Primer ministro designado en Bucarest
El presidente rumano Klaus Iohannis ha designado al líder del PNL, Ludovic Orban, para que forme un nuevo equipo de Gobierno y redacte un programa gubernamental.
Roxana Vasile, 16.10.2019, 15:24
El presidente rumano de derecha, Klaus Iohannis, ha nombrado este martes, después de las consultas con la mayoría de las formaciones políticas parlamentarias, al líder del Partido Nacional Liberal, Ludovic Orban, para que forme un nuevo equipo de Gobierno y redacte un programa gubernamental y presentarlos al Parlamento para su aprobación. Según el jefe del Estado, el PNL es el mayor partido de oposición y el promotor de la moción de censura mediante la cual la semana pasada el Ejecutivo socialdemócrata dirigido por Viorica Dancila fue destituido. Éste se había quedado en minoría después de que los socios minoritarios de la Alianza de los Liberales y Demócratas de Rumanía (ALDE) abandonaran la coalición gubernamental el pasado mes de agosto. En visión de Klaus Iohannis, entre otras cosas, el nuevo Gobierno del PNL deberá encargarse de la buena organización de las elecciones presidenciales del próximo mes, cerrar el presupuesto del 2019 y construir el del 2020.
Klaus Iohannis:
“El PNL ha sido el único partido que se ha presentado a las consultas y ha dicho directamente que está dispuesto, aunque sea muy difícil, a asumir la gobernación en este período de transición. El Gobierno que será instalado en las próximas semanas tendrá un mandato corto, hasta las elecciones parlamentarias.
El primer ministro designado Ludovic Orban, que tiene a su disposición 10 días para presentarse al Parlamento con el equipo y el programa gubernamentales, ha prometido que sus ministros serán honestos, competentes e íntegros y tendrán soluciones a los grandes problemas de Rumanía. En su opinión, rehacer los equilibrios macroeconómicos, reestructurar el aparato gubernamental, conceder atención a las inversiones en la infraestructura de transportes, sanidad y educación, la independencia real de la justicia o la consolidación del camino europeo de Rumanía son aspectos prioritarios. Al menos en este momento, el único y más importante impedimento en el camino del futuro Ejecutivo es la obtención de los 233 votos necesarios para la investidura por el Legislativo. Por eso Ludovic Orban ha declarado:
“Confío en todos los socios que nos han apoyado para alcanzar nuestro mayor objetivo y estoy convencido de que en nuestros próximo debates identificaremos soluciones para satisfacer las necesidades de los ciudadanos. Retrasar la investidura de este Gobierno significa mantener al PSD y al Gobierno de Dancila en el poder, Gobierno destituido a través de una moción de censura que ya no tiene ninguna legitimidad.
Por ahora, los liberales sólo pueden contar con sus propios senadores y diputados y con los que representan a las minorías nacionales. Casi todas las demás formaciones que han participado en la destitución del Gobierno de Dancila han venido con listas de condiciones o esperan ver qué propondrá el nuevo Ejecutivo. En cuanto al PSD, éste ha precisado que no puede votar por un Gobierno del PNL porque no existe un programa de acción. La primera ministra interina Viorica Dancila, contenta por las nuevas previsiones del FMI con respecto al incremento económico de Rumanía registrado durante su mandato, ha anunciado:
“En calidad de presidenta del PSD y después de los debates con los presidentes de las organizaciones distritales, hemos decidido no votar por el nuevo Gobierno.
Por lo tanto, si fueron capaces de derribar al Gobierno de Dancila, el PNL y los partidos que lo han apoyado deben demostrar que son capaces de reemplazarlo por otro. De todas formas, si la propuesta del presidente de Klaus Iohannis fuese aprobada por el Parlamento, Europa tendría dos jefes de Gobierno con el mismo nombre: en las reuniones de Bruselas, el rumano Ludovic Orban podría saludar al húngaro Viktor Orban.