más allá de fingir una lucha política, muestra serias negociaciones secretas. Solo el tercer partido, USR PLUS, sería el más desfavorecido”.
(Versión española: Simona Sarbescu)